Tras militar como piloto oficial en las filas de Yamaha, Suzuki o Kawasaki, el australiano Chad Reed llegó a la conclusión de que sólo sería capaz de volver a lo más alto del motocross americano si conseguía tener un equipo a su medida. De ese pensamiento nació el TwoTwo Motorsports, con el que Reed se ha convertido en un verdadero «autónomo» del motocross, con sus pros y sus contras. El australiano goza ahora de la libertad de ser su propio jefe y contratar a la gente que le gusta, aunque también ha aprendido lo que ocurre cuando el patrón se lesiona, que es lo que le ocurría en plena temporada de supercross. Acudimos a su casa, en Florida, para charlar con él sobre su recuperación, los planes de su equipo y también de su vida familiar.
Hola Chad, empecemos por conocer las consecuencias de aquella caída en Dallas. ¿Qué lesiones sufriste?
- «Básicamente, me rompí la vértebra T6, dos costillas, la tibia y el peroné, y además me destrocé la rodilla. La recuperación fue, sobre todo, muy larga. Creo que pasaron cinco meses y medio, casi seis, hasta que volví a subirme a la moto. Casi al mismo tiempo que Villopoto, pero él se había operado la rodilla nueve semanas después de mí. La suya fue una lesión más sencilla, y la mía, algo más compleja. Yo pienso que cuando se hace algo, hay que hacerlo bien, ¿no?».
- Y viendo la acción desde el lado del espectador, ¿cómo has visto la temporada de Dungey? ¿Crees que es más fuerte ahora con KTM que antes con Suzuki?
- «De ninguna manera pienso que Ryan sea más fuerte con la KTM. Él puede estar más motivado personalmente por volver a tener a DeCoster a su lado, pero creo que su rápida adaptación a la moto ha estado marcada también por el hecho de no tener rivales. Él ha crecido con eso, y está claro que ha mejorado mucho de la primera a la última prueba. Ir a las carreras cuando la competencia y la presión son bajas te permite tomar buenas decisiones, animándote a buscar mejoras en la moto entre manga y manga. Él se ha encontrado ante un escenario perfecto para acoplarse a la moto y mejorar. Pero veo positivo que él se haya ido a KTM y ambos hayan triunfado. Desde el punto de vista de un propietario de equipo, es muy sano que tengamos más fabricantes compitiendo y dispuestos a invertir dinero y hacer evolucionar las motos. Así que, sólo puedo dar la enhorabuena a Dungey y KTM».
- ¿Y qué nos dices James Stewart? ¿Crees que el caerse tanto es culpa sólo de su cabeza?
- «Casi… casi me siento mal por él. Es desalentador cuando lo veo como un aficionado y creo que la temporada de motocross habría sido mucho mejor con él. Así que, pensando en el propio deporte, estoy disgustado de que no haya podido estar sano y luchar por el campeonato. No sé si es sólo problema de su cabeza o no, no estoy en su mente, ni he querido estarlo nunca. Pero al ver su cambio a Suzuki sí que me he dado cuenta de que ese equipo es un poco diferente al que tuvo éxito conmigo y otros pilotos».
- La lesión de este año también te ha obligado a perderte el Motocross de las Naciones…
- «Sí, me sentí muy disgustado por perdérmelo, porque es una carrera en la que siempre me gusta estar. El año pasado fue el primero en el que acudir con mi propio equipo y me di cuenta de lo complicado que es organizar todo para enviar las motos, las piezas y lo demás. También supone un gran gasto de dinero al tenerse que pagar el transporte en barco. De todas formas, me gusta ir allí y saludar a viejos conocidos de la temporada en que competí en Europa, y también la fiesta del domingo por la noche es siempre un gran momento, por lo que yo recuerdo».
- ¿Y qué hay del certamen australiano de supercross? ¿Tienes alguna perspectiva de volver a correr allí?
- «No, el campeonato que yo conocía antes, en el que yo milité, ya no existe. Este año comienza un certamen nuevo y no me importaría ir a correr la primera cita, que será en Phillip Island, coincidiendo con el Gran Premio de MotoGP. Ésa puede ser una buena escusa para volver a correr en mi país, y luego acudir a presenciar uno de mis deportes favoritos. Es la última carrera de Casey Stoner en Australia y yo diría que la última de un australiano en MotoGP, así que puede ser divertido estar allí».
- Tú que has cambiado de marca varias veces, ¿qué es más importante, la moto o el equipo?
- «El equipo es lo primero, seguro. He pilotado motos realmente buenas a lo largo de los años, pero sencillamente no tenía buena gente. Más que nada, lo que necesitas es gente que te comprenda y quiera trabajar en tu dirección. Creo que eso es lo que más disfruto al tener mi propio equipo, que la gente la he escogido yo directamente, pensando no sólo en que fueran buenos para mí, sino también en su capacidad para trabajar bien entre ellos. Por eso creo que tenemos una de las escuadras más fuertes ahora mismo».
- ¿Ésa es la razón de los éxitos del año pasado?
- «Sí. Tuvimos poco tiempo para probar la moto antes de que comenzara la temporada 2011, por lo que empezamos un poco abajo, entre los cinco primeros, pero luego acabamos el año luchando por las victorias y el título. En supercross, utilizábamos una Honda casi de serie, mejorada con algunas piezas Pro Circuit y que en el equipo terminamos de poner a punto. No es una ciencia aeroespacial. Todo el mundo dice que esas motos oficiales son una gran ventaja, pero en realidad sólo lo son si realmente sabes qué hacer con ellas y cómo ponerlas a punto. El noventa y nueve por ciento de los pilotos no saben cómo sacarles partido y te encuentras con muchas motos oficiales que sólo son un montón de dinero desaprovechado».
