Cuando Yamaha consiguió su primer título de 500 cc, ya tenía en su palmarés otros once en cilindradas menores. De hecho, el privilegio de ser el primer piloto en ganar un mundial con la firma de los tres diapasones fue el legendario Phil Read en 1964.
Pero Yamaha quería más; quería reinar también en la categoría reina y frenar de una vez por todas el dominio de las motos italianas de MV Agusta. Y eso ocurrió en 1975 y con el piloto más laureado de todos los tiempos al mando: Giacomo Agostini.
A partir de ahí, el resto es historia, ya que en los 80 comenzó una disputa deportiva con Honda que llega hasta nuestros días. Además, cabe señalar que los pilotos que han ganado campeonatos con sus motos forman parte del olimpo del Campeonato Mundial de Motociclismo.
Las Yamaha campeonas de 500 cc
- La primera que pudo acabar con el “antiguo régimen” fue la Yamaha YZR 500 OW23 que la marca llevó al mundial en 1975 (había debutado en 1973 con la OW20)y que puso en manos del catorce veces campeón Giacomo Agostini. Sus experimentadas manos y el nuevo motor de dos tiempos hicieron que superara a la MV Agusta y se convirtiera en la primera 2T que se hacía con un título. Y decimos la primera puesto que los 80 y los 90 fueron de estos potentes motores.
- Los motores de dos tiempos provocaron un cambio en la conducción que aprovecharían los pilotos americanos y australianos, dado que estaban acostumbrados a competiciones en las que se tendía a derrapar. Y el primero que demostró que allí había talento fue el Marciano, es decir, Kenny Roberts, que hizo de la Yamaha la máquina perfecta en los años 1978, 1979 y 1980, desbancando al popular Barry Sheen. El primero de esos años, Roberts utilizó el modelo OW35K de la YZR 500. Además, la OW45 y sus evoluciones OW48 y OW48R, le permitieron repetir, encadenando los tres títulos referidos.
- El siguiente en la lista de campeones con Yamaha de 500 cc fue otro mito: el gran Eddie Lawson, que logró tres campeonatos en 1984, 1986 y 1988 (también ganó el de 1989, aunque con Honda). El primero de esos años, Lawson tuvo a su disposición los 140 CV de la Yamaha YZR 500 OW76, los cuales se vieron aumentados en 5 CV más para el modelo OW81 que le llevó a repetir en el 86. Finalmente, en la temporada de su tercer entorchado, el norteamericano dispuso de la OW98, una de las motos más dominantes de la década que estrenaba un basculante de tipo “banana”.
- La tercera gran racha de victorias llegó con Wayne Rainey, que fue capaz de enlazar hasta tres títulos en los años 1990, 1991 y 1992. En la primera de esas temporadas, el estadounidense tuvo a su disposición la nueva OWC1, la cual aportaba equilibrio al poderoso motor que ya equipaba la YZR 500. Los años siguientes fueron el turno de la OWD3 y la OWE0. Esta última era capaz de entregar 160 CV de potencia pero el fabricante había conseguido que fuera “conducible” para los pilotos, de manera que Rainey se llevó el campeonato no sin cierta dificultad debido al creciente empuje de las Honda, que terminarían dominando la década de los 90.