Este año hemos vuelto a participar en la elección del mejor scooter y moto eléctrica del mercado en el circuito de Zolder –Bélgica–, durante la Clean Week.
A pesar de la lluvia, que dificultó en cierto modo las pruebas, hemos podido comparar todos los vehículos eléctricos de dos ruedas que se pueden encontrar en Europa. Hemos tenido en cuenta varios criterios de evaluación, aunque la autonomía fue sin duda el de mayor peso.
Algunos fabricantes con cierta trayectoria en el sector, han evolucionado sus modelos, mientras que la mayoría ha presentado lo mismo que en la edición de 2011.
La situación de la moto eléctrica es que se está empezando a tocar techo en cuanto a las baterías, por lo que no veremos mejoras relevantes en la autonomía hasta que no evolucione la tecnología de éstas. Tampoco es para llevarse las manos a la cabeza, los scooter y motos eléctricas tienen muchos argumentos a favor con respecto a sus homólogos de combustión, sobre todo por la imparable escalada del precio de la gasolina.
Para quienes tengan plaza de garaje, o lo que es igual, un punto de recarga privado, la autonomía en uso urbano cubre el 90 por ciento de los desplazamientos. Para los que aparquen su ciclomotor en la calle, empiezan a popularizarse las baterías extraíbles que pueden recargarse dentro de casa o en la oficina. Otros usuarios empiezan a ver en los scooter y motos eléctricas valores como el respeto medioambiental o la exclusividad. Tal vez no haya que esperar un cambio en la tecnología de las baterías, sino un cambio de mentalidad y hábitos en materia de transporte personal.
Volviendo al análisis de las opciones que existen, hemos visto numerosos productos de origen asiático, aunque en el ámbito tecnológico, el dominio sigue siendo de americanos como Vectrix, Zero o Brammo. Este año se ha incorporado Peugeot, una de las pocas marcas de reconocido prestigio que apuesta fuerte por la movilidad eléctrica
Este año pudimos probar la Brammo Enertia, un modelo de estética lograda que dinámicamente sorprende. Tan solo cabe criticar la posición de los estribos, con los que es demasiado fácil tocar el asfalto. No participó en la elección, por lo que Zero Motorcycles, una vez más, se ha proclamado líder de la categoría.
Los modelos S y DS, cuya principal diferencia es la configuración de ruedas y suspensiones, equipaban baterías de 9 kWh, con las que se lograron las mejores autonomías de la comparativa. La Zero S se ha vuelto a hacer con el título de moto eléctrica del año, aunque todavía tiene que mejorar algunos puntos en la ergonomía (la postura de conducción).
En esta edición, el nuevo Vectrix VX-3 fue uno de los más vistosos por aquello de las dos ruedas gemelas en el tren delantero, al más puro estilo Piaggio MP3.
Lo cierto es que transmite confianza en frenadas sobre mojado, aunque el peso extra penaliza en gran medida la autonomía y la manejabilidad. El premio al scooter eléctrico del año se lo ha llevado otra vez el Vectrix VX-1, que sigue un paso por delante y deja el listón bastante alto si valoramos todos los aspectos. En un segmento más urbanita, el Govecs Go! S 3.4 impresiona por su equilibrio entre agilidad, prestaciones y autonomía. El iO Manhattan ha ganado en prestaciones, aunque esto ha perjudicado su autonomía.
En esta categoría, la estrella este año ha sido el Peugeot e-Vivacity, cuyo comportamiento dinámico y acabados nos han dejado satisfechos. Donde ha perdido muchos puntos es en la autonomía, muy por debajo de lo esperado.
El pequeño SYM Symmetry gusta por su ligereza y por su batería extraíble, así como el nuevo Sev eTricks que también cuenta con una agilidad sorprendente.
La Grace One, una bici con prestaciones y homologación de ciclomotor, sigue llamando la atención por sus buenos acabados. Ha sido nuevamente Govecs quien ha conseguido el mejor equilibrio, haciéndose con el premio al ciclomotor eléctrico del año el modelo Go! T 2.4 pensado para uso profesional, equipado con un amplio cajón y una ligera batería de polímero de litio.
Aunque no existen en España, son populares en algunos países de Europa los «moped», ciclomotores capados a 25 km/h que pueden
circular por carriles bici sin obligatoriedad de usar casco entre otras exenciones. En esta categoría estaba la e-Solex, un rediseño de la clásica bici motorizada de tracción delantera, que ahora equipa un sencillo propulsor eléctrico. En este segmento el premio fue para el Nimoto City 350. Algunos modelos como los scooter de Govecs o el mismo e-Vivacity, simplemente limitados en velocidad a 25 km/h, formaban parte de otra categoría llamada scooter -25, cuyo ganador fue el Govecs Go! S 2.4