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De CV a KW o cómo conocer la potencia de la moto

La llegada de las motos eléctricas trae consigo el uso del kilovatio como unidad de potencia. Aunque en realidad es una corrección de un uso indebido del caballo de vapor.

Carlos Losada

2 minutos

Pasar de CV a KW es muy habitual desde la aparición de las motos eléctricas. Fuente: iStock/Lina Moiseienko

En las conversaciones relacionadas con el mundo del motor es raro que en algún momento no haya aparecido la palabra caballos, ya que es lo que delimita la potencia que tiene cada vehículo. El poder del motor se cuantifica con esta unidad de medida y es la que sigue imperando, a pesar de que poco a poco se va haciendo hueco el kilovatio. Y la razón de este cambio no es otra que la paulatina aparición de motos (y coches) eléctricas.

Es cierto que los vehículos eléctricos han empezado a popularizar el uso del kilovatio como medida de potencia, pero en realidad en más bien la correción de un uso indebido del caballo de vapor, pues el kilovatio es en realidad la unidad de medida de la potencia según el Sistema Internacional, y no los caballos, que se han establecido de forma casual en el sector de la automoción.

De CV a kW

Para designar la potencia de las motos se utilizan los kW (kilovatios) como unidad de medida, ya que los caballos de vapor (CV) no tienen sentido en un sistema como el que montan. De ahí que su utilización esté en alza. A fin de cuentas, el vatio se emplea a nivel general mucho más que los caballos de vapor, ya que es la unidad oficial de potencia para el Sistema Internacional de Unidades.

Esto, a su vez, está provocando que cuando se habla de la potencia de una u otra moto, suele pasarse ya de CV a kW para tener las dos cifras, ya que no concuerdan exactamente. Tanto es así, que si nos fijamos en las fichas técnicas oficiales de los vehículos la potencia viene expresada en kW y no en en caballos de vapor.

¿Qué son los kW?

Para entender la diferencia, lo mejor es saber qué es lo que mide exactamente cada unidad. En el caso de los KW, tienen como base el vatio, el cual equivale a 1 julio/segundo. Es una medida de potencia, magnitud que relación el trabajo (julios) con el tiempo (segundos). Esto quiere decir que lo que realmente está señalando es el ritmo de consumo o la generación de energía.

Una de las razones por las que los vehículos eléctricos hayan empezado a popularizar el uso del kilovatio es que este unidad ya se venía empleando en otros aparatos con motores eléctricos, incluso en artículos domésticos como una lavadora, un secador de pelo, una bombilla o una batidora.

¿Qué son los CV?

Por su parte, los caballos de vapor son la unidad que se emplea tradicionalmente en los motores de combustión interna y miden la potencia que se necesita para levantar 75 kilopondios o kilogramos de fuerza a un metro de altura en un segundo.

Su denominación proviene de convertir en decimal el caballo de potencia o horsepower que se utilizaba en el ámbito anglosajón, donde aún a día de hoy se siguen empleando numerosas medidas que no pertenecen al sistema decimal.

La potencia de las motos siempre se ha medido en caballos de vapor. Fuente: iStock/nuttapong

¿A qué equivale cada una de estas medidas?

Más allá de lo que mide cada una de ellas, lo que le realmente le importa al conductor de una moto es saber cuál es la potencia de su máquina, ya sea medida en kW o en CV. Como estos últimos son más populares, suele darse el caso de que se necesiten traducir los primeros. De este modo, cada kW equivale a 1,34202 CV, mientras que la conversión a la inversa es de 0,7457, es decir los kW que corresponden a cada CV.

Por ejemplo, si la Honda FORZA 750 cuenta con 58,6 CV, tendrá una potencia de 43,698 kW, mientras que los 29 CV que tiene el scooter Suzuki AN 400 Burgman 2021 equivalen aproximadamente a unos 21,5 KW. Y con las motos eléctricas igualmente, al comercializarse con las cifras en kW, será posible traducirlos para conocer los CV habituales.

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