La principal función de un casco de moto es la de proteger la cabeza de su piloto en el caso de sufrir una caída. Eso es algo incuestionable.
Ahora bien, tampoco se puede negar que, por su situación tan expuesta, el casco no tiene una gran influencia en la estética del conjunto humano/moto. Es por eso que a la hora de escoger un casco, la apariencia del mismo tiene una importancia sustancial en la decisión, aunque, insistimos, nunca más que la capacidad de protección del mismo.
Las dudas del compromiso se despejan si pensamos en un casco como el Bell Bullit SE, una edición especial del afamado fabricante norteamericano. Este modelo permite a sus propietarios salirse del camino marcado y lucir un casco con aspecto personalizado pero recién salido de la caja. La marca estadounidense ha reunido a algunos de sus mejores artistas para trabajar en una revolucionaria propuesta que bebe de las tendencias más innovadoras. El Bullitt SE se presenta como un casco exclusivo, confeccionado con las técnicas más detallistas, y que cuenta con un diseño que emula llamas de fuego y líneas dinámicas y modernas. Las gráficas atrevidas maridan a la perfección con su innegable estilo retro, inspirado en los icónicos modelos Star de los años 60 y 70.
La estética no enmascara la calidad que se presupone a un casco Bell. Los materiales empleados son de primera, empezando por los interiores en piel de alta calidad –antibacteriana y transpirable-, y continuando por su calota en composite de fibras con un diseño compacto y recogido. Una calota que está disponible en tres tallas diferentes, combinable con acolchados interiores de diferentes tamaños, para proporcionar un alta versatilidad de tallas. Las formas envolventes de la pantalla encajan a la perfección con el diseño del Bell Bullit, tanto la versión clara como la oscura también incluida en la compra. No falta un sistema de bloqueo mediante solapa de cuero, absolutamente genuina, ni tampoco el cierre por doble anilla, las entradas de ventilación superiores e inferiores y el espacio preparado para el uso de un intercomunicador.
Esta edición especial cuenta con una amplia variedad de pantallas para que todos los motoristas puedan personalizar aún más su estilo y lucir un look único y diferencial. Cada detalle suma y contribuye a completar una propuesta artística disponible en tallas que van desde la S a la XL, a un precio de 599,99 euros (PVPR IVA incluido). Los cascos de la marca Bell están disponibles en España gracias a la distribución realizada por Bihr.