El enduro se llama Josep García

En su habitual columna, Mariano Urdín quiere destacar la valía de un piloto como Josep García, el mejor piloto de enduro de la actualidad.

Mariano Urdín

mariano urdin
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Para empezar, lo primero que quiero desearos a todos, mis queridos amigos, es que hayáis pasado unas ¡¡muy felices Navidades y que disfrutéis de un año nuevo, lleno de alegrías y sobre todo salud!! Y para continuar y entrando en tema, hoy quería hablaros de un par de asuntos motociclistas que tenía muchas ganas de contaros: La especialidad del Enduro y la trayectoria de un piloto que se ha convertido en el indiscutible número uno a nivel mundial, un auténtico fenómeno, un fuera de serie que no recibe, ni mucho menos, el reconocimiento que se merece, ni por los medios de comunicación, ni por la afición, que en consecuencia no está demasiado enterada. Se trata de Josep García.

Los que sois veteranos de esta humilde sección y me conocéis desde hace años, sabréis que el enduro, es una de mis especialidades favoritas. Mi pasión por el enduro comenzó a finales de los ’60, un amigo de nuestro pueblo de veraneo, El Hoyo de Pinares, tenía una flamante Ducati 50 TT y mi primo Riky se acababa de comprar una Puch Minicross que me dejaba y por los montes del Hoyo comenzamos nuestras rutas. A principios del mes de octubre de 1970, en la relativamente cercana población de San Lorenzo de El Escorial (unos 40 km de nuestro pueblo), se celebraba la mítica prueba de los ISDT, los Seis Días Internacionales de Enduro, la auténtica Olimpiada motociclista, celebrada por vez primera en España. Y Fernando y yo nos hicimos una ruta por campo hasta allí.

Fue todo un acontecimiento, el deporte español se hizo eco y salió un reportaje hasta en el No-Do, con unas imágenes muy buenas en blanco y negro, que puedes ver cuando quieras. El entorno era magnifico, había 323 inscritos, de 16 nacionalidades diferentes a lomos de motos de las que muchas de ellas no había oído hablar en mi vida. Las marcas españolas en ese momento estaban en auge, sobre todo Montesa, Bultaco y OSSA, el Director de carrera era Juan Soler Bultó y el Subdirector Adjunto nuestro Pablo Arranz “Cauca”, presidente tantos años del Real Moto Club de España, que era precisamente el organizador de la prueba. Nuestros pilotos del equipo nacional lo formaban Ignacio Bultó, Narciso Casas, Oriol Puig Bultó y Casimiro Verdaguer. La prueba la ganó el piloto checo Frantisek Mràzek, a bordo de una CZ me imagino. Y allí estábamos, mi amigo Fernando y yo con nuestros ciclomotores TT, la boca abierta, viéndoles trepar por la trialera de las truchas o Navalespino. Cada jornada se recorrían, más o menos, unos 300 km por trochas, senderos y caminos de la sierra de Guadarrama que, por su alto grado de dificultad y dureza, solo lograron terminar 186 participantes.

Esa carrera nos marcó a mi amigo y a mí, que con el tiempo fuimos adquiriendo motos “de verdad”. Me compré una Puch Cobra 75 ¡que gran moto!, disfruté mucho con ella “lijándome” a todos los “pijos” con sus Lobito de la pandilla. después una Bultaco Matador, luego una OSSA Desert, una Montesa Enduro, una Frontera 370… La verdad es que el enduro nos enganchó y personalmente seguí practicándolo asiduamente, como diversión y entrenamiento, compaginándolo con mis temporadas en el mundo de la velocidad.
Recuerdo infinidad de jornadas memorables como aficionado al enduro. A mediados de otoño, nuestro grupo de “endureros” ya empezábamos a salir o el sábado o el domingo, un día dedicado a la familia y otro a la moto, así hasta mediados de la primavera, donde el calor y el polvo ya empezaba a ser molesto.

