Con ese apellido, Billy Bolt parecía condenado a ser rápido. En su caso, sobre una moto de carreras. Sin embargo, su irrupción en el panorama mundial del motociclismo llegó en una disciplina donde la velocidad pasa a un segundo plano ante otras virtudes como la fuerza, la resistencia o la habilidad. Se trata del hard enduro, que hace honor a su nombre.
No en vano se proclamó campeón de aquellas WESS, siglas de las World Enduro Super Series nacidas para aglutinar bajo un mismo campeonato las distintas pruebas de hard enduro que iban naciendo por el mundo. Como suele suceder con estas cosas, la FIM no tardó en acogerlas bajo su paraguas, creando en 2021 el flamante Campeonato del Mundo de Hard Enduro.
Aunque Bolt ganó ese primero, ya estaba a otros menesteres. Tras no poder defender su título del WESS en 2019 al ser operado de su pierna izquierda, la cancelación del campeonato en 2020 le hizo centrar en sus esfuerzos en el Mundial de SuperEnduro, que había ‘aparcado’ por la lesión después de haber finalizado como subcampeón en 2018 por detrás de Cody Webb.
Así fue como, en 2020, se convirtió en el antihéroe que impidió la reconquista del título por parte del polaco Taddy Blazusiak, que tras enlazar seis títulos entre 2010 y 2015 había pasado cuatro años a la sombra de los estadounidenses Colton Haaker y Cody Webb. Pocos podían imaginar que estaban asistiendo al inicio de la era del rayo. ‘The Thunder-Bolt era’, en inglés.
A partir de ahí, a los demás pilotos del mundo de SuperEnduro les llegó una súper tormenta. Año tras año, Bolt no solo se proclamaba campeón: les arrasaba sin piedad. Aquel mano a mano en el que ganó a Blazusiak en la última ronda del año fue el preludio de una dominación absolutamente escandalosa durante el lustro que vendría desde ahí.
En ese año sacó más puntos que nadie en tres de las cuatro rondas. En los cuatro siguientes, nadie ha sido capaz de ganarle a los puntos en una sola ronda. Como mucho, alguna que otra carrera suelta, y gracias. Seguramente su año más escandaloso fue 2022, cuando logró 312 puntos de 315 posibles para aplastar a un Jonny Walker al que tiene martirizado.
En 2023 acabó con 310 puntos (de nuevo sobre 315) y en 2024 acabó la temporada con 427 sobre un total de 441. En tres temporadas se había dejado 22 puntos de casi mil y nada hacía pensar que la tormenta fuese a amainar en el curso 2025, ni siquiera cuando en la segunda carrera de la ronda inaugural terminó fuera del podio.
Desde ahí, ganó todas las carreras menos una para acabar el año con 429 puntos de 441 y enlazar cinco títulos seguidos, a uno del récord de Blazusiak que, si nada sucede, igualará en un par de meses. Después, intentará desbancar a Manuel Lettenbichler en el hard enduro para buscar lo único que le falta: el doblete de títulos el mismo año.
