El Gran Premio de Austria, la undécima prueba del Mundial de MotoGP 2019, ya ha terminado. Esto es lo sucedido en el Red Bull Ring:
MotoE: Victoria de Mike Di Meglio frente a Xavier Simeon y Bradley Smith.
Moto3: Romano Fenati gana delante de Tony Arbolino y John McPhee.
Moto2: Triunfo de Brad Binder ante Álex Márquez y Jorge Navarro.
MotoGP: Andrea Dovizioso bate a Marc Márquez con Fabio Quartararo tercero.
En el enlace de cada categoría podrás encontrar la crónica de la carrera, con los resultados y la clasificación general. Pasamos ahora a un punto de vista más analítico, con diez píldoras de asimilación rápida para repasar rápidamente lo vivido en las cuatro categorías:
PÍLDORAS MOTO3
- Punto de reinicio
Nos equivocamos con Romano Fenati. No sobre su conducta y reinserción, eso es un debate subjetivo y habrá quien crea que debería estar en su casa, una opinión tan lícita como la de defender la segunda, tercera o cuarta oportunidad que disfruta. Lo que sí está claro es que nos equivocamos sobre el punto de reinicio en su vuelta a Moto3: pensamos que volvería a ese 2017 donde solo Joan Mir pudo con él, pero lo cierto es que ha vuelto a su comienzo: aprovechando un asfalto complicado para brillar y vencer en solitario. Toca construir desde ahí.
- En 23 milésimas
Después de que Jaume Masiá pagase con una caída la precipitación por culminar cuanto antes su remontada, quedaban dos posiciones de podio para tres pilotos. Entre el segundo y el cuarto pasó un suspiro: 23 milésimas en las que caben muchas cosas. Allí, Tony Arbolino demostró saber adaptarse a la situación, renunciar a la victoria cuando se tornó imposible y, por primera vez en su vida, encadenar dos podios. Con él, John McPhee supo tirar de veteranía y contener a Celestino Vietti que, pese a que venía con mucho más ritmo desde atrás, se quedó cuarto.
- Coser un título
Lorenzo Dalla Porta ha recuperado el liderato que perdió hace una semana, y lo ha hecho por un solo punto ante Arón Canet. Sexto el italiano, décimo el español, ambos encararon la carrera con igual filosofía: cada punto cuenta. Como si se tratara de una bufanda hecha a punto de cruz, el proceso puede resultar arduo y el resultado final se ve tan lejano que dan ganas de saltarse fases del proceso, pero eso desbarataría todo el trabajo. No hay que saltarse un solo punto, porque solamente así se puede coser un título en una temporada tan igualada.
PÍLDORAS MOTO2
- La victoria más difícil
Ganar una carrera en el Mundial es algo, de por sí, realmente difícil. Pero la victoria más difícil de todas es la que se consigue cuando no eres el piloto más rápido en pista. Y eso es exactamente lo que hizo Brad Binder. No era el que mejor ritmo tenía, pero sacó petróleo en la Q2 y, cuando se apagó el semáforo, salió catapultado por la tribuna de su marca en la carrera de casa. Después, cuando algún piloto osó intentar pasarle, replicó de inmediato y, poco a poco, se fueron eliminando a su espalda.
- Otro Márquez
El año pasado, Austria enterraba toda opción de título para Álex Márquez. Había empezado el año con cinco podios y siete top 5 en ocho carreras, pero en Alemania fue 13º y en Brno no acabó. Llegó a Austria encendido y en la última vuelta se jugaba el podio con Luca Marini y Mattia Pasini, pero rebasó el límite y cayó. En tres carreras todo se fue al traste. Un año después supo resistir sobre la moto, ganar posiciones, pensar y dar por bueno el segundo puesto. Es otro Márquez y tiene medio título en el bolsillo.
- Los de siempre
La ausencia de un piloto con un ritmo superior propició una nube de motos en las primeras posiciones, donde más de una decena de pilotos soñaban con el podio. La carrera se fue tornando en un ejercicio de eliminación, y cuando la nube de pilotos se fue disipando, quedaron allí los de siempre. Los que gobiernan la clasificación: Jorge Navarro alcanzó el podio que se le resistió en Brno, y tras él entraron Lorenzo Baldassarri, Augusto Fernández y Thomas Luthi. Es decir, tras Márquez, acabaron los cuatro pilotos que le siguen en la general.
PÍLDORAS MOTOGP
- El último block
La carrera de MotoGP comenzó con un block pass de Marc Márquez sobre Andrea Dovizioso. Un adelantamiento de última vuelta en la primera, que denotaba que ninguno de los dos iba a ceder un solo milímetro al otro, y por el que Marc pidió perdón a Dovi sacando la pierna, sabiendo que había apurado demasiado la frenada. 39 eternos minutos después, la carrera terminó con un block pass de Andrea Dovizioso a Marc Márquez. Muchísimo mejor ejecutado: un adelantamiento de primera vuelta en la última. Tan bien ejecutado que fue el último.
- La calle del medio
Había optado por mantener la prudencia, pese a que los cronos del fin de semana le situaban como favorito indiscutible. Marc Márquez sabía que si todavía no ha ganado en Austria es por algo, y cuando llegó la carrera tiró por la calle del medio. La del neumático medio. Salió mal. Cuando llegó el momento de dar el tirón que había preparado durante todos los libres, se dio cuenta de que no era la goma adecuada. En ese instante supo que había perdido, por más que pospusiese la derrota. Había tirado por la calle equivocada.
- En el río más revuelto
Con Ducati manteniendo su inmaculada racha en Austria gracias a Dovizioso, y Honda encomendándose por enésima vez a la inspiración de Márquez, Yamaha libraba su propia batalla interna. La buena noticia es que están más cerca que hace un año, y que hasta tres pilotos acabaron en el top 5. Pero solo uno cabía en el podio, y fue Fabio Quartararo, que aprovechó lo revuelto que bajaba el río entre Marc y Dovi para ponerse delante de ellos y coger una renta sobre Valentino Rossi y Maverick Viñales que a la postre sería decisiva.
- Destellos y sombras
Fuera de los focos de las primeras posiciones se libran infinitas batallas en cada carrera. Cada piloto consigo mismo, con su moto y con los que le rodean. En Austria hubo dos que mostraron interesantes destellos: los rookies Pecco Bagnaia y Miguel Oliveira, que acabaron como los primeros de la clase media. Todo lo contrario que Danilo Petrucci y Johann Zarco, cuyo rendimiento en el Red Bull Ring estuvo muy por debajo de lo deseable y que vieron como las sombras de sus compañeros de marca oscurecían todavía más sus respectivas actuaciones.
PÍLDORA E