Doblete de Marco Melandri en Brno

Pocos apostaban en Brno porque un piloto diferente a Max Biaggi pudiese sumar las dos victorias en juego. Sin embargo, el piloto romano no se sintió cómodo en la pista en todo el fin de semana, ni en seco ni en mojado, y completó uno de sus peores resultados globales, precisamente en el circuito donde había ganado en 11 ocasiones en todas las categorías que había disputado. Costará más decir a partir de ahora que Brno es el circuito talismán de Biaggi.

Ha sido su mayor rival el que se disfrazó de «Pirata» en el trazado checo, sumando su primer doblete desde que compite en el campeonato y el primero también de BMW en SBK. Con las cinco victorias que acumula esta temporada (las tres últimas consecutivas), Marco Melandri es el piloto con más triunfos del año, por delante de Biaggi y Checa que suman cuatro. De una tacada, ha recortado 27 puntos a su compatriota y ya está solo a 21 en la provisional. Nunca ha estado tan cerca como ahora de luchar por el título, ya que en 2011 apenas tuvo ocasión por la contundente autoridad de Checa, aunque se proclamó subcampeón en su año de «rookie» con Yamaha.

Melandri es el gurú que BMW ha estado buscando estos cuatro años en el Mundial de SBK. Con él han llegado las victorias y con él podría cerrarse el proyecto más ambicioso de la historia de SBK, que a punto estuvo de fracasar. Precisamente ahora, que por primera vez lideran el campeonato de marcas, ha llegado la decisión de retirar el equipo de fábrica a partir del próximo año. En 2013 será una estructura privada (apoyada desde Alemania) la que desarrollará las S 1000 RR y suyos serán los éxitos o fracasos. Así que BMW, como marca, tiene la mejor y la última oportunidad de retirarse a lo grande. Si no regresa Ducati con su Panigale, en 2013 solo Aprilia contará con estructura de fábrica en SBK.

Suenan sirenas de MotoGP en la sede de Múnich, lo que sería un paso completamente lógico con la nueva categoría de las CRT, ya que BMW cuenta con el motor de serie más potente. Aunque no se descarta su participación en el futuro con un prototipo. Si hay alguna marca europea con potencial económico para competir con las japonesas esa es BMW; y más ahora que su «archirrival» Audi ha tomado el control de Ducati.

El tiempo inestable fue protagonista todo el fin de semana. Ya había aparecido a última hora en la Superpole. En ésta, sorprendentemente se eliminaba Biaggi en la primera tanda de 14 minutos, a la que sí accedía por primera vez David Salom. En la Superpole 2, la rotura del radiador de Giugliano provocó una múltiple caída en la que se vieron afectados Smrz, Badovini y Salom. Tras suspenderse la segunda tanda, empezó a llover y se reanudó una Superpole declarada en mojado y sin Badovini y Salom en pista. El mejor tiempo del sábado lo consiguió Tom Sykes, que sumó en Brno su séptima Superpole de la temporada en 9 carreras.

La lluvia volvió a aparecer el domingo y el circuito amaneció encharcado, con un warm up en mojado, pero amainó antes de la carrera. A pesar del sol, la primera manga comenzó con el asfalto húmedo y sin apenas carril. La formación de la parrilla fue una lotería en la que decidir si salir con rayados o jugársela a lisos. La mayoría acertó con los slick, alguno como Giugliano calzó mixtos y se dejó ver en cabeza las primeras vueltas, pero pronto se comprobó que era un error y se fue al suelo en la vuelta 4.

Las primeras vueltas fueron tan lentas como entretenidas. Los pilotos elegían diferentes trazadas en las curvas y nos dejaron imágenes espectaculares en todo el ancho de la pista. Aunque Sykes salió como un cohete, la gran sensación de la primera parte de carrera fue Maxime Berger, que rodó cuatro vueltas en cabeza. Junto a Berger, otro de los no habituales se situó a su estela, el jovencísimo Loris Baz sustituto de Lascorz en Kawasaki.

La pista se fue secando, los tiempos bajando y Berger desapareció de las primeras posiciones, que tomaron entonces Sykes, Rea, Checa, Laverty y Melandri, con Baz que aguantaba el tirón. Biaggi mientras tanto rodaba perdido en posiciones intermedias y sin síntomas de mejoría. Sykes comandó el grupo hasta las vueltas finales, pero por detrás llegó Melandri enchufadísimo y que se había deshecho de Laverty, Baz, Checa y Rea en el mismo punto en vueltas sucesivas. Y ahí, en la misma chicane, pasó Sykes faltando dos vueltas y ya nadie pudo con él. Sin embargo, no acabó la emoción ya que en la penúltima vuelta Rea, que rodaba tercero por detrás de Sykes, trató pasar a su compatriota que le cerró, provocando un brutal «highside» del norirlandés. Para no atropellarle, Checa clavó su Ducati y Baz le pasó. Mientras Melandri celebraba su tercera victoria del año, el equipo español Provec Motorcard hizo un doble podio histórico con Sykes y Baz. Checa finalizó cuarto, aunque luchó el podio hasta el final, marcando la vuelta rápida de carrera en este último giro.

En la segunda manga brilló el sol y pudimos ver el nivel real de pilotos y motos en Brno. Sykes demostró que tanto en mojado como en seco va rápido con la Kawasaki y desde el inicio se colocó en cabeza. El británico abrió hueco, hasta que Melandri tomó el mando en el segundo grupo y se enganchó al colín de Sykes. Checa trató de engancharse, pero nunca llegó a rodar con el dúo, aunque durante la primera mitad de carrera la diferencia apenas superaba el segundo.

A falta de 5 vueltas Melandri, se puso en cabeza por primera vez y cogióunos metros de distancia. Pero el italiano casi echa al traste un fin de semana redondo después de bloquear la rueda delantera y salirse de la trazada en una curva. Quedaban todavía 5 vueltas, pero la distancia de Sykes se había ido a las 7 décimas y podría haber sido definitiva si Marco hubiese optado por una actitud más conservadora… Nada más lejos. Melandri volvió a engancharse a la rueda de Sykes en el penúltimo paso por meta y lo adelantó en la última vuelta, sumando su primer doblete (y el de BMW) en SBK.

Checa subió al podio por octava vez esta temporada. El español acabó con problemas de agarre y se desentendió de la lucha por la victoria, controlando a Biaggi que acabó tras él. El «Toro» se mostró satisfecho con su fin de semana en Brno: «Irme con un 4º y un 3º no es un mal resultado, teniendo en cuenta que perdemos mucho en aceleración. En la primera carrera he tenido la suerte de evitar a Rea que estaba en el suelo y en la segunda he perdido “grip” y no he podido entrar en la lucha con Sykes y Melandri». Tampoco tuvo suerte el domingo Salom, que se retiró en ambas mangas.