Durante los entrenamientos Michael Dunlop mostró su potencial en todas las categoría, sorprendiendo especialmente con la moto grande (SBK), porque en Supersport ya sabíamos que era uno de los favoritos desde el principio. Esto lo corroboró el lunes cuando ganó mandando con autoridad en la primera carrera de Supersport. Ese fue para él un día mítico, en el que igualó a victorias en el TT a su desparecido padre, Robert Dunlop. Pero es que también ganó Superstock, superando a Robert y poniéndose en camino de igualar el récord de Ian Hutchinson, quien en 2010 logró ganar en todas las categorías, cinco en aquel TT. Así que cuando el miércoles se acercó la hora de la verdad todo el mundo en la Isla estaba pendiente de si Michael seguiría ganado en este TT ya glorioso para él. Pero antes de que las motos de 600 cc tomasen la carretera principal del pueblo de Douglas, les tocó el turno a las eléctricas en el TT Zero.
La categoría de las motos eléctricas lleva ya desde 2009 disputándose en el TT y durante los últimos años ha visto destacar a una marca, la americana MotCzysz que desde el principio apostó por la potencia máxima. Su estrategia le había valido para ganar con el veterano Michael Rutter el año pasado y marcar el récord de vuelta rápida, pero este año tenía un nuevo y poderoso rival, John McGuinness y la Mugen Shinden. Una moto japonesa, perteneciente a la compañía que en su día creo el hijo del creador de Honda. La sombra del gigante nipón y los entrenamientos que McGuinness había hecho en el país del sol naciente le daban mucha credibilidad al proyecto. Así que se alinearon en la línea de salida las motos eléctricas para disputar la carrera a una sola vuelta, con los compañeros de equipo en el Honda TT Legends, McGuinness y Rutter, como máximos favoritos. Mc lideró parte de la vuelta, casi hasta el final, pero ya habiendo bajado de la montaña Rutter apretó al máximo, eso sí sin hacer ruido, y consiguió una ventaja de menso de dos segundos, que le sirvió para ganar y marcar el nuevo record de la categoría, un registro de 109,675 mph, que no está nada mal. El podio lo completó Robert Barber con la moto de la Universidad de Ohio. Ian Lougher, veterano que se retira este año, rindió homenaje al japonés Yoshinari Matsushita, que falleció el primer día de entrenamientos tras una caída en Ballacry, sobre la moto de Komatti Mirai.
La segunda carrera de Supersport fue el plato fuerte del día y como hemos dicho todo el mundo tenía los ojos puestos en el dorsal número 6 de Michael Dunlop, que está demostrando un nivel altísimo en este TT. La prueba empezó con el grupo muy apretado en el primer puesto de cronometraje situado en Glen Helen, y fue el neozelandés Bruce Anstey (HM Plant/Padgetts Honda) el que tomó las riendas, seguido muy de cerca por Michael Dunlop (MD Racing Honda), a tan sólo 4 décimas. Detrás de ellos y como ya sucedía en la primera carrera venían William Dunlop (MiIwaukee Yamaha), John McGuinness (HM Plant/Padgetts Honda) y Cameron Donald (Wilson Craig Racing Honda). A medida que avanzaba la carrera Anstey iba rodando muy rápido, a pesar de estar con una fuerte gripe, y aumentando su ventaja sobre Michael, que llegaba hasta 3,5 segundos en el paso por meta. William iba perdiendo terreno sobre los hombres de cabeza, pero salir con el número 11 le hace encontrar siempre bastante tráfico, con los pilotos más lentos que hay delante de él. La segunda vuelta fue muy rápida, tanto que Anstey marcó un nuevo record de la categoría 127,8 mph y parecía que Michael lo iba a tener muy difícil para recuperarle el terreno perdido. Más teniendo en cuenta que el irlandés perdió otros 5 segundos en el repostaje. En la tercera vuelta Michael tiró fuerte desde la salida del pit-lane y redujo algo las diferencias, mientras que por detrás McGuinness le iba recortando terreno a William Dunlop. Lo espectacular fue que el grupo formado por McGuinnes, Donald, Hillier rodaba junto pasándose y repasándose en el largo y complicado Circuito de la Montaña de casi 61 km. Al entrar en la cuarta y última vuelta parecía que Michael no iba a poder remontar y perder así las opciones a seguir batiendo récords, en este caso igualar las cuatro victorias en un TT de Phillip McCallen. Pero en cada parcial el pequeño de los Dunlop iba recortando diferencias, hast que alcanzó al grupo formado por McGuinness, Donald y Hillier y los pasó en cuanto tuvo ocasión. A partir de ese momento subió la montaña enloquecidamente y cruzó la meta 2,3 segundos de ventaja sobre Anstey, que seguía rodando a ritmo de record, otra vez 127,8 mph. Pero lo brutal fue que Michael pulverizó en esa última vuelta el record que Anstey le había quitado en la segunda vuelta y lo dejó 128,666 mph. Unos 10 segundos más rápido, sencillamente brutal. Ahora solo le queda ganar el Senior TT, que se disputará el viernes y habrá cerrado uno de los mejores TT de la historia.
Nuestro representante, el piloto almeriense Antonio Maeso, sufrió un grave percance cuando disputaba la carrera de Superbikes el domingo pasado. Ya en la última vuelta y en plena montaña, impactó con el interior de la rápida curva Black Hut, que se hace por encima de 200 km/h. En el golpe se destrozó la rodilla y se fracturó fémur y tibia y peroné. Fue capaz de parar un poco más adelante para ser evacuado en helicóptero hasta el hospital de la Isla donde le intervinieron por primera vez. De ahí voló a Liverpool y el miércoles se sometió a una operación de 6 horas en la que le reconstruyeron la rodilla. En el futuro tendrá que volver a pasar por el quirófano, pero todo ha salido bien y se encuentra en un postoperatorio normal. Desde aquí le mandamos todos los ánimos para que tenga una pronta recuperación.