Marc Coma (KTM) llega a España con su segundo trofeo del Dakar

Su victoria en el Rally Argentina-Chile fue fruto de la labor de equipo. Marc Coma (KTM), vencedor del Dakar 2009 Argentina-Chile, compareció ayer ante los medios de comunicación para hacer una valoración de la 31ª edición del Rally más duro del mundo, la primera en su historia que se celebra lejos de África. Marc hizo un repaso a su participación, compartiendo los buenos y los malos momentos de una carrera que ha destacado por su extrema dureza. El líder del equipo Repsol Dakar se moja también sobre el Dakar 2010: ¿África o Sudamérica?

Pablo Bueno. Fotos: Lluís Llurba/Repsol

Marc Coma (KTM) llega a España con su segundo trofeo del Dakar
Marc Coma (KTM) llega a España con su segundo trofeo del Dakar

El Equipo Repsol KTM Dakar ha vuelto a España con el trofeo de vencedor del Dakar 2009 en la categoría de motos. Una victoria conseguida, por encima de todo, gracias a la consistencia y pericia de Marc Coma, su líder natural, pero que no podría hacerse materializado sin el sacrificio y labor de equipo de sus inseparables escuderos Jordi Viladoms y Gerard Farrés. Y por supuesto, tampoco sin la experiencia y la organización orquestada por Jordi Arcarons, como director de una orquesta que ha sabido mantener el compás incluso en las etapas donde ha desafinado un poco.


Marc Coma (KTM) quiso agradecer el trabajo de todo el equipo y el apoyo de aficionados, patrocinadores y prensa en su comparecencia ante los medios nada más llegar a España (acto que tuvo lugar en la sede de Repsol en el Paseo de la Castellana de Madrid). A la vez fue preguntado por los momentos críticos donde su victoria pudo peligrar y el piloto de Avià comentó sin tapujos el incidente del aceite de la segunda etapa: "En una zona con la vegetación muy alta, debí enganchar en la rueda un trozo de las alambradas que separan los terrenos en Argentina. Esto debió dañar el radiador de aceite, lo que causó una fuga importante. En el control de paso siguiente paré para reparar la avería y apareció por allí un hombre que se puso a hacer fotos. Le pedí que me dejara trabajar tranquio, porque era un momento muy tenso y él me preguntó si me podía ayudar en algo. Yo le dije que necesitaba aceite de motor. El hombre desapareció y al cabo de un rato volvió a aparecer con una lata de un litro de aceite. Podía haber terminado la etapa activando el mecanismo que anula el radiador de aceite, pero me hubiera costado un retraso de 40 minutos".

Otro de los momentos críticos en el Dakar 2009 de Marc Coma tuvo que ver con los neumáticos: "Este año ha habido un cambio de neumáticos de la marca Michelin a Pirelli y esto ha provocado algunas complicaciones con la utilización de los mousses -una esponja que se coloca dentro del neumático, sustituyendo la cámara, que permite que la rueda sea maziza y así prevenir los pinchazos-. No habíamos logrado un óptimo desarrollo y sabíamos que en algunas etapas tendríamos que salir con la cámara tradicional, aun a riesgo de pinchazos.En una de estas etapas pinché, lo que hubiera ocasionado una pérdida de tiempo importante, con la suerte de que Jordi Viladoms andaba cerca de mí y me cambió su rueda. Gerard Farrés se la cambió a Jordi cuando le alcanzó y el pobre Gerard tuvo que esperar al camión de la asistencia".

Dakar 2010: ¿África o Sudamérica?
Antes del 3 de enero, parecía un hecho que el Dakar 2010 volvería a disputarse en tierras africanas, sin embargo, tras el éxito y la espectacular respuesta de los aficionados al mundo del motor en el Dakar 2009 Argentina-Chile, lo cierto es que la organización (Amaury Sport Organisation) no lo tiene tan claro. Marc Coma es muy sincero en este aspecto: "Si tengo que hablar con el corazón te diré que  el sitio natural de esta carrera es África y me gustaría que volviera allí. En primer lugar, porque significaría que la situación mundial ha mejorado y el problema terrorista está olvidado. Sin embargo, la organización ha diseñado una carrera magnífica en Sudamérica y ha sido igual o más espectacular que en África".

Jordi Viladoms y Gerard Farrés, mochileros de Marc Coma, comentaron algunas de sus aventuras y desventuras durante el Dakar, donde su sacrificada labor de apoyo al líder fue una de las claves del triunfo.

Jordi Viladoms
"El mejor momento del Dakar y el peor, en lo personal, coincidieron para mí el mismo día, con lo que se me quedó un sabor agridulce. Pues a la vez que conseguía la victoria de etapa, nuestro amigo y compañero Cristóbal Guerrero sufría un grave accidente. Evidentemente, también la llegada al final de la última especial, con Farrés y Coma, todos sanos y salvos, y con la victoria en la mano fue muy emotivo. La conclusión del todo el trabajo que he realizado en los últimos tres años".

Gerard Farrés, a quien le tocó ir unos cuantos pasos por detrás de ambos, y tuvo como compañeros de viaje a pilotos profesionales, amateurs y de todas las nacionalidades, salió al paso de quienes han criticado la falta de solidaridad de una gran parte de los pilotos de este Dakar Sudamericano, a diferencia de la actitud de compañerismo y solidaridad que se ha dado siempre en África: "Lo cierto es que yo he visto la misma actitud solidaria y de colaboración en esta edición que en otras anteriores. Nos hemos ayudado unos a otros, porque en una carrera tan larga, seguro que algún día te toca a ti pasar por problemas y si alguien puede echarte una mano, es como una salvación. El día que tuve que esperar al camión con la rueda pinchada, muchos pilotos se interesaron por mí y me ofrecieron ayuda. Estuve más de cinco horas esperando, fue desesperante, tanto que llegué a llorar, porque en principio no estaba en los planes que el camión de asistencia me ayudara a mí. Sólo a Jordi y a Marc. Sin embargo, cuando pasaron, me dieron una rueda y pude continuar. Probablemente se dieron casos de insolidaridad, pero debieron ser la excepción. La llegada del último día, cuando vi las motos de Marc y Jordi aparcadas, y nos abrazamos fue un momento inolvidable".

Jordi Arcarons, director del equipo Repsol KTM Dakar, quiso destacar la tensión vivida en el seno de la escuadra española: "En una carrera tan larga, son muchos los momentos de tensión. Son muchas circunstancias cambiantes a tener en cuenta, muchas incidencias que hay que solucionar sobre la marcha, sobre todo teniendo en cuenta que era todo nuevo para nosotros, y que no se te puede escapar nada. Y el mejor momento llegó cuando los tres pilotos llegaron a la meta de la última etapa. Fue un momento mágico".