¿Has notado cuando viajas que las carreteras están señalizadas con letras y números? La numeración de las carreteras de España tiene un origen que muchos desconocen. Lo cierto es que se realizó con la finalidad de identificar las vías principales y dar sentido a la creciente actividad vehicular a mediados del siglo pasado.
A continuación, te contaremos todo acerca del origen de esta numeración y su significado, con la intención de ayudarte a comprender e interpretar de manera adecuada los mapas viales.
El Plan Peña y la clasificación de carreteras
A través de la «Instrucción del Plan Peña», comenzaron los cambios que llevarían a la nueva nomenclatura de las carreteras españolas, gracias a este plan se clasificaron las carreteras en nacionales, comarcales y locales. En el mismo plan se introdujo la reconstrucción de la vialidad que estaba destruida a causa de la Guerra Civil.
La clasificación de carreteras
El "Plan Peña" estableció la siguiente clasificación de carreteras:
Carreteras nacionales
Las carreteras nacionales conectan el centro de Madrid con las principales capitales de provincia, así como con las fronteras con Portugal y Francia, y las costas españolas.
Carreteras comarcales
Red de segundo orden que servía a comarcas importantes debido a su agricultura, industria o comercio.
Carreteras locales
Todas las demás carreteras y caminos colindantes.
Esta clasificación permitió una organización lógica de la red de carreteras y facilitó la identificación de su importancia y función.
La numeración de las carreteras españolas
Esta nomenclatura se fundamenta en la división del territorio en sectores, asignándoles una combinación de dígitos para identificar la ubicación y la función de cada vía.
El primer dígito está relacionado con el sector al cual pertenece la carretera, de los seis sectores geográficos en que fue dividido el territorio español, enmarcados por las seis carreteras nacionales radiales que se originan en Madrid.
N-I: Carretera Madrid a Irún.
N-II: Carretera Madrid a Francia por Barcelona.
N-III: Carretera Madrid a Valencia.
N-IV: Carretera Madrid a Cádiz.
N-V: Carretera Madrid a Portugal por Badajoz.
N-VI: Carretera Madrid a La Coruña y Ferrol.
Cada número del primer dígito corresponde a uno de estos sectores geográficos, lo que ayuda a ubicar la carretera en relación con Madrid.
El segundo número expresa la distancia aproximada desde la carretera hasta Madrid, se divide en coronas concéntricas de 100 kilómetros de radio, teniendo a Madrid como centro. Si el segundo dígito de la nomenclatura de una carretera "0" significa que la carretera comienza a menos de 100 km de Madrid, otra que tenga como segundo dígito el "1" expresa que la carretera comienza entre 100 y 200 km de Madrid.
El tercer dígito indica que la carretera es de tipo radial si este es impar o de circunvalación si posee un dígito par.
Ejemplos de numeración
Para comprender mejor este sistema, vamos a ver dos ejemplos:
- N-340: Su numeración indica que pertenece al sector 4, comienza entre 400 y 500 km de Madrid y es una carretera de circunvalación (par). La N-340, conocida como la Carretera del Mediterráneo, conecta Puerto Real (Cádiz) con Barcelona.
- N-121: Su numeración muestra que está en el sector 1, comienza entre 300 y 400 km de Madrid y es una carretera radial (impar). La N-121, llamada la Carretera de Tarazona conecta Tarazona (Zaragoza) con Pamplona (Navarra).
Persistencia y evolución
Este sistema de numeración de carreteras, establecido en el "Plan Peña", ha persistido en España a lo largo de los años. Aunque las comunidades autónomas ahora tienen competencias sobre la red secundaria, siguen utilizando una variante de este sistema para la numeración de sus carreteras.
La numeración de las carreteras tiene un origen histórico y la ubicación geográfica facilita la identificación y ubicación de cada vía. Aunque el crecimiento de la red vial es innegable y ha experimentado cambios en su infraestructura, el sistema de numeración ha sido duradero y efectivo.