Misano encumbra a los antagonistas de Superbike: Tom Sykes y Marco Melandri

Acostumbrados a ver ganar a sus compañeros de equipo, ambos tuvieron su momento de gloria.

Nacho González

Misano encumbra a los antagonistas de Superbike: Tom Sykes y Marco Melandri
Misano encumbra a los antagonistas de Superbike: Tom Sykes y Marco Melandri

Seguramente, el fin de semana vivido en el Misano World Circuit Marco Simoncelli haya sido el más extraño en lo que llevamos de 2017 en el Mundial de Superbike, con tantos giros de guion que era difícil saber si la película era una tragicomedia, un drama o un thriller psicológico.

WSBK: SECUNDARIOS DE LUJO

Transcurría un viernes normal, cuasi monótono. Tom Sykes y Jonathan Rea hacían buenos los pronósticos que auguraban dominio de Kawasaki. Pronósticos que se seguían cumpliendo el sábado con la Superpole de Tom Sykes. Eso sí, para entonces, ya se había producido el primer giro inesperado: la presencia de una peculiar llanta lenticular en la Panigale de Chaz Davies.

Sólo era un anticipo de lo que estaba por venir. Cada manga contó con una estrella inesperada, un actor de reparto que se interpuso entre la cámara y los protagonistas habituales, copando los primeros planos y otorgando una cuota de pantalla inesperada a sus marcas y patrocinadores: Michael van der Mark en la primera, y Jordi Torres en la segunda.

En ambos casos, su presencia en el centro de la escena tuvo un final tan abrupto como injusto. Michael van der Mark se fue al suelo cuando lideraba, al salirse el neumático de la llanta de su Yamaha. Jordi Torres iba segundo cuando alzó la mano para alertar a los perseguidores de que su BMW había decidido pararse, igual que había hecho media hora antes la Ducati de Xavi Forés, que también tuvo una alta –aunque más efímera- dosis de protagonismo.

Hubo incluso un tiempo, esta vez breve, para degustar un atisbo de una nueva batalla entre los protagonistas de la saga Kawasaki vs Ducati. En la última vuelta de la primera manga, Jonathan Rea tenía la estela de Chaz Davies, preparando el ataque para la última curva. Sin embargo, dos curvas antes, el galés se fue al suelo y Rea, sin margen de reacción, le arrolló.

Se conjuró la suerte en Misano. Sucedió en un punto más o menos lento y el mono de Davies amortiguó el golpe, dejando el parte de lesiones en fractura lumbar y contusión en un pulgar. El domingo tuvo que ver la carrera desde el box, una minucia para lo que pudo haber sido.

Perdió una ocasión de oro Marco Melandri, que inició el giro final tercero y como espectador de lujo del interruptus ReaVsDavies. Pagó su fogosidad con una caída, que a la postre permitía hacerse con la victoria a un Tom Sykes que un minuto antes ni soñaba con el podio.

Segundo fue Alex Lowes y, tercero, tras reemprender la marcha, Jonathan Rea. Rozando el podio se quedaron Jordi Torres (4º), Xavi Forés (5º), con Román Ramos octavo. Un sábado fantástico para los tres españoles, que el domingo abandonaron por problemas mecánicos.

El domingo reservaba la gloria para Marco Melandri. Como Sykes, se está acostumbrando a algo que todo piloto odia: ser el número dos. Pero en Misano, sin Chaz, sólo estaba él para defender el honor de su equipo y, -tras los abandonos de Forés y Fabio Menghi-, de Ducati.

Estaba haciendo una carrera perfecta, y la rotura de la BMW de Torres le abrió el cielo de la victoria; que -tras aguantar detrás a Jonathan Rea y Tom Sykes-, cruzó de par en par para delirio de los aficionados italianos, que una semana después de ver a Andrea Dovizioso ganar con Ducati en Mugello, han vuelto a experimentar el triunfo del trinomio italiano piloto-moto-circuito. Eso sí, Rea ya se ha asegurado irse líder de vacaciones tras Laguna Seca.

WSS: KENAN EL BÁRBARO

Aunque su renta al llegar a Misano era todavía de 30 puntos, las tres victorias consecutivas de Kenan Sofuoglu en Assen, Imola y Donington cargaban de presión la espalda de Lucas Mahias. El francés había logrado minimizar el impacto de la tiranía victoriosa del otomano entrando segundo en las tres ocasiones, pero sabía que aguantar así toda la temporada era utópico.

Por eso, salió a ganar. Y pagó el atrevimiento. Se fue al suelo a las primeras de cambio, cuando rodaba segundo a la estela de su máximo rival. Sin un galo, Kenan Sofuoglu tuvo que lidiar con otro, al que conoce de sobra. Jules Cluzel lo intentó todo, pero Sofuoglu se puso el traje de ‘Kenan, el bárbaro’ para lograr su cuarta victoria consecutiva. Cluzel fue segundo y Federico Caricasulo completó el podio, con PJ Jacobsen cuarto. Nacho Calero fue 16º.

SSP300: GRACE KELLY, POR MIKA

Con la repentina noticia de que había ganado la carrera de Donington por descalificación –al parecer había infringido el reglamento técnico- del por entonces vencedor, Alfonso Coppola; Mika Pérez salió a la carrera de Misano con una intención: convertir su pole en victoria y sumar 25 puntos más, pero esta vez en pista, cruzando el primero la bandera de cuadros.

Mika, cuyo nombre recuerda inevitablemente al cantante libanés que se hizo famoso con una canción con el nombre de la mítica actriz Grace Kelly, firmó una última vuelta memorable ante los pequeños ídolos locales de la BluCru de Yamaha –Armando Pontone y el propio Alfonso Coppola-, a los que tapó todos los huecos para vencer a lomos de su Honda. Marc García fue sexto, Borja Sánchez séptimo, Dani Valle décimo y Ana Carrasco 14ª tras una salida de pista.

STK1000: SONRISAS Y LÁGRIMAS

Parecía milagroso que, con lo que estaba pasando en Misano, no hubiera hecho aparición la bandera roja. Y cuando lo hizo, lo hizo tarde, para enfado monumental de Federico Sandi, que se cayó por el aceite dejado en pista por Roberto Tamburini, interrumpiendo una carrera que Michael Ruben Rinaldi tenía ganada, con Toprak Razgatlioglu aspirando a la segunda posición.

En la reanudación, Rinaldi trató de escaparse, pero Sandi y Marco Faccani se pegaron a su rueda. Sandi rompió su moto y estorbó a Razgatlioglu, que se vio engullido por el segundo grupo. Delante, Faccani se hacía con la victoria en el mano a mano ante Rinaldi, con el chileno Maxi Scheib completando el podio. Razgatlioglu sólo puso ser séptimo, perdiendo el liderato ante Rinaldi, que aunque perdió la victoria, a la postre salió favorecido por la bandera roja.