Una vez más tenemos que hablar de algo revolucionario firmado por Piaggio, de un modelo que marcará el camino que tendrá que recorrer el mundo de la moto urbana y, más concretamente, de los scooter. Piaggio ha reservado a su innovador MP3 el honor de ser el primero de su especie, el primer scooter híbrido de la historia, un vehículo con un motor que se sirve de dos fuentes de energía que funcionan simultáneamente o de forma independiente.
Hemos hablado del Piaggio MP3 Hybrid en su presentación mundial en Roma (Motociclismo 1.160) y de su presentación en España (Motociclismo 1.180), donde profundizamos en algunos aspectos de su motor y de sus posibilidades. Pero necesitábamos estar a solas con él, alejarnos de esos días de presentación de modelos con poco tiempo y exceso de información teórica, para utilizarlo como lo usarías tú, de casa al trabajo, a recoger a los niños, de tiendas...
Hybrid Power, Charge, Electric... Lo primero fue familiarizarnos con sus modos de funcionamiento a los que se accede a través de un menú en el cuadro de instrumentos que movemos con un botón en la piña derecha. Para mi gusto algo complejo, tienes que seleccionar la modalidad y pulsar unos instantes el botón para fijarla. Sobre la marcha te obliga a apartar la vista de la carretera durante demasiado tiempo.
La primera, Hybrid Power, la más útil, nos deja mover el MP3 con los dos motores simultáneamente, lo que logra una arrancada en eléctrico ultrasuave para, casi instantáneamente, entrar en funcionamiento el motor de combustión. Es una sensación muy agradable pero sutil, dado que los embragues de los scooter Piaggio son ya de por sí, suaves, sedosos y con una entrega de potencia muy progresiva. Aún así el empuje inicial del motor eléctrico se nota.
La segunda posición, Charge, hace que no trabaje el motor eléctrico y que sea el de combustión el que nos lleve, a la par que se dedique a recargar la batería. Es el modo que tenemos que poner en vías de circunvalación, en carretera abierta, donde el Hybrid alcanzará la velocidad máxima, de marcador, de 100 km/h llaneando.
El modo eléctrico es el del silencio, el de las zonas urbanas limitadas al tráfico, donde sólo entraremos con nuestro MP3 Hybrid. Su velocidad máxima es de 35 kilómetros por hora, está pensado sin duda para calles casi peatonales porque en tráfico urbano, callejeando, vamos demasiado despacio y somos un obstáculo para el resto de los vehículos. Su aceleración, además no es demasiado rápida, y las pendientes muy elevadas (la rampa del garaje) no puede abordarlas. También nos valdrá para maniobrar hacia adelante o hacia atrás, cambiando el modo en el panel de cristal líquido. Hay que acostumbrarse a rodar marcha atrás, un modo para el que permanece bloqueado, si queremos, el tren delantero con el fin de facilitar la estabilidad.
Circulamos en modo eléctrico por calles peatonales o de baja densidad de tráfico donde es muy posible que algún peatón se nos cruce porque no nos oiga llegar. Para ello el MP3 Hybrid tiene una doble bocina, una de ellas muy sutil que advertirá de nuestra presencia a los peatones sin sobresaltarlos. También este avisador acústico se pondrá en marcha cuando maniobremos con el scooter hacia atrás.
El sistema eléctrico funciona con una batería de iones de litio que puede recargarse enchufándola a la red eléctrica convencional, la que tenemos en casa. Dentro del hueco del casco se ha instalado el conjunto de baterías y el enchufe que necesitará de un adaptador para usarlo en una clavija normal. El enchufe del MP3 Hybrid, cuando dejemos de utilizarlo, deberemos volverlo a poner en su alojamiento y girar media vuelta, para que el scooter esté listo para usarse, como medida de seguridad para que no lo pongamos en marcha cuando está en carga.
En su uso normal iremos recargado la batería cuando salgamos a carretera abierta. En nuestra prueba conseguimos que la batería se recargase completamente desde el 50 por ciento en modo Charge en algo más de 60 kilómetros. Y se descargó esta misma cantidad durante 20 minutos de circulación urbana sólo en modo eléctrico. En modo Hybrid Power las baterías también se descargan. No puede pasar a modo eléctrico a partir de cierta velocidad, y cuesta abajo se libera la transmisión y el motor eléctrico no sirve para retener a partir de 40 km/h. El motor eléctrico tampoco sirve para frenar como en el caso de los Vectrix. También echamos en falta un sistema de «stop and go» que parase el motor térmico en un semáforo, por ejemplo en la posición hybrid power. No tiene frenada integral y sí freno de mano, como en cualquier MP3, que se queda bloqueado cuando echamos la llave del scooter.
Con las baterías nos queda tan sólo el baúl trasero para cargar nuestra mochila o casco integral. Se trata de un espacio grande y de forma redondeada, por lo que tendremos algún problema para introducir un objeto cuadrado o un portátil de pantalla de 15 pulgadas.
Sobre el funcionamiento del MP3 hemos hablado en un montón de pruebas, pero conviene recordar su tren delantero mágico que te puede salvar en muchas situaciones de peligro, rotondas húmedas, pasos de cebra... También que su capacidad de frenada es superior a la de cualquier scooter, incluso con ABS al tener dos puntos de apoyo. La protección aerodinámica y postura de conducción es buena, aunque el asiento quede algo elevado para tallas bajas.
Lo que cuesta, 9.000 euros, quizás te parezca un precio elevado, pero es el de toda la tecnología que alberga en su interior. Sobre este precio te podrás beneficiar con el Plan Movele para vehículos eléctricos. Para el MP3 Hybrid la ayuda asignada es de 750 euros.
