El hombre que está detrás de este nuevo modelo es Keita Mikura, que también fue el responsable del proyecto de la NM4 Vultus, un modelo de estética realmente espectacular, basado en la estructura de las NC, un hombre que huye de los convencionalismos, como también puede observarse en esta nueva Honda Rebel, que se acerca al estilo “Bobber”, cuyo desarrollo comenzó en América. Su motor es el bicilíndrico paralelo de 471 cc ya conocido en otros modelos de carretera, pero que ha recibido cambios en la electrónica, la relación de compresión o la admisión, para mejorar su comportamiento a bajas vueltas y lograr una curva de par aún más plana.
Esta moto se incluye plenamente en los modelos destinados al carnet A2, con una potencia de 33,5 kW a 8.500 rpm. El propulsor, pintado en negro, sigue la misma filosofía de la moto, en la que no hay ninguna pieza cromada, y no tiene aspecto nada clásico, sigue siendo el de las motos modernas que conocemos. De hecho destacas en su interior aspectos como el sistema de distribución con empujadores para reducir la fricción, un aspecto muy cuidado en otros apartados, incluso en detalles como el tratamiento con vanadio de los ejes de la cadena de distribución para endurecerlos y protegerlos frente a la suciedad, o el empleo de pistones con faldas estriadas para mejorar la lubricación, y que reciben tratamientos químicos.
Honda Rebel 2017, baja y con silenciador "shotgun"
Como en el resto de los motores de este tipo, hay un eje de balance con sistemas para reducir el ruido y afectar lo mínimo posible a la inercia del motor. Finalmente, se emplea un sistema de escape con un único silenciador de tipo “Shotgun” de 120 mm de diámetro para lograr el tono grave del que cualquier modelo de este tipo debe disponer.
El resto de la moto es completamente nuevo, con chasis tubular de acero que sujeta el motor en tres puntos y que se ha diseñado bajo dos premisas, el que sea muy estrecho, y también bajo en la zona del asiento, que está situado a sólo 680 mm del suelo. La geometría de dirección es relativamente conservadora, con 28⁰ de ángulo y un avance de 110 mm, lo que asegura una buena estabilidad a baja velocidad, algo que además se combina con una distancia entre ejes de 1.488 mm. La estructura del chasis está adaptada a las posibilidades de customización con que nace la Honda Rebel. Para ello la estructura principal llega sólo hasta la parte trasera del asiento, y el subchasis trasero, que sujeta el guardabarros posterior, se encuentra atornillado, de manera que sea posible desmontarlo para lograr una zaga más corta. Las suspensiones son bastante tradicionales, con un sistema de dos amortiguadores paralelos detrás, y recorridos limitados.
El chasis está pensado para poder ser customizado.
Otro aspecto distintivo de la Honda Rebel son sus ruedas, ambas de 16” con neumáticos anchos, 130 mm delante y 150 mm detrás, que tienen llantas de radios estrechos. La frenada se confía a dos discos, uno en cada tren. La Honda Rebel está incluida en la normativa Euro4, y dispone de ABS como equipamiento de serie.