Con más de 30.000 unidades vendidas en Europa, la Yamaha Ténéré 700 ha sido un éxito de ventas desde que llegó al mercado en 2019, gracias principalmente a sus capacidades en campo sin necesidad de electrónica, a su estética y a su precio. Ahora en 2022 llega la nueva Ténéré700 World Ride que, sobre la versión estándar, incorpora novedades que mejoran su comportamiento off road y en largas distancias, ampliando así el uso y capacidades del modelo.
Desde su lanzamiento la Yamaha Ténéré 700 no había realizado ninguna actualización en el modelo, a excepción de la versión Rally, que incorpora de serie una decoración específica y accesorios como escape o cubre cárter, pero mecánicamente es exactamente la misma moto. El segmento Trail sigue creciendo en ventas y en nuevos modelos, y en Yamaha han decidido no quedarse atrás mejorando su apuesta, ofreciendo esta nueva World Ride como una tercera versión que se une a las dos anteriores, teniendo así tres Ténéré 700 disponibles en su catálogo.
Yamaha Ténéré 700 World Ride: Más deposito, más distancias
Las dos principales novedades que presenta esta Yamaha Ténéré 700 World Ride son el depósito y las suspensiones. El deposito ahora tiene una capacidad de 23 litros -16 en la versión normal- e incorpora dos tapones de llenado, ya que está formado por dos depósitos separados. Esto ayuda a reducir las inercias del mayor peso que ahora supone la gasolina, evitando movimientos amplios del combustible. Para ir gastando gasolina en ambos por igual, un sistema con una bomba eléctrica va utilizando gasolina simultáneamente de los dos depósitos, equilibrando así el nivel haciendo que el reparto de pesos sea siempre el mismo.
Este depósito más grande hace que la moto ensanche significativamente en la parte frontal, teniendo ahora mejor protección aerodinámica que en la versión estándar al quedar más envueltos por el carenado. Esto es gracias también a unas entradas de aire laterales y a una pantalla 1,5cm más alta. El nuevo depósito incorpora también unos protectores integrados, que dan más robustez el conjunto, ya que ahora los laterales están más expuestos en caso de caída, sobre todo en campo.
La parte central mantiene el mismo ancho, haciendo que podamos sujetar bien la moto con las piernas, aunque yendo sentados las puntas de las rodillas nos quedan algo más separadas. El asiento también es diferente, adaptado ahora al nuevo depósito y situado a 890mm. Tiene más mullido y es más blando que el estándar, siendo además algo más plano, por lo que el confort para largas distancias mejora en esta parte también.
Mejores suspensiones y más tecnología
El otro cambio principal son las suspensiones, montando ahora material Kayaba también, pero aumenta 2cm de recorrido en ambos trenes. La horquilla sigue siendo de 43mm de diámetro, pero ahora el recorrido llega hasta los 230mm, mientras que el amortiguador trasero con bieletas cuenta con 220mm de recorrido. Ademas, los componentes internos son totalmente nuevos, con otro valvulado, diferente aceite y distintos reglajes, tanto en horquilla como en amortiguador, y ambos son totalmente ajustables en compresión, precarga y rebote.
También como novedad trae una nueva pantalla TFT de 5 pulgadas con conectividad, sobre la que podemos elegir tres visualizaciones distintas de la información, teniendo una pantalla “Raid”, en la que tenemos dos trips que podemos ir recalando con una botonera en el lado izquierdo del manillar, algo muy útil si queremos hacer navegación con road book.
La World Raid también incorpora un nuevo ABS off road, teniendo ahora un ABS para carrera, este nuevo para campo que desconecta el trasero y mantiene el delantero pero menos intrusivo, y una tercera opción con el ABS totalmente desconectado delante y detrás. Estos modos de ABS los podemos controlar en la pantalla navegando por los menús, haciéndolo desde una rueda situada en el puño derecho, siendo el funcionamiento de esta ruleta no demasiado bueno.
Incorpora también un nuevo amortiguador de dirección Öhlins ajustable, que hace muy bien su trabajo, unas estriberas más anchas, que mejoran el agarre de la bota en campo, y un nuevo cubre cárter.
Respecto al resto de la mecánica todo es exacto a la Ténéré 700, monta el mismo chasis y el mismo motor de 689cc, 73CV y 68Nm. Los frenos son también los mismos con el doble disco delantero de 282mm y pinzas Brembo de anclaje convencional.
Las ruedas por supuesto son de 21’ delante y 18’ detrás, y es que esta es la configuración de moto de enduro por excelencia. Respecto a los neumáticos, monta los Pirelli Scorpion Rally STR, mismos que la versión estándar.
Con todos estos añadidos el peso del conjunto ha subido 20kg, dejando la cifra ahora en 220kg que, aunque siendo significativamente mayor, no es más pesada que otros modelos del segmento.
