Marc Márquez afronta en el circuito de Buriram su primera bola de partido, y lo hace con muchas posibilidades de sellar el que sería su sexto título en la categoría reina y octavo en total. Pero dadas las circunstancias, Márquez lo afronta como un GP más. “Estamos relajados porque sabemos que es un fin de semana que se puede conseguir algo importante, pero conscientes de que tendremos más bolas de partido si aquí pasa algo. Pero eso no cambia la estrategia de cualquier GP", comentaba el piloto del Repsol Honda en rueda de prensa.
En cualquier deporte se diría que la relajación se puede convertir en un arma de doble filo, pero en este caso, Márquez matiza esta “relajación" a la que alude. “Hablo de relajación porque no hay ese extra de presión, pero mi intención el domingo es la de siempre, es intentar ganar la carrera. Luego durante el fin de semana los rivales nos irán poniendo en el lugar que nos corresponda pero no será un domingo que vaya a ir pendiente de un piloto. Hoy por hoy, mi intención es ganar la carrera".
“El año pasado también estaba tranquilo, porque también tenía más bolsa de partido. Cuando tú te la juegas en Valencia y lo consigues la recompensa y el chute de adrenalina es mucho mayor, pero en esta ocasión tienes la tranquilidad de que si no ocurre no es el fin del mundo porque habrá otras oportunidades".
Uno de los aspectos que han destacado todos los pilotos en rueda de prensa es que lo que ha ganado Márquez este año es en consistencia. “Y me hace ilusión que mis rivales destaquen mi consistencia porque era uno de los objetivos que me había marcado para la temporada. Ese y el de intentar caer menos, aunque si me tengo que caer veinte veces para ser campeón, lo haré… pero si se pueden mejorar los puntos débiles mejor. Si aquí conseguimos el campeonato, intentaré mantener la misma consistencia hasta el final de la temporada".
“Las diferencia con mis rivales es mucha, pero quizás soy el que menos ha fallado y el que ha mantenido casi siempre la velocidad. Es cierto que los rivales han ido fallando pero poder hacer un campeonato así, tal y como está MotoGP de igualdad mecánica, da más pie a que podamos marcar la diferencia los pilotos. Hemos ganado muchas carreras y en las otras hemos quedado segundos y casi siempre ha sido luchando hasta la última curva. Eso es arriesgar".
Lo que se notaba hoy en el ambiente de Buriram, es la falta de tensión que hay entre los pilotos de MotoGP. “Ha habido tensión durante todo el año para llegar al final de la temporada un poco más relajado", comenta Márquez, que ni siquiera planea una estrategia de marcar a Dovizioso durante la carrera. “No voy a estar pendiente de en dónde está durante la carrera. Lógicamente, si le pasa algo me lo marcará mi equipo, pero es como hacemos cuando le pasa algo a cualquiera de los tres primeros del campeonato. Es una estrategia del todo el año y no va a cambiar".
El estreno de Buriram en 2018 fue una carrerón que se decidió en un mano a mano entre Dovizioso y Márquez que ganó el español. Pero donde también estuvieron las Yamaha de Viñales y Rossi. Para Marc, la carrera de 2019 será otra historia. “El neumático trasero este año es diferente, tendrá más grip y eso significa que las motos trabajarán un poco diferentes. Durante el fin de semana se irá viendo qué carrera se puede esperar aunque el año pasado ya fue una carrera extraña. Lideró Dovizioso, pero era lenta porque iba gestionando el neumático y me venía bien porque arriesgamos menos, pero este año podemos arriesgar un poco más".