TT Fun Series Honda. "Marcianos" por un día

Enduro. Cto. TT Fun Series Honda. Resistencia enduro.. Invitados por Honda, tomamos la salida como invitados de la cuarta prueba de las divertidísimas TT Series. Rodar en el rancho de «King» Kenny Roberts, situado en los aledaños de Montmeló, nos convirtió en marcianos por un día.

Marcos Gil. Fotos: Honda/TR Media

TT Fun Series Honda. "Marcianos" por un día
TT Fun Series Honda. "Marcianos" por un día

La razón de ser de estas TT Series, con ingredientes de curso de conducción y de carrera social entre amigos… que no quieren perder ni a las chapas, eso sí, es disfrutar aprendiendo rutinas de derrapaje que luego nos servirán para el pilotaje sobre asfalto. «King» Kenny, y después de él casi todos los gurús de la velocidad, siempre han abogado por este tipo de entrenamiento para ejercitar el sensor de nuestro trasero encargado de indicarnos cuándo la rueda trasera está comenzando a patinar y, en un segundo estadio más avanzado, cómo utilizar esto para ir más rápido. Así, y gracias a la invitación de Honda, pudimos disfrutar de una completa jornada de emociones, polvo y mucha diversión junto a nombres ilustres como Javi García Vico, Luis Carlos Maurel, Xavi Rodríguez, Pol Laspuertas, y bajo la supervisión del monitor-rival casi imposible de batir, Lucas Oliver Bultó.

A tu alcance
Por muy poco dinero, las TT Series ofrecen una forma de aprender y divertirte de forma asequible. Ni siquiera tienes que adquirir una CRF100, ya que la escuela te la puede alquilar de serie para correr en Rookies (200 euros por equipo y carrera) y así tú sólo te centras en disfrutar acompañado de un amigo, en mi caso mi compañero de Motociclismo.es, José Benavente. Y si quieres ir a tope, siempre tienes la opción de preparar una e inscribirte en la categoría Master e intentar que te salga gratis el curso. Para eso sólo tienes que ganar al maestro, Lucas Oliver. Él mismo lo dice en el briefing: «si me ganas, curso gratis», pero cuando le ves pasarte por fuera en el óvalo entre una nube de polvo te das cuenta de por qué lo dice. La verdad es que impresiona cómo se puede ir con unas modestas CRF100. Entrenamientos libres, cronometrados, superpole y dos mangas con salida tipo Le Mans y relevos cada cuatro vueltas te aseguran más de una hora encima de la moto por jornada y piloto, lo que no está nada mal. Y al final, qué mejor que una comida social en la que comentar los mejores momentos del día, chinchar a los colegas-rivales con la tabla de clasificaciones en la mano o simplemente charlar de motos. Una muy interesante forma de competir sin duda alguna, con el aliciente de estar aprendiendo técnicas aplicables a casi cualquier tipo de moto y tomando los mínimos riesgos posibles. ¿El resultado? Lo de menos, lo realmente importante es haber compartido pista y experiencias con auténticos pilotazos. Eso, no tiene precio. ¿Te apuntas a la próxima?