Marc Márquez sonríe pese a la derrota. “Bueno, estaba delante, ¿qué quiere?”, contesta entre carcajadas cuando le recuerdan su intención de dedicarse a vigilar al rival. El rival no es otro que Andrea Dovizioso, y lo ha vigilado hasta la misma línea de meta, perdiendo por dos décimas después de estar a punto de caerse en el giro final.
“Me he visto en el suelo en tres momentos”, admite, antes de enumerarlos empezando por la mencionada del final: “En la curva ocho de la última vuelta me he mantenido en la moto por alguna razón”, reconoce el español, que sigue: “También en la curva 7 y en la curva 3 al pasar a Dovizioso”, explica. “Ahí pensaba que nos íbamos los dos al suelo, porque ha frenado muy pronto y no me lo esperaba. Casi nos tocamos”, continúa Márquez tratando de explicar la épica batalla con el italiano, asegurando que se lo ha pasado muy bien:
“Al final habéis disfrutado vosotros y nosotros. Lástima que hayamos perdido en esa última curva de la última vuelta”, se lamenta el de Cervera. “En Misano lo probé y me salió bien. Aquí lo he probado y me ha salido medio bien, no bien del todo. Hemos perdido cinco puntos y, honestamente, sabía que era una pista en la que Dovi tenía que atacar”, concede el de Honda, que ahora sigue líder pero con sólo once puntos respecto al de Ducati.
Lógicamente, pese a haber disfrutado de la pelea, la derrota “pica más por estar tan cerca”, y también por ser ante el gran rival, lo que da valor doble a la victoria de Dovi: “Dos décimas te separan de cinco puntos más, que en verdad son diez, porque son cinco que suma el rival y cinco que dejas de sumar tú”, reflexiona el ilerdense, que también admite que no ha seguido el plan establecido para Japón:
“Lo importante es que vamos once por delante y en carreras así debemos saber usar esa diferencia, aunque no hemos sabido. En Misano tocaba atacar y aquí no tanto, pero he decidido hacerlo y no ha salido como esperábamos. Es un circuito menos con once puntos y ahora vendrán circuitos y trazados que seguramente nos favorezcan más”, se anima el 93, que se ha centrado en la victoria dejando a un lado el título.
“No he pensado mucho en el campeonato”, reconoce, aunque matiza: “Ha habido un momento que sí, cuando iba detrás de (Danilo) Petrucci y he tenido un susto”, apunta el de Honda antes de relatar cómo ha vivido él las diferentes fases por las que ha pasado la carrera:
“Luego he intentado apretar fuerte tres vueltas y he visto que Dovizioso estaba. Cuando me ha pasado, creía que se iba, porque no tenía sensación, pero me he rehecho y ahí es cuando ha venido el espectáculo”, sostiene el vigente campeón, que quita hierro a lo que tanto él como Dovi han pilotado de forma increíble para estar el asfalto mojado:
“Bueno, cuando te estás jugando un campeonato, ya sea en agua o en seco, tienes que arriesgar y es ahí donde la experiencia te ayuda a suplir las traiciones de la presión. Con el agua y el campeonato en juego te entran todos los miedos y ves el riesgo donde otras veces no, por lo que tienes que saber olvidarte un poco e ir rápido sin pensar en el campeonato”, asevera Márquez, que apunta al mérito que tienen tanto él como su rival: “Eso lo estamos consiguiendo tanto Dovizioso como yo y es lo que hace que sea incluso más difícil ganarlo”, subraya.
Valora también que el título ya se prácticamente cosa de dos: “Mano a mano me gusta un poco más, y creo que a Dovizioso también. Veremos cómo va en las siguientes carreras”, prosigue, si bien también señala que Maverick Viñales llega a un circuito muy propicio:
“En Australia Maverick puede ir muy rápido, pero ya puedes gestionarlo de otra manera. Esto ayuda, pero tal y como está de apretado el campeonato, si puedes conseguir dos puntos más, lo vas a intentar. Allí pueden influir muchos factores, como aquí, donde hemos tenido todos los entrenamientos en agua, que es algo que yo no había hecho nunca”, recuerda.
Lo que no le ha sorprendido es la agresividad de Dovizioso: “Esperaba un Dovi así. Él es consciente de que está en un momento bueno y se lo cree, por mucho que diga que él está calmado. Así se está con más tensión que nunca y sabe cuáles son los circuitos en los que tiene que apretar. Éste era uno de ellos y Malasia será otro”, reconoce Marc, que avisa: “En los dos que son de izquierdas intentaremos apretar nosotros”.
Marc quita hierro al hecho de que la segunda Honda haya estado tan lejos (Tito Rabat, 15º): “Es que era un circuito crítico para nosotros”, admite. “Lo teníamos marcado como difícil. Austria lo salvamos y no sabemos cómo aún, y éste, por mucho que sea la casa de Honda, siempre hemos sufrido salvo el año pasado. Lo hemos salvado con un segundo puesto y en agua consigo ir rápido, pero la moto era mejor en agua el año pasado. El global de la moto es mejor, pero en agua tienes que confiar bastante porque hay un punto en el que parece que te vayas a caer y, si vas tirando, al final no te caes”, afirma Márquez, que también reconoce entre risas que “en las tres primeras vueltas tienes que poner ahí un pelín de empeño o bemoles”.
