Gama Cruiser de Triumph

Nuevas Triumph America, Speedmaster y Storm. Triumph remodela para 2011 dos de sus cruisers. Por un lado, afina detalles en sus America y Speedmaster. Por otro, sube la cilindrada de su impresionante Storm a 1.700 cc. Para romper cervicales a su paso... Tweet

Pere Casas. Fotos: Triumph

Gama Cruiser de Triumph
Gama Cruiser de Triumph

A pesar de que el mercado mundial de más de 500 CC ha caído un 13% el año pasado, Triumph ha aumentado su penetración hasta el 4,8 %. Aunque ha perdido unas 1.500 unidades, ha llegado hasta 45.001 motos, y previene alcanzar nada menos que 53.000 en 2011. Nada mal para una marca renacida en 1992 de sus históricas, pero legendarias cenizas, por John Bloor, un magnate inglés de la construcción que prefiere pasar inadvertido y dejar la dirección de la marca a su hijo. Hablamos de una marca que en la última década ha diversificado su producción desde las motos de carretera pura yendo más allá de sus motores tricilíndricos. En el campo de las cruiser, remodela para 2011 dos de sus modelos más señeros propulsados por bicilíndricos en línea, y además de potenciar su tremebunda Storm, mejora el modelo America-Speedmaster, acentuando en sus custom medias sus distintos aires, uno más americanizado, el otro más europeo.

Triumph America y Triumph Speedmaster
La America es la puerta de entrada en la gama Triumph Cruiser. Para 2011 mejora la ergonomía para el piloto y el pasajero, y se distingue en mayor medida de la Speedmaster, con la que comparte mecánica, abundando en su estilo «Classic» americano o «Fat». Con ruedas de 16” delante y 15” atrás –ahora más ancha– de aleación de aluminio y 12 palos, neumáticos de perfil alto, guardabarros ahora más envolventes, horquilla de 41 mm de apariencia masiva, doble amortiguador trasero, simple disco delantero de 285 con pinza flotante de dos pistones, y peso que
no supera con el depósito tipo lágrima lleno los 250 kg. El cambio más importante viene cuando te sientas sobre ella.

La altura del asiento, ahora de una sola pieza, ha sido rebajado 30 mm, desde los anteriores 720 a sólo 690 mm, de modo que hasta yo llego al suelo con ambos pies. El conductor queda más cercano de los mandos, porque aunque los estribos se han rebajado 27 mm y atrasado 39 mm, –al igual que el soporte de la pata de cabra, para que la moto quede más «derecha» en parado– el manillar se ha llevado hacia atrás. Otro detalle que cambia es la situación de los intermitentes, ahora montados en la tija de horquilla. La America se sirve en bicolor «Eclipse Blue & Crystal White», a 9.595 € (probamos una unidad equipada con toda una completa lista de accesorios Triumph específicos, como parabrisas, maletas de cuero…) y en «Phantom Black», 9.395 €. La conducción de la America, que mantiene en plena forma su bicilíndrico de aire paralelo de 865 cc y 61 CV a inyección y calado a 270º compartido con la Speedmaster, es todavía más natural, más cómoda, y con un estupendo aplomo en curva una vez apoyada.

Por su lado, su hermana casi gemela Speedmaster tiene un estilo y carácter más europeo. Su gran diferencia es su rueda delantera de 19”, que le da un tacto más libre y suelto al tren delantero, sin comprometer apenas su estabilidad en curva. Para 2011 acentúa su estilo custom buscando diferenciarse más de la America. Los cárteres del motor son ahora negros, su depósito es tipo lágrima y los guardabarros, minimalistas. Los intermitentes van en el manillar y el faro delantero ha sido rediseñado. La horquilla, sin embellecedores externos en las barras esta vez, monta botellas en negro mate. El piloto posterior es nuevo. La ergonomía ha sido igualmente mejorada.

El manillar tipo «drag-bar», casi recto y muy plano, pero igualmente muy a mano, se combina con un asiento «gunfighter» igualmente rebajado a 690 mm, y los estribos de conductor y pasajero, y caballete lateral, igualmente recolocados. Para 2011 llega en los colores «Phantom Black» y «Crandberry Red», a 9.595 € (9.795 € versión bitono).

Triumph Thunderbird Storm
La «Triunfo Tormenta Pájaro del Trueno» (o combínalo como quieras, pero… vaya nombrecito, ¿verdad?), a la que a partir de ahora llamaremos simplemente Storm, es la gran novedad de la gama cruiser. Derivada del modelo de 1.600 cc, es una cruiser de alta cilindrada dirigida a quienes buscan un motor de altas prestaciones con una imagen más allá de la puramente custom. De hecho, ya habíamos probado «esta moto» en la presentación mundial de su anterior Storm 1.600 cc, puesto que la propia Triumph ofrecía para ella un «kit oficial» de incremento de cubicaje con pistones gordos (de 107,1 mm en lugar de 103,8 mm), distintos árboles de levas y nuevos resortes para robustecer el embrague en vistas a soportar su mayor potencia.

Es el mismo kit que ahora le da a la 1700 nuevos bríos y nada menos que 95 CV (añadiendo una docena) a su poderoso bicilindrico paralelo refrigerado por agua. El resultado es que esta Storm tiene bajos de camión. Su palpitar empuja desde muy abajo –te parecerá que da caballos… ¡hasta en parado!– de modo que sube todo tipo de cuestas suavemente al ralentí gracias a sus nada menos que 15,9 kgm a sólo 2.950 vueltas. Me apuesto mi sueldo a que cuando la pasemos por el banco no dará una curva de par, sino una «recta» casi completamente plana…

Es verdad que la moto pesa nada menos que 339 kg con todos los llenos, y también que no es «para andarse con chiquitas» (¡por mucho que lleve asiento trasero!). Esta es una moto que una vez le retuerces la oreja no acelera como lo hace una deportiva. En lugar de ello, parece elevarse un palmo del suelo para avanzar de modo imparable, como si fuera un «hovercraft», sea cuál sea la marcha engranada. Su parte ciclo es tradicional, pero lo suficientemente sólida para aguantar tanto palmito: bastidor de tubo talla industrial, horquillla delantera de 47 mm –ahora con barras negras–, dos amortiguadores con muelle, doble disco delantero de 310 mm con pinzas de 4 pistones y ABS opcional (800 € de suplemento) y llantas de 19” y 17” con unos respetables 120/70 y 200/50. Por suerte para su doma, el asiento está a sólo 690 mm del suelo, la moto se maneja bien, y bastan unos silbidos para que «Storm» obedezca a su vaquero…

Como decíamos, con esta Thunder lo verás todo negro: se vende en dos versiones, la «Matt Black», satinada, y la más brillante «Jet Black», y tanto los cárteres como multitud de detalles pasan a ser de este color. El nuevo manillar «drag-bar», y sus tijas, le dan una posición de conducción parecida a la que ya tenía esta custom de referencia. Sin embargo, la gran novedad estética, como ya habrás advertido puesto que eres un entendido en la marca de la Operación Triunfo, es el «dramatic» (permíteme que use aquí la traducción inglesa de «espectacular») doble faro delantero tipo Speed Triple, seña de identidad de las Triumph y que realza su fi gura hasta hacer que a su paso haya muchas cervicales desmochadas. Conseguir esto te costará 15.195 €…