La sorpresa no fue que Estados Unidos ganara, una vez más, en el Motocross de las Naciones. Lo extraño es que lo hiciera por la mínima y bajo la intensa presión del equipo local: Francia. Los galos se dejaron la piel y, como si estuvieran bajo la influencia de la poción mágica de Panoramix, fueron los únicos en plantarles cara a unos confiadísimos «Yankees» que aterrizaban en el país galo con ganas de llenarse la barriga con foie del bueno, bueno.
Aun así, la armada americana daba realmente miedo nada más conocer sus nombres. Auténticos linces de la especialidad que se vieron sorprendidos por la ganas de los franceses, pero a los que sometieron en la última manga, cuando vieron las orejas del lobo. ¿España? España no estuvo mal. Tuvimos caídas, problemas mecánicos, pero vimos un equipo comprometido, compenetrado y con muchas ganas de hacerlo bien. Barragán, Campano y Butrón lograron que nos sintiésemos orgullosos de ellos con una notable octava posición.
1ª Carrera (MX1 MX2)
En la manga inaugural, Chad Reed ganó su segunda carrera en un MXdN (la primera fue en 2001). Su dominio fue absoluto al liderar la prueba de cabo a rabo. Roczen, por su parte, fue remontando tras una mala salida y, durante cuatro giros, estuvo incordiando a Dungey hasta que lo adelantó justo cuando cayó un diluvio que duró poco más de cinco minutos. El campeón del mundo, Cairoli, no pudo entrar en la pelea por el podio al caerse nada más darse el pistoletazo de salida. El italiano quiso reemprender la marcha, pero el maltrecho manillar de su KTM se lo impidió, a parte de que se quejaba de un poco de dolor en la mano izquierda. Chistophe Pourcel tampoco tuvo demasiada suerte debido a que una piedra rompió sus gafas. El francés perdió un buen puñado de posiciones al tener que parar en el «pitlane» para coger otras. Butrón también tuvo que retirarse antes de lo convenido al romper su KTM, mientras que Barragán lograba finalizar en una excelente séptima posición.
2ª Carrera (MX2 Open)
Esta fue la segunda vez que Gautier Paulin ganaba sobre una 450 4T. Junto con Herlings, que se estrenaba con una SXF450, Roczen y Strijbos, el galo salió como un cohete. Villopoto, no logró firmar la misma salida, pero su ritmo fue lo suficientemente rápido como para ir remontando posiciones hasta llegar a la tercera plaza, justo por detrás del francés y el holandés, después de poner la guinda de la serie con una espectacular lucha con Roczen.
Caídas de Baggett, Wilson (fuerte, bajando una colina), Anderson, Lupino y Musquin, que se ha tocado con Campano saliendo de una curva. Éste, cumplió con un noveno puesto al no sufrir ningún incidencia, mientras que, Butrón no tuvo otra opción que usar su segunda moto. En esos instantes, España era séptima… Por cierto, Matt Moss no logró arrancar la moto en la salida y Australia se hundió en la clasificación.
3ª Carrera (MX1 Open)
Si quedaba alguna duda sobre la autoridad de los EE.UU., Villopoto y Dungey firmaron la primera y segunda plaza, respectivamente. Una victoria que eleva a los Estados Unidos a lo más alto del podio por séptima vez consecutiva.
Villopoto hizo el «holeshot» seguido de cerca por Bobryshev y Dungey en la tercera plaza. A Pourcel tampoco se le dio mal la salida y fue tras el trío de cabeza hasta que se fue al suelo. Al parecer, el neumático de su rueda trasera estaba deshinchado. Con ese desliz, las esperanzas de Francia por la victoria se fueron al traste. Por su parte, el ruso no pudo mantener el ritmo de Dungey y pasó a la tercera posición, plaza que perdió a los pocos minutos al pararse su Honda. Por suerte pudo seguir. Respecto a los nuestros, Carlos Campano sufrió una caída, pero sin consecuencias y pudo continuar y, desde posiciones muy atrasadas. Barragán fue muy regular y logró, junto con los dos andaluces, que España volviera al top ten del motocross mundial.