En esos años siguientes, tuve una Suzuki RM en el ’86 de cross que transformé a enduro, Cagiva 250, Alfer 250 Enduro, Husqvarna 400, pero a mí me gustaba el carácter de la moto de cross y desde el ’93 al ’99 solo tuve Hondas CR 250, transformadas a enduro, adecuando a mi gusto suspensiones y desarrollos.

Con el principio del siglo decidí abandonar mi pasión al enduro por las bravas, la cosa es que en la Comunidad de Madrid se había complicado mucho el salir en moto por campo y la “caza del endurero” era el principal objetivo le los estamentos rurales, de los que teníamos que salir huyendo como si viéramos al mismísimo demonio. Así que, aprovechando que había empezado también a colaborar con la revista “Ecuestre”, vendí mi moto de campo y me compré un caballo de paseo, “Volador”, un español tordo con muy buena planta con el que seguí saliendo al campo. Sobre mi noble bruto sí podía cruzarme y saludar tranquilamente a cualquiera que me encontrara ¡sin tener que salir al galope como si nos persiguiera el mismísimo Ewan Dullahan (el Jinete sin cabeza)!

Pero ahora volvamos al inicio, tenemos que hablar de otro super-jinete, este con mucha cabeza, tiene 28 años recién cumplidos, nació en Suria, una pequeña localidad de la provincia de Barcelona y se llama Josep García i Montaña. En primer lugar, quiero felicitarle y declararle mi más sincera admiración, pues Josep ha conseguido gestas increíbles. Este pasado año 2024, después de una muy dura temporada, ha revalidado su título de Campeón del Mundo de Enduro E1 y ha conseguido el de Enduro GP (la categoría máxima) en la que también fue subcampeón en 2023.

Su proyección internacional empezó en el 2014, con un 3º puesto en el GP de Finlandia en el Mundial de enduro. En 2016 finalizó 3º en el Mundial de Enduro Junior, consiguió el título de Campeón de España Enduro E1 y Subcampeón en Scratch, además se anotó su primera victoria individual en los ISDE en la categoría E1. En 2017 fue un año muy redondo, Campeón del Mundo de Enduro 2, Campeonato Nacional y en los ISDE fue el vencedor individual de E1 y 2º en el Scratch, aunque hay que decir que con cierta jugada de los franceses…
En la Pandemia, en las pruebas que permitieron correr en el 2020, fue doble Campeón de España E2 y Scratch y en 2021 ya con el calendario más normalizado, volvió a conquistar el Campeonato del Mundo E2, los Campeonatos de España y se hizo con su segundo triunfo individual absoluto en los ISDE en Italia. En 2022 fue subcampeón del Mundo y en los ISDE de Francia volvió a ser el vencedor absoluto.

En el ‘23 y ’24, además de los ya comentados Mundiales logrados en ambas temporadas, ha vuelto a ganar las dos ediciones de los ISDE en el Scratch individual, evento que comenzó en una brumosa mañana de otoño en Carlisle, condado de Cumbria (Inglaterra) en 1913. A día de hoy, Josep es el único piloto de la historia de los ISDE, que dura la bonita cifra de 111 años, que ha vencido en cuatro ocasiones consecutivas la clasificación Scratch.

Amigo y admirado Josep, quiero que sepas que la afición española estamos en deuda contigo, te debemos mucho. Tal vez puede ser porque estemos un poco mal acostumbrados a que nuestro motociclismo triunfe en todas las especialidades y quizás no prestamos tanta atención a una disciplina que, aunque apasionante, no resulta fácil de practicar para la gran masa de aficionados por sus grandes trabas burocráticas. No te quepa la menor duda que para mí y para todos los que hemos practicado esta especialidad, eres un auténtico héroe, y por tu talento, tu equipo que siempre te arropa y por tu profesionalidad, estamos convencidos que seguirás obsequiándonos con grandes gestas. 

Te deseo un magnifico Año Nuevo. 

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mariano urdin

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