Cada vez está más cerca el regreso de Jorge Martín a la competición y su esperado debut con la Aprilia. El piloto madrileño participó por sorpresa en la pasada rueda de prensa del GP de Argentina para informar de que se saltaría la segunda cita en suelo americano y que no podía asegurar su presencia en el circuito de Lusail, donde se celebra la cuarta parada en el campeonato del 11 al 13 de abril.
Una semana después, el escenario parece más optimista para Jorge Martín, que ya se marca la carrera qatarí como un objetivo realista. "Cuento con estar en Qatar, pero solo si no entraña riesgos. Haré una visita después de Austin, eso creo. Estos son los tiempos, y sería un error acelerarlos, ya que correría el riesgo de hacerlo todo aún más largo”, comenta el vigente campeón de MotoGP en una entrevista con el diario italiano La Gazzetta dello Sport.
Con la mirada puesta en Qatar, pero sin adelantar plazos, Jorge Martín está convencido de que “con la Aprilia volveré más fuerte”. Y es que no es la primera vez que el español tiene que sobreponerse a una larga convalecencia. Ya le pasó en su primer año en MotoGP, tras su brutal caída en Portimao y acabaría ganando cuatro meses después en Austria, en su primera victoria en la clase reina.

Aunque también es consciente de que parte en franca desventaja con respecto a sus rivales. No solo en la parte física, sino también en la técnica. “Comparado con los demás me faltan por lo menos 5.000 km. Así que, el objetivo es volver lo antes posible, familiarizarme con la moto. Todo pasa por algo. Nos hará volver más fuertes que antes”.
Jorge Martín también analiza en la entrevista con el diario italiano el inicio del Mundial de MotoGP marcado por el dominio de Marc Márquez, algo que no le ha pillado por sorpresa. “Que Marc gane no es algo que alguien no pudiera esperar”.
Y demuestra también que ya ha pasado página de lo sucedido en 2024, cuando Ducati eligió al de Cervera antes que a él para sentarse en el box oficial: “La vida es así. Hay que adaptarse y aprender. Me centré en lo que tenía que hacer: ganar el Campeonato del Mundo. No guardo rencor a nadie. Al fin y al cabo, me gustan los retos, y no hay mayor reto que intentar volver a ganar con una moto que nunca ha ganado el campeonato. Así que estoy contento".