Triumph nos citó hace unos días en Londres para presentarnos una nueva saga Bonneville. En un acto con ambiente clásico y adornado con versiones de los años 60 y 70, la firma de Hinckley dio a conocer de manera estática hasta cinco motos totalmente nuevas. Bueno, si es cierto que pudimos arrancar sus bicilíndricos para escuchar su ronco sonido y sentir su suave palpitar, pero la cita fue en un recinto cerrado y no se contempló la posibilidad de poder probarlas.
Las nuevas Bonneville son motos realmente bonitas que destacan por unos acabados exquisitos y por lo bien que combinan ideas clásicas con soluciones de vanguardia, anunciando comportamientos de motos modernas. La nueva generación de Bonneville está compuesta por tres modelos y dos de ellos se han preparado en dos versiones que se diferencian por componentes y/o decoraciones. Por ahora Triumph ha declarado pocos datos. Ha informado de las cifras de par máximo y del desfase que poseen las muñequillas de su cigüeñal, pero aún no sabemos nada respecto a potencia, pesos y el resto de medidas.
Todos giran en torno al mismo chasis de doble cuna de acero, parecido al de sus antecesoras, pero más robusto y con unas geometrías de dirección y repartos de pesos más actuales. Las diferencias existentes en cuanto a lanzamientos y avances se deben a los distintos recorridos de las suspensiones y a las discrepancias en las medidas de las ruedas. Los comportamientos también van a estar marcados por las diferencias que hay en manillares, asientos y ubicación de los estribos. Triumph ha comentado que ha desarrollado tres depósitos de gasolina para cada uno de los tres modelos, así como cinco asientos, todos diseñados con el objetivo de permitir una gran libertad al maniobrar a baja velocidad.
El bicilíndrico en paralelo que las empuja es totalmente nuevo. Aunque su estructura y aspecto exterior sigue recordando al de las «Bonnie» de toda la vida, uno de sus aspectos más destacables es que está dotado de una bien camuflada refrigeración líquida. Del mismo modo, es importante señalar que se ha preparado en dos cilindradas, logradas a base de modificar el diámetro de los cilindros. Por tanto, exteriormente son exactamente iguales al coincidir en la carrera de los pistones. El más pequeño anuncia una cilindrada de 900 cc, ascendiendo la del mayor hasta cerca de los 1.200 cc. En el caso del grande también hay distinciones en el cigüeñal, la gestión y la compresión dependiendo del modelo al que propulsa, con las consiguientes diferencias en las cifras de par y de potencia. Por ahora, Triumph solo ha querido informar de las que hacen referencia al par máximo. Para saber las de potencia habrá que esperar un poco más. Otro detalle importante de estas nuevas motorizaciones es que están comandadas por acelerador electrónico, lo que ha permitido incorporar un sistema de control de tracción y, en el caso de las «1200», incluir distintos modos de motor que modifican la entrega. Por otro lado, todas montan un embrague con sistema antibloqueo y cuentan con llave de contacto con «chip» para dificultar las tareas a los amigos de lo ajeno.
Las tres nuevas Boneville han sido bautizados como Street Twin, T120 (en versiones normal y Black) y Thruxton (en variantes normal y «R«). La primera se puede considerar como la moto de acceso a la gama al ser la única en utilizar el motor de 900 cc, y las otras cuatro, empujadas por la mecánica de 1.200 cc, ya van a ser sucesivamente más caras y exclusivas, aunque la marca inglesa ha preferido no declarar precios todavía.
Acompañando al lanzamiento de su nueva saga de «clásicas», Triumph ha aprovechado para anunciar la disponibilidad de más de 470 accesorios opcionales desarrollados para personalizarlas. Estos se podrán adquirir, tanto por separado, como en unos paquetes denominados «kit de inspiración» compuestos por varias referencias y que, una vez instalados, consiguen un importante cambio del aspecto de cada modelo.
Las nuevas Bonneville sustituyen a la mayoría de los modelos de la saga anterior propulsados por el bicilíndrico de 860 cc. En un principio, solo la America y la Speedmaster van a seguir en los catálogos de la firma, aunque tampoco se ha anunciado cuánto tiempo se van a mantener.
