Quince años y 252 días, será la edad de Jorge Prado cuando, éste próximo domingo 31 de julio, caiga la valla de salida en la pista belga de Lommel, para los pilotos del Mundial de MX2. Una edad que, por supuesto, convierten al lucense en uno de los más jóvenes de la historia en disputar su primera carrera en el Mundial de Motocross, siendo apenas cincuenta días más mayor que cuando se estrenó Jeffrey Herlings -en Bulgaria, 2010-, y estando también cerca de otro niño prodigio como lo fue el alemán Ken Roczen -15 años y 11 días, cuando debutó en el Gran Premio de Portugal de 2009-. El simple hecho de poder comparar la precoz trayectoria de Jorge Prado -Campeón del Mundo de MX65 y de Europa en MX125-, con la de dos estrellas ya consagradas como Ken Roczen y Jeffrey Herlings, suponen un mérito destacado para el lucense, y también una esperanzadora noticia para el motocross español, tan deseoso de los éxitos que se celebran en otras disciplinas del motociclismo nacional.
Para conocer las impresiones del piloto del KTM Junior Factory Team ante tan importante momento, contactamos vía telefónica con Jorge Prado, cuando éste se prepara en su residencia habitual, precisamente en Lommel, para empezar su rutina de entrenamiento habitual a primera hora de la mañana, con una sesión de bici seguida de otra de natación.
- Hola Jorge. Cuéntanos cómo ha surgido la posibilidad de que debutes en el Mundial de MX2 en Lommel.
- Desde el principio del año ya veníamos hablando de hacer alguna prueba del Mundial en 2016. Al principio de temporada tuve una lesión y me costó un poco coger el ritmo, pero últimamente estoy rodando muy bien. Así que a KTM le pareció oportuno que nos decidiéramos a debutar ahora en la carrera de Lommel.
- Entonces, aunque el poder correr en el Mundial este año estuviera ya previsto, ¿el que sea ya en Lommel ha sido un poco por sorpresa?
- En realidad no. A mitad de temporada, más o menos, ya se empezó a barajar la posibilidad de debutar en Lommel. Yo creo que es un buen escenario para estrenarse, porque a mí me gusta mucho la arena y creo que puedo hacerlo bien. En realidad, Lommel es como mi circuito de casa, porque vivo muy cerca de él, y entreno allí habitualmente.
- Así que, lo que para otros sería un escenario imponente, a ti en realidad te da más confianza…
- Sí, la verdad es que sí. Estrenarme en Lommel me da mucha más confianza que si fuera en otro circuito.
- ¿Cuál será la moto que utilices, la que deja libre Jeffrey Herlings, por su lesión de clavícula, o la tuya habitual del Europeo?
- No, usaré mi moto habitual, que es a la que estoy acostumbrado, sobre todo ahora que hemos hecho varios test de suspensiones con los técnicos de WP, y los cambios me han aportado mucha seguridad.
- ¿Qué tal estaba marchando la temporada en el Europeo para ti?
- Bueno, por culpa de la lesión que sufrí poco antes de la primera carrera, en Valkenswaard, me vi obligado a debutar en el certamen ya en la segunda carrera, en Letonia. Apenas llevaba dos semanas de entrenamiento, así que no tenía mucho tiempo encima de la moto. Poco a poco, con el paso de las carreras, fui mejorando mis resultados, logrando varios pódiums, así que puedo decir que estoy contento con cómo estaba yendo la temporada».
- Sientes algo de pena por dejar un certamen en el que estabas destacando, o eso lo supera la ilusión de debutar en el Mundial.
- Me hace más ilusión correr en el Mundial, por eso lo hacemos así, aunque es cierto que en el Europeo ahora íbamos cuartos, lo cual no está mal después de habernos perdido una carrera. Pero bueno, ahora vamos a correr el Mundial, también en parte a modo de experiencia de cara a la temporada que viene.
- ¿Qué te haría más ilusión, ganar el Europeo en Lommel o quedar entre los diez primeros en el Mundial?
- Sin duda, ¡un «top ten» en el Mundial!
- En qué estado de forma llegas a este Gran Premio. Quizá te ayude el que ya hayas terminado las clases y puedas centrarte en entrenar, ¿no?
- Sí, bueno, es cierto que la cita llega en un buen momento, ya que ahora puedo coger más la moto porque se han terminado las clases. Al final del curso tuve que centrarme en los exámenes finales y eso me condicionaba en las carreras, porque nada más acabar las mangas tenía que ponerme a estudiar y por la semana me aplicaba más en los libros que en la moto. Así que por ese aspecto, bien, pero lo malo es que justo la semana pasada tuve una caída entrenando y me lastimé en el hombro, que ahora mismo no lo tengo al cien por cien. Espero estar bien para el fin de semana de la carrera.
- Algunos de los rivales que te encontrarás en el Mundial ya los conoces por haber competido contra ellos en otros certámenes nacionales o internacionales. ¿Eso te hace sentir más confiado y te ayuda a marcarte un objetivo?
- Bueno, he coincidido con algunos pilotos del Mundial en alguna prueba del Campeonato de Holanda, pero creo que no cuenta mucho porque son situaciones diferentes. Lo mismo diría de, por ejemplo, Bas Vaessen, uno de mis rivales en el Europeo, y que este pasado fin de semana corrió el Gran Premio de la República Checa, pero es un circuito muy diferente y creo que no me sirve de referencia. No obstante, sí que tengo más o menos una idea de dónde puedo estar en carrera, porque entreno habitualmente con muchos de los pilotos mundialistas.
- ¿Sabes si después de la cita de Lommel, seguirás corriendo en el Mundial hasta que acabe la temporada o volverás al Eurpeo?
- Sí, eso lo sé; me quedaré en el Mundial. Porque, en realidad, esta oportunidad no llega sólo para sustituir a Jeffrey Herlings ni a Pauls Jonass, llega porque a KTM le ha parecido conveniente para mí, para que gane experiencia. Así que aunque ellos dos vuelvan, yo voy a seguir corriendo en el Mundial hasta que se termine esta temporada.
- Y de cara a la próxima campaña, ¿está decidido si correrás en el Mundial o si te marcharás a Estados Unidos a competir en Supercross?
- No, finalmente hemos decidido que correremos el Mundial, así que será mi primera temporada al completo en MX2, y en parte ese es el motivo de debute ya en Lommel este fin de semana.