La velocidad exhibida por Jonathan Rea en los test de Jerez, donde tras ser segundo el miércoles logró el mejor tiempo en la jornada de jueves, por delante de todas las MotoGP presentes en el trazado andaluz y superando incluso el registro con el que Valentino Rossi se hizo con la pole durante el Gran Premio de España.
En un principio se pensó que lo había hecho en un ‘time attack’ con el Pirelli especial de clasificación, pero atendiendo a la información proporcionada por Kawasaki, logró el tiempo durante un simulacro de carrera, lo que hace aún más fascinante su logro… y reabre un viejo debate: ¿hasta qué punto un piloto que triunfa en Superbike puede llegar a hacerlo en MotoGP?
El propio Rea ya soñó durante años con que Honda cumpliera su promesa de ayudarle a dar el salto a los prototipos –en los que ya dejó un gran sabor de boca en 2012 cuando sustituyó a Casey Stoner en dos carreras-, pero la oportunidad no llegó. ¿El resultado? Fichó por Kawasaki, arrasó para lograr su primer título y aseguró haberse olvidado de MotoGP.
Ganado el segundo título, parece que el norirlandés está mucho más centrado en irse a por el tercero y colarse en el olimpo de las motos de serie a la derecha del padre Carl Fogarty y a la izquierda del hijo Troy Bayliss. Pero claro, luego le toca compartir pista con las MotoGP, pulveriza sus cronos y ya hay quienes le colocan otra vez en el candelero.
Cuando algo así sucede, es conveniente no dejarse llevar por las pasiones más tiempo del necesario y, una vez sacudida la estupefacción, analizar desde una perspectiva más global cómo les ha ido en MotoGP a los pilotos que dieron el salto tras ganar en Superbike. Aquí están los 17 pilotos que han logrado vencer al menos una carrera en las dos categorías máximas: prototipos y serie:
Piloto | 500cc - MotoGP | WSBK | TOTAL | ||
---|---|---|---|---|---|
Victorias | 1ª | Victorias | 1ª | ||
Marco Lucchinelli | 6 | 1980 | 2 | 1988 | 8 |
Mick Doohan | 54 | 1990 | 3 | 1988 | 57 |
Kevin Magee | 1 | 1988 | 7 | 1991 | 8 |
Pierfrancesco Chili | 1 | 1989 | 17 | 1995 | 18 |
John Kocisnki | 4 | 1991 | 14 | 1996 | 18 |
Regis Laconi | 1 | 1999 | 11 | 2001 | 12 |
Makoto Tamada | 2 | 2004 | 3 | 2001 | 5 |
Garry McCoy | 3 | 2000 | 1 | 2004 | 4 |
Alex Barros | 7 | 1993 | 1 | 2006 | 8 |
Troy Bayliss | 1 | 2006 | 52 | 2000 | 53 |
Chris Vermeulen | 1 | 2007 | 10 | 2004 | 11 |
Max Biaggi | 13 | 1998 | 21 | 2007 | 34 |
Carlos Checa | 2 | 1996 | 24 | 2008 | 26 |
Marco Melandri | 5 | 2005 | 19 | 2011 | 24 |
Ben Spies | 1 | 2011 | 14 | 2009 | 15 |
Nicky Hayden | 3 | 2005 | 1 | 2016 | 4 |
Cal Crutchlow | 2 | 2016 | 3 | 2010 | 5 |
En este caso particular, interesan aquellos cuyo sendero victorioso comenzó en el Campeonato del Mundo de Superbike y encontró posterior réplica en 500cc o MotoGP. En este caso, la lista se reduce a seis nombres:
MICK DOOHAN
No necesita presentaciones. Todo el mundo sabe quién era ese australiano que enlazó cinco títulos del medio litro entre 1994 y 1998, haciéndose dueño y señor de la categoría reina ante la oposición de pilotos como Daryl Beattie, Luca Cadalora o Álex Crivillé para lograr un total de 54 victorias.
