En una moto nueva, salvo que inicialmente notéis que el amortiguador apenas cede con vuestro peso encima o por lo contrario se queda «chafada», no toquéis el reglaje hasta que rodéis un poco -evitaréis trabajar dos veces-. De serie las motos suelen venir con muelles con una dureza para usuarios de peso medio -entre los 72/75 kg-. El dato que nos indica con bastante certeza que el muelle de nuestra moto, el adecuado para nuestro peso, nos lo da la diferencia de medidas de longitud entre estar la suspensión estirada, en reposo, y con el peso del piloto encima.
En el manual de usuario de la moto se indica cuáles son estas medidas así como las del «recorrido muerto» que debe tener el muelle. Cifras que varían ligeramente cuando se trata de una moto con suspensión con bieletas o PDS. Importante: recordad que se necesita ayuda para hacer las mediciones mientras estáis subidos en la moto. Y, cuando realicéis las mediciones hacedlo con el equipo de piloto completo, la riñonera con las herramientas (en el caso de las motos de enduro o raid) y el depósito a tres cuartos de su capacidad.
- Colocad la moto sobre un caballete para que la suspensión quede totalmente estirada. La moto debe estar con todos los accesorios que uséis habitualmente y no tener barro o peso extra.
- Hacemos una primera medición de la suspensión posterior estirada, apuntando el dato. Tomad unos puntos de referencia, que sean siempre exactamente los mismos para los siguientes pasos que vamos a explicar.
- Medid con el piloto habitual sentado, sin poner pies en el suelo y con todo el equipo puesto que uséis (incluso riñonera, herramientas, «Camelbak»…). Una diferencia de entre entre 9 y 11 cm, con respecto a la tomada en el paso nº 2, indica muelle idóneo para nuestro peso y bien ajustado.
- Repetid la operación ahora con las dos ruedas sobre el suelo -os la debe sujetar alguien- para verificar el «juego muerto». Hay muchas opiniones al respecto, pero estando la diferencia entre 1 y 2,5 cm menos que la cifra del paso anterior la cosa va bien. Si se hunde más, el muelle es duro para vuestro peso -toca cambiarlo-.
- La clave de unas buenas mediciones es que siempre las tomemos entre las mismas referencias - desplazarnos unos milímetros entre mediciones falsea la cifra-. En este caso para hacerlo más evidente hemos pegado una tira de cinta adhesiva en la aleta posterior.
- En este caso la contra tuerca del tensor de la cadena es un buen punto de referencia. Aun con todo hemos marcado en rojo el punto en ella en donde tomamos la referencia. Merece la pena perder un poco de tiempo en esto.
- Realizad todas las medidas por lo menos un par de veces seguidas; repetid los pasos 3 y 4. Mejor si antes nos hemos subido en la moto dejando caer nuestro peso sobre el asiento varias veces, para hacer trabajar las suspensiones, así la medida será todavía más exacta.
- Si hay que modificar el reglaje, toca usar las herramientas para las tuercas ajuste del muelle. Podéis hacerlo con una vástago y el martillo, o con un par de llaves de media luna –herramienta específica-. Es la única forma para actuar sobre esas tuercas.
- No suele haber espacio suficiente para emplear la llave de media luna, que marca mucho menos las tuercas que el vástago. Para poder usarla tendríais que desmontar el subchasis y el silenciador, la única forma de llegar correctamente al amortiguador.
- No es un sistema que nos guste, pero resulta más rápido que desmontar el subchasis. Soltad la contratuerca, si la lleva, y tensad o destensad el muelle según convenga para ganar o perder precarga. Así, hasta alcanzar las medidas idóneas para nuestro sistema de suspensión.
- Apoyad las manos sobre la zona central del asiento, presionando con fuerza hacia abajo, para verificar que la suspensión se hunde en proporción parecida. Podéis haber dejado perfecta la precarga del amortiguador y estar mal la de la horquilla.
- Puede darse el caso de que para «nivelar» la moto tengáis que desplazar, subiendo o bajando, las botellas de la horquilla sobre el plano de su tija superior.