- Tanto Ben Townley como Ryan Villopoto han sonado como posibles fichajes para tu equipo, ¿hay alguien todavía en tu punto de mira?
- «Sí, hay un tío que tiene serias opciones de estar dentro del equipo, y ése soy yo mismo. No es mala cosa, porque honestamente me gusta la mitad de mí».
-¿Y has llegado a pensar en fichar a alguien de Lites?
- «Realmente no tengo ninguna intención de tener a un piloto en Lites. Ninguno, a no ser que alguien venga y me pague un montón de dinero. A finales de 2010 estuve muy cercano a Mitch Payton –Pro Circuit- y tenía acceso a todo lo que hay en su tienda. Andaba por allí casi como por mi casa. Nadie me negaba el acceso a ningún sitio, de modo que tuve la oportunidad de ver todo el trabajo y la cantidad de gente que implica contar con un equipo en Lites, y de ninguna manera me quedaron ganas de tener yo uno. Él no está ganando carreras, y eso siendo el equipo más laureado en esa categoría. Supone un esfuerzo muy muy grande estar allí, no sólo por el presupuesto, sino también por la gente y todo lo demás. No creo que con sólo tres años de experiencia nosotros estemos preparados para ello en el TwoTwo Motorsports».
- ¿Qué tipo de apoyo recibes de Honda y en qué ha cambiado de cara a 2013?
- «No habrá muchas diferencias al respecto, creo yo. Estaré sobre una moto oficial y tendré acceso a su pista de entrenamiento y todas las piezas especiales. Así que será muy similar a lo de 2012. Pienso que veremos a los mismos trabajando en nuestro equipo, a no ser que fichemos a algún piloto más, ante lo cual por supuesto deberíamos contratar a más personal».
- Háblanos un poco de tu vida familiar. ¿Cómo es el tener hijos y mezclarlos con tu vida profesional?
- «La vida familiar, y el mero hecho de ser padre, resulta fantástico. Te aporta otra perspectiva de la vida y te das cuenta de que hasta ese momento estabas empleando un montón de tiempo y energía en cosas que realmente no tienen importancia. Ahora que he tenido esta lesión he podido pasar mucho tiempo con mi hijo Tate, que me recuerda mucho a mí cuando tenía su edad, porque siempre está deseando salir fuera a montar en su bici, y nunca se asusta cuando paso a su lado con mi moto. La pequeña por ahora parece más calmada. Dicen que las niñas son más fáciles al principio, pero que cuando crecen resultan un poco más complicadas. Pronto lo sabremos. En cualquier caso, mi mujer Ellie y yo estamos muy contentos de tener uno de cada sexo y que están perfectamente sanos y sean unos niños normales. Yo estoy encantado y siento que mi vida está completa. Puedo asegurar honestamente que estos dos niños significan más para mí que cualquier otra cosa que haya esta casa».
- Sabemos que has estado trabajando en un libro autobiográfico. ¿Cómo va eso?
- «Oh, sí, el temido libro. Puede que la peor iniciativa que haya tenido nunca. Quiero asegurarme al cien por cien de que lo que yo firme me haga sentir orgulloso, porque he leído las biografías de otros deportistas y no he tenido la sensación de conocer realmente al protagonista. Lo hacen como por obligación, con el fin de cobrar el cheque cuanto antes, pero yo sólo quiero tener un libro que represente mi vida tal y como ha sidfo. Estuve casi seis meses charlando por las noches con el escritor, contándole mi vida, y luego, cuando leía lo que él había escrito me daba cuenta que no reflejaba verdaderamente la realidad. Así que todavía estamos en ello, aunque vamos con un año de retraso y no me sorprendería que se retrasara más».
- También nos consta que eres un gran aficionado a los karts y te has construido un circuito hace poco, ¿qué hay detrás de eso?
- «Yo creo que es como volviera a ser un niño de nuevo. Recuerdo que de pequeño siempre deseé tener un kart y un circuito para él. Tampoco soy de ésos que se gastan cientos de miles de dólares en coches o algo así. Vehículos que cuestan una estúpida cantidad de dinero y sólo sirven para ir lo más rápido posible por la carretera y acabar en la cárcel. Yo prefiero divertirme de otra manera, compitiendo un poco en karts para pasar el rato con mis amigos. Tenemos un circuito muy divertido, y también una pista ovalada como si fuera de la NASCAR. Es un óvalo pequeño, pero suficiente para pasártelo bien. Así que sí, me gasto mi dinero en esto, y quizá tenga el deseo de competir algún día en coche y esto es un buen primer paso, aunque yo lo hago sólo por diversión».
- ¿Crees que has conseguido todo lo que te habías propuesto o aún te quedan metas por alcanzar?
- «Esto lo aprendí de un entrenador que tuve, Jeff Spencer, que como atleta tú nunca llegas al final, siempre estás pensando en ser mejor. Hay muchas cosas que quisiera lograr. Muchas en el deporte; otras, fuera de él. Me considero una persona emprendedora. Mi mente funciona constantemente. Y tengo una mujer que es bastante similar. Ella está motivada en llevar la marca TwoTwo y todo esto a lo más alto, igual que yo, y en eso estamos ahora. Tenemos algunas ideas interesantes para hacer cosas que nadie ha hecho hasta la fecha en este deporte».
Ni Chad ni Ellie han querido desvelarnos cuáles son esos originales planes, de manera que estaremos atentos a los pasos del TwoTwo Motorsports Team.