Con su inapelable victoria en Jerez, Marc Márquez dio un aviso a navegantes. Puso el ‘Mapping 14’ y no dio opción a ninguno de sus rivales; lo cual, unido a su triunfo dos semanas antes en su habitual feudo texano le ha catapultado a lo más alto de la clasificación general del Mundial de MotoGP por primera vez en este 2018. Le han bastado cuatro carreras, con cero incluido.
Y mientras los equipos y pilotos de la máxima categoría de los prototipos disfrutan de unos días libres tras el Gran Premio de España; este fin de semana es turno de los pilotos del WorldSBK. Encabezados por los del Mundial de Superbike, máxima categoría de las motos de serie, desembarcan en Imola con el norirlandés Jonathan Rea al frente de la tabla.
Por primera vez en este 2018, Márquez y Rea dominan las clasificaciones generales de sus respectivas categorías. Exactamente tal y como hicieron al final de las temporadas 2016 y 2017. Los dos mismos pilotos reinando dos años consecutivos en prototipos y serie, respectivamente. Puede parecer increíble, pero hacía más de dos décadas que no sucedía algo así. En concreto desde 1995, cuando tanto Mick Doohan en 500cc como Carl Fogarty en Superbike revalidaron los títulos mundiales.
De hecho, es algo que solamente ha sucedido en cuatro ocasiones desde la creación del Campeonato del Mundo de Superbike en la temporada 1988.
La primera fue en ese mismo año y el siguiente (1988-1989), con el norteamericano Eddie Lawson enlazando dos títulos mundiales de 500cc –primero con la Yamaha YZR500 y después con la Honda NSR500-; y su compatriota Fred Merkel haciéndose con las dos primeras temporadas de la historia en Superbike, ambas con la Honda RC30.
Poco después (1991-1992) eran otros dos norteamericanos los que tomaban el relevo: Wayne Rainey ganaba sus dos últimos títulos en el medio litro con la Yamaha YZR500, coincidiendo con las dos coronas conquistadas por Doug Polen con la Ducati 888.
De forma casi consecutiva (1994-1995), el australiano Mick Doohan ganaba sus dos primeros títulos de 500cc con la Honda NSR500; al tiempo que Carl Fogarty se hacía con sus dos primeros campeonatos en Superbike con la Ducati 916.
Más de dos décadas después (2016-2017), el español Marc Márquez lograba enlazar dos títulos seguidos de MotoGP con la Honda RC213V al tiempo que Jonathan Rea lograba su segundo y tercer título consecutivo en Superbike con la Kawasaki ZX-10R.
Ahora tienen por delante el más difícil todavía: hacer lo que ninguna de las ‘parejas’ de ganadores anteriores pudieron: dominar prototipos y serie durante tres temporadas en fila:
- En 1990 ni Lawson ni Merkel pudieron revalidar los títulos. El primero vio truncado su reinado en 500cc ante Rainey, mientras que el cetro de Superbike fue a parar al francés Raymond Roche.
En 1993 tampoco lo lograron ninguno de los dos: Rainey sufrió su terrible accidente en el año del único título de Kevin Schwantz con Suzuki; mientras que Polen cedió el trono a Scott Russell, que logró el primer título de Kawasaki en SBK.
En 1996 Mick Doohan sí siguió con su racha triunfal en el medio litro, pero en Superbike fue el australiano Troy Corser el que relevó a Fogarty.
Por eso, en este 2018 son Marc Márquez y Jonathan Rea los que tienen la ocasión de lograr un hito histórico y único en el motociclismo de velocidad: dominar los dos grandes campeonatos tres años consecutivos.