Comportamiento en carretera
Nada más subirnos la ergonomía sigue siendo muy buena, prácticamente exacta a la versión estándar, quedando piernas y brazos a una altura muy natural. El asiento se nota más cómodo realmente y, con mi altura de 1,80m, los pies tocan con toda la planta al suelo.
Cuando comenzamos a rodar las piernas nos quedan ahora ligeramente más abiertas, ya que, aunque es muy estrecha en el centro se va ensanchando progresivamente, por lo que perdemos algo de capacidad de “abrazar” la moto yendo sentados, si bien quedan totalmente envueltas tras el gran deposito.
El motor que ya conocemos y del que hemos hablado otras veces, nos parece muy conseguido, ya que las sensaciones de empuje y suavidad son muy buenas, siendo más que suficientes para disfrutar en carreteras secundarias, tanto en conducción relajada como deportiva. Podemos rodar en bajos-medios, donde tenemos empuje para ir disfrutando relajados, o en medios-altos, donde tenemos más carácter, rindiendo muy bien en ambos estilos de conducción, si bien tal vez echaríamos de menos en carretera más potencia en altos, pero si hicieran esto perderíamos capacidades en campo.
Las suspensiones las sentimos súmamente suaves en el primer recorrido, mejorando el comportamiento cuando el asfalto es malo por baches o irregularidades, trabajando de forma también muy progresiva. El aumento del recorrido mejora el comportamiento carreteras de mal asfalto, pero cuando vamos rápido en modo conducción deportiva, tenemos un poco más de balanceo del tren delantero en el inicio de la frenada, algo que es inevitable, pero esta mejora en el primer recorrido de suspensiones nos servirá, además de para carreteras con mal firme, sobre todo en campo, y solo nos penalizará yendo muy rápido en asfalto. En el tren trasero sin embargo yendo rápido no notamos más movimiento, funcionando realmente bien aun haciendo apuradas fuertes en conducción a ritmos muy altos.
Yendo en este modo de conducción deportiva, en las frenadas fuertes debemos prestar atención a la retención del motor, que transmite muy buenas sensaciones, pero al no tener embrague antirrebote demos estar atentos a dosificar nosotros esta retención suavemente con el embrague, ya que si reducimos muy de golpe notaremos deslizamiento de la rueda trasera en exceso. El freno delantero nos ha gustad mucho, tanto por tacto como por potencia, pero el freno trasero tiene un ABS demasiado intrusivo, que hace que en apuradas fuertes también debamos estar atentos a no hacer que entre en funcionamiento.
La moto entra muy bien en curva a pesar del mayor volumen, y aunque notamos más peso en el tren delantero y perdemos algo de agilidad, es prácticamente igual de manejable en carretera que la Ténéré 700, por lo que hemos perdido un porcentaje pequeño en ese aspecto con respecto la versión normal.
Los neumáticos Pirelli van realmente bien en carretera, transmitiendo sensaciones casi de neumático de calle, pudiendo inclinar hasta el borde y abrir el acelerador muy inclinados con mucha seguridad, si bien en campo, como luego veremos, tienen sus limitaciones.
Cuando salimos a autovía notamos una significativa mejora en la protección aerodinámica y en la estabilidad. La moto se siente con más aplomo y mantener las líneas a altas velocidades lo hace a la perfección. Como decíamos antes, con las piernas más envueltas y la pantalla un poco más alta, quedamos casi cubiertos del todo, tanto como para casi no sentir turbulencias. El motor además se mantiene suave y sin vibraciones a velocidades altas mantenidas, por lo que podemos hacer muchos kilómetros con comodidad, aunque estaría bien disponer de control de crucero.
El único punto que echaríamos en falta en este tipo de conducción, es más potencia y empuje para adelantar sin cambiar de marcha. Algo que se soluciona bajando una o dos velocidades, ya que ahí tenemos empuje más que de sobra, y es que esta es la única parte en la que se la podría pedir más motor, en largos viajes en autovías y autopistas. Pero en conducción en carreteras secundarias, tanto deportiva como relajada, tenemos motor más que suficiente, y en campo, 70CV son una barbaridad.
Comportamiento en campo Yamaha Ténéré 700 World Raid
Cuando nos salimos del asfalto y nos ponemos de pie la ergonomía nos parece realmente buena. Es la misma que en el modelo estándar y desde que la probamos la primera vez siempre nos ha parecido muy acertada, aunque sentados en campo nos gustaría un asiento más alto y plano, para ganar movilidad.
Respecto al motor, es probablemente el que mejores sensaciones de tracción nos transmite del segmento trail medio, gracias a su comportamiento en bajos y medios, y a las sensaciones de entrega de empuje, que podemos dosificar muy fácilmente con el puño del acelerador. Y esta es una de las grandes virtudes de esta moto, que podemos ser nosotros mismos nuestro propio control de tracción con mucha facilidad, y es algo que todo usuario de moto de campo que se precie siempre agradecerá. En esto influye también el buen trabajo del amortiguador trasero, ya que las bieletas hacen muy bien su función.
