La exposición Box Repsol es sin duda una de las más espectaculares en el Museo de la Moto Made in Spain situado en la localidad madrileña de Alcalá de Henares, ya que allí se pueden ver auténticas piezas de historia del motociclismo como la Derbi de 50cc que llevó Ángel Nieto en 1971, la Honda NSR 500 con la que Mick Doohan logró el segundo de sus cinco títulos mundiales en el medio litro en 1995, o la Honda RC213V de 2019 con la que Marc Márquez logró el que hasta ahora es el último de sus seis títulos mundiales de MotoGP.
Saliendo del asfalto, uno de los grandes reclamos era la Montesa Cota 4RT con la que Toni Bou elevó a 36 su cuenta de títulos mundiales el año pasado; a la que ahora se une otra joya histórica del trial: la Montesa Cota 4RT con la que el mismo Bou inauguró su casillero de títulos mundiales allá por 2007.
Por aquel entonces, el piloto de Piera acababa de fichar por el equipo Repsol Honda, cambiando la Beta con la que había ganado su primer GP mundialista por la mítica máquina de Montesa, con la que ha logrado los títulos mundiales de TrialGP y X-Trial (antes outdoor e indoor) en todas las temporadas desde entonces.
De esta forma, el Museo de la Moto se ha hecho con la máquina que inició la historia más grande jamás contada en el mundo del motociclismo y que el propio Bou ha definido como su preferida al cederla para la exposición: "Un momento clave en mi carrera, un momento inolvidable para mí, que no me esperaba", admite el catalán, que desgrana las virtudes de una moto de la que asegura tener un recuerdo impresionante:
"Es una moto muy diferente a las demás con las que he corrido, porque ya cambió el chasis de 2007 a 2008, y desde entonces todas son negras, así que de lejos ya veo cuál es. Me trae muy buenos recuerdos, con el depósito plano, una moto súper ligera, aunque parezca imposible es una moto que pesaba dos kilos y medio o tres kilos menos que la actual, por reglamento", explica Bou, que también rememora cómo fue su llegada al equipo Repsol y cómo fue la misma moto con la que tuvo que disputar los dos mundiales en aquel 2007:
"Entrar en este equipazo para mí era un sueño, era mi objetivo en mi carrera. Solo tuve una moto oficial mía en ese momento, lo que la hace aún más especial, porque los dos títulos de indoor y outdoor fueron conseguidos con esta moto. Actualmente va de museo en museo, pero algún espero poder quedármela y tenerla en el comedor de casa", confiesa el mejor piloto de la historia del trial, que no obstante está encantado de verla junto a otras máquinas legendarias:
"Contento y orgulloso de que esté al lado de motos espectaculares. Al final, Repsol ha conseguido muchísimo en el deporte del motor, y que estén mis dos motos aquí es algo que me da un gran orgullo y estoy muy contento de haberlo conseguido con el deporte del trial", concluye Toni sobre la exposición de Box Repsol, que proemte una experiencia inmersiva que se puede visitar todos los fines de semana comprando la entrada en la web del Museo de la Moto Made in Spain o allí mismo de forma presencial.
