Kyle Smith, está claro, no es español, nació en la ciudad inglesa de Yorkshire pero se trasladó a España con 7 años de edad. El británico reside desde entonces en la localidad alicantina de Benissa donde ha podido celebrar, con todos sus vecinos y con sus compañeros del Moto Club Altea, la consecución de este título.
Después de la última carrera de Valencia, que cerraba el campeonato y en la que se proclamó campeón de la tercera edición de la Kawasaki Ninja Cup charlamos con él.
No parecía que te estuvieras jugando el título en la última carrera
La verdad es que tenía que terminar entre los seis primeros y no tenía que ganar la carrera, pero desde el viernes yo ya sabía que tenía un buen ritmo, buen ritmo para poder ganar, pero claro no quería arriesgar y cualquier caída o tontería me podía fastidiar el título. En los entrenamientos hice la pole, hice una buena salida en carrera y al salir primero sabía que si marcaba mi ritmo podía ganar la carrera. Así que mejor imposible, gané la carrera y el campeonato.
Pero, un ritmo tan fuerte desde el inicio, ¿no era correr demasiados riesgos?
La verdad es que comparándome al resto de los pilotos, siempre he tenido mucha confianza en las primeras vueltas con los neumáticos Michelin un poquito fríos. Noto falta de confianza por parte de los otros pilotos pero yo sí que tengo confianza para tirar esas primeras dos vueltas.
¿Qué ha significado ganar esta tercera edición de la Kawasaki Ninja Cup?
Es mi tercer año corriendo en velocidad, el primero con una 600cc y al comienzo del año no esperaba poder ganarlo. Es un honor. Puede que haya parecido en cierto modo fácil desde fuera pero mi equipo, el Borja Sport Team ha trabajado muy fuerte con la moto, que desde el principio de la temporada ha ido muy bien y eso ha sido una gran ayuda.
En las carreras del CEV en las que no ha habido Ninja Cup no te has quedado en casa ¿qué tal la experiencia en Supersport?
Muy bien, la verdad es que sólo pude participar en dos carreras y me costaba un poco poner la moto a punto. No pude hacerlo todo lo bien que quería pero ha sido una buena experiencia que quizás me sirva para el próximo año, a ver si puedo seguir con Kawasaki y hacer StockExtreme o incluso Moto2, que también me gustaría. El premio de ganar la Ninja Cup es una Kawasaki ZX-10, así que si no me sale una oferta de algún equipo podría correr con esa moto en StockExtreme. Esa sería una opción y así aprovecharía el premio de ganar la Ninja Cup.
¿Alguna dedicación especial de este triunfo?
Sí, quiero mandar muchas fuerzas a mi amigo Néstor Jorge, que va a empezar una recuperación nueva. También dar las gracias a mis padres, que me han apoyado siempre, a mi equipo,el Borja Sport Team y a mis patrocinadores.