Pero, mucho antes de eso, en la temporada inaugural del WorldSBK en 1988 disputó dos rondas como invitado. Empezó mal en la primera manga de Sugo, pero pudo imponerse en la segunda. Volvió en el Oran Park australiano y firmó un doblete magistral. No volvió al certamen, por lo que su bagaje global es de un 75% de victorias.
MAKOTO TAMADA
En 1999, en el circuito de Sugo, el mundial de Superbike vio la irrupción de un joven japonés, que volvería como invitado los tres años siguientes. En 2001 llegó su coronación, con un doblete en dicho trazado, que cerca estuvo de replicar el año siguiente, donde fue segundo y primero. Credenciales que le valieron para llegar a MotoGP.
Allí pasó cinco años, pero el mejor fue 2004, cuando logró sus dos únicas victorias. Entre ambos campeonatos apenas sumó cinco triunfos, pero es uno de los ocho pilotos que lograron más de una victoria en ambos. Tras dejar MotoGP retornó a Superbike en 2008, sin éxito.
TROY BAYLISS
La historia de Troy Bayliss se puede considerar a la inversa de la de su compatriota Mick Doohan. Dueño y señor de las motos de serie, conquistó el título en 2001 y se quedó a las puertas un año después. Decidió embarcarse en la aventura de Ducati en MotoGP y, aunque logró algunos podios esporádicos, retornó a Superbike en 2006.
Aquel año salió redondo. Rubricado su segundo título en la categoría, acudió a la cita final de MotoGP en Valencia para sustituir a Sete Gibernau… y ganó. Cumplida esa misión no volvió a la categoría reina: se quedó en el WorldSBK y logró su tercer título en 2008, colgando el casco en lo alto de su certamen favorito.
CHRIS VERMEULEN
Campeón de Supersport en 2003, el australiano comenzaba una evolución imparable que sólo dos años después le pondría a las puertas del título de Superbike, y que le valió un contrato de fábrica con Suzuki para dar el salto a MotoGP en 2006.
Se convirtió en la punta de lanza de la firma de Hamamatsu y, haciendo gala de su condición de especialista en agua, en el Gran Premio de Francia de 2007 logró imponerse bajo un memorable diluvio, otorgando a Suzuki su primera victoria en MotoGP y la única durante casi una década: hasta la lograda en este 2016 por Maverick Viñales en Silverstone.
BEN SPIES
La última gran esperanza estadounidense tuvo una progresión meteórica. Recién llegado de su AMA local, machacó a todos sus rivales en su primera y única temporada en el mundial de Superbike, ganando la mitad de las carreras y brindando a Yamaha su único título en la categoría.
Aprovechó la inercia para irse a MotoGP, alcanzando el estatus de piloto de fábrica en su segundo año, al reemplazar a Valentino Rossi. Su periplo junto a Jorge Lorenzo fue bastante decepcionante, pero en Assen 2011 realizó una carrera intachable para lograr su único triunfo en la categoría y colarse en este selecto club.
CAL CRUTCHLOW
Como sucediera con Vermeulen, conquistar el título de Supersport le catapultó a Superbike, pero el díscolo piloto británico sólo duraría un año en la categoría, en el que se erigió como un auténtico especialista en la Superpole pero donde le falta rematar en carrera. Mejoró notablemente a final de año, logrando tres victorias y acabando quinto.
No quiso esperar y se fue a MotoGP con el Tech 3, donde rápidamente se consolidó como la alternativa terrenal al olimpo del Big 4. Empezó a encadenar podios pero se estancó en Yamaha, así que se fue a Ducati. Un año para olvidar le llevó a aceptar la oferta de LCR para llevar una Honda, y en su segundo año llegó la primera victoria (en mojado en Brno), convirtiéndose en el sexto piloto en ganar en MotoGP tras haberlo hecho en Superbike. Después llegaría la segunda, en Australia y ya en seco.