Si bien el neumático cumple en campo, nos habría gustado que esta versión, más pensada para el off road, hubiera incorporado uno más campero, aun a sabiendas de perder sensaciones en carretera, ya que el motor y el amortiguador hacen muy buen trabajo en tierra y podríamos aprovecharlos más, pero quedan limitados por el neumático. Sí nos permite tener sensaciones yendo a un ritmo medio, pero cuando apretamos un poco a modo enduro, no es capaz de seguir transmitiéndonos información.
El mayor recorrido de suspensiones de nota realmente, y el trabajo de ambas es ahora también más suave en campo, lo que hace que rinda muy bien en baches pequeños, pero también en baches amplios y profundos, sujetando muy bien el conjunto. El tarado nos ha parecido muy bueno para un uso medio, ya que yendo al ritmo que se espera del usuario normal, tendremos muy buen funcionamiento, absorbiendo muy bien sin hacer topes, esto es yendo a un ritmo trail medio-rápido.
Si subimos a ritmo de enduro empiezan a aparecer algunos topes cuando entramos más fuertes en baches y saltos, pero estos no son excesivamente secos y se pueden gestionar adaptando el pilotaje. Esto algo en lo que ha mejorado mucho la horquilla desde los primeros modelos. Ahora ya hacer topes en un uso normal solo lo harán los que tengan nivel de enduro.
En una de las paradas pusimos amortiguador y horquilla en la posición más dura de regulación, y no notamos mucho cambio de comportamiento, por lo que este podría ser una aspecto a mejorar, así un usuario que vaya a rodar a más ritmo en campo podría encontrar mejor feeling.
El mayor volumen del depósito sí se nota en campo. Perdemos algo de manejabilidad general y ahora la posición al sacar la pierna sentados es más incómoda, lo que hace que tendamos más a conducir de pie en modo trail, más que a ir levantándolos y sentándonos continuamente, como sería el modo enduro. También perdemos ligereza en el tren delantero y ahora es más difícil de levantar con un golpe de gas o embrague para absorber un badén o evitar un obstáculo, si bien es cierto que ganamos estabilidad y mucha más autonomía, y es que no se puede ganar en todo…
La estabilidad en zonas rápidas ya era buena en la estándar, pero ha mejorado en la World Raid. El amortiguador de dirección sujeta muy bien los movimiento del tren delantero y podemos regularlo muy fácilmente con una pequeña ruleta muy accesible.
En el nuevo ABS off road delantero también han encontrado muy buen funcionamiento, pudiendo frenar fuerte sin activarse y, junto con el trasero desconectado, hacen muy buen trabajo en campo para niveles bajos y medios. Pero si queremos ir rápido es mejor desconectar el ABS por completo, que es donde podemos realmente sentir el buen trabajo de los frenos, tanto delantero como trasero.
En el pedal de freno la pierna no queda del todo pegada por la forma del motor, y no es la mejor posición para frenar, pero es algo a lo que te acabas adaptando. No nos ha gustado las estriberas del pasajero en campo, ya que con las botas nos quedábamos enganchados muchas veces en ellas con el talón, así que, si vais a hacer campo, la recomendación segura es quitarlas.
Igualmente, a las estriberas más anchas no las vemos mucha utilidad, ya que no dejan la misma libertad de movimientos que las normales. Sí que ganamos más capacidad de dejar peso sobre ellas, pero perdemos algo de capacidad de angular o mover tobillos. Pero esto es más cuestión de gustos.
Lo que sí que no nos ha gustado es la ruleta de control de la pantalla TFT con la que tenemos trabajar para movernos en los diferentes menús, así como para activar y desactivar el ABS. El funcionamiento de la rueda hacia arriba y hacia abajo es bueno, pero el “enter” es la propia ruleta hacia adentro, y no siempre hemos sido capaces de pulsarlo correctamente. Lo ideal sería que, igual que monta un botón externo para activar el ABS, que ese botón tuviera también la función de desactivarlo, así tendríamos un acceso más rápido y cómodo.
Opinión Yamaha Ténéré 700 Word Raid
La nueva Yamaha Ténéré 700 World Raid mejora mucho en suspensiones con respeto a la versión estándar en todos los usos, tanto en campo como en carretera. Mejora también la estabilidad a alta velocidad y la protección aerodinámica, lo que amplia su uso viajero.
Asimismo, dentro del catálogo oficial de Yamaha, la Ténéré cuenta con diferentes packs de accesorios que podemos añadir dependiendo del uso principal que vayamos a darle, como son maletas, guardabarros delantero alto, protecciones… con los que muchos usuarios podrán personalizarla a su gusto.
El precio de la Ténéré World Raid son 12.799€ -2.000€ más que la versión estándar- y está disponible en dos colores, negro y azul. Puedes ver más información en la web oficial de Yamaha.