Bueno, nos habíamos quedado en Japón en la pista de pruebas de Yamaha, donde una vez calientes y quemados tras probar la R6 2008 en Sugo, en un circuito realmente chulo, algo que habrás visto ya en MOTOCICLISMO, tuvimos la ocasión de disfrutar de la prueba de la T-Max. Te había contado ya más o menos cómo va este gran scooter de Yamaha, pero creo que olvidé que al rodar en el circuito de CSC empezamos como siempre "oye, vamos tranquis, que aquí se trata de hacer fotos, y la pista está forrada de árboles, piedras, pretiles y demás, y no es cuestión de que nos repatrien"… pero que acabamos haciendo carreras como juniors en una copa de promoción. Por suerte, el TMax será un scooter, pero es también una buena deportiva –no me atrevo a llamarle moto, por si se enfadan los de Scootermanía, que dicen que un buen scooter no tiene nada que envidiarles- y pasó la prueba con excelente alto, y además sólo se cayó un francés, algo que no resulta precisamente extraño de lo habituados que están a dar la nota.El programa de ferias y festejos que nos ha preparado el jefe de la excursión "Yamaha by Spain" a Japón, Juan Carlos Gutiérrez, -muy atento, eficaz y profesional, y buena gente, dicho sea de paso- es tan apretado que hasta ahora no he podido ni siquiera darles un paseo a mis zapatillas de running y a mis pantalones cortos. Además, en el primer hotel en Nagoya el gimnasio estaba cerrado por obras, así que hasta esta noche no he podido hacerme 50 minutos de subidas y bajadas a mi "trote gorrinero", pero ha valido la pena: el hotel en el que nos encontramos es un complejo rural rodeado de un campo de golf, y te aseguro que por rodar por el camino destinado a los carritos de golf a la luz de la luna llena ha valido la pena llegar tarde a la primera tanda de sushi de la cena… Bueno, suerte que sólo me he saltado los libres: para los cronometrados, al llegar el sukiyaki, ya he hecho primera línea…Hemos terminado con el T-Max… pero me espera otra noche de escribir desde la habitación del hotel para mandar texto y… ¿fotos? Son las 2 y media de la madrugada, pongo las fotos de detalle y estáticas en el servidor de la revista mientras voy escribiendo el texto y, al abrir las de acción… se me hiela la sangre. Aunque el DVD está marcado a mi nombre, la carpeta correspondiente luce el nombre de mi buen amigo Luis López, mi compañero de La Moto… ¡No puede ser, es imposible!... ¡Estoy mandando las fotos con urgencia absoluta para que lleguen al cierre y los foteros están a 300 km de distancia y no puedo despertarlos!Por suerte, me salvan las 8 horas de decalaje horario: a través de Mikiko, nuestra guía, puedo avisar a los chicos de las cámaras para que manden una selección directamente a nuestros amigos Ilde y Juan, que las están esperando como agua de mayo… Ya pasó en la batalla de Japón: ¿Quién dijo que iba a ser fácil, coronel Flannagan?Con el miedo en el cuerpo, otros dos autobuses más nos llevan de nuevo a Tokio, donde asistiremos a la presentación de Yamaha en el Salón de Tokio. Es curioso: esperaba, la verdad, un megasalón que dejara en ridículo al de Barcelona, por no decir el de París, y es todo lo contrario. Como Japón es un mercado local, exponen sólo las cuatro grandes marcas japonesas más KYMCO, Ducati, Triumph y Harley-Davidson… Y casi no hay nada de industria auxiliar: un pequeño stand de Arai, otro de Nissin… Las cuatro marcas japonesas pactaron un riguroso turno de las ruedas de prensa con las que abrieron sus respectivos escenarios, de 2.35 a 3.05, en Honda, de 3.10 a 3.35 en Yamaha, después Suzuki y así. Siempre con la presencia de los máximos responsables de las cuatro gigantes, que llegaron precedidos de impresionantes cabezazos-reverencias, las marcas expusieron su política de marca en un certamen destinado, más que nada –el mercado interno está en franca recesión- a demostrar lo que son capaces de hacer: motos eléctricas, motos híbridas, chasis de metacrilato y papel de aluminio mashé, motores con esferuladores positrónicos… ¡impresionante! Claro, que la gran mayoría de novedades ya las has visto en MOTOCICLISMO.es en nuestras noticias previas al Salón, así que verás este martes en la revista que a nivel de grandes exclusivas poco pudimos rascar. Eso sí, tuvimos la oportunidad de ver en vivo y en directo la gran cantidad de los estupendos modelos nipones de 400 cc que siguen la legislación vigente en aquel país. Recuerda que las superbikes –estas «hipermotos de más de 500 cc», según Pere Navarro- que puedes ver circulando por aquellas calles –y “con el gas a la izquierda” (eso es broma, claro) pero recuerda que se conduce a contramano- han sido previamente exportadas y reimportadas a Japón.Tras la visita del Salón ya casi vemos «la puerta de salida» a este periplo de once días: nos queda sólo otra noche, un último asalto al sashimi desde un restaurante en el piso 42 de un rascacielos de Tokio… y otras 20 horas de vuelo… El cambio de horario desorienta: si hoy es martes, esto es Japón, como decía la película. Pero al volver a encender el ordenador de sobremesa me esperan nada menos que 417 correos electrónicos… «Arigato gosaimastá», Yamaha, y ¡sayonara, babys!...
Desde la presentación de las Yamaha R6 y TMax 500 (y 4)
Yamaha nos lleva a Japón a probar sus novedades. Último capítulo de la presentación de Yamaha de sus R6 y T-Max, desde el punto de vista de nuestro enviado especial Pere Casas. Tras la prueba dinámica de los dos modelos, la firma de los diapasones llevó al grupo de periodistas al Salón de Tokio, donde pidieron ver en vivo y en directo las novedades que ya te hemos presentado a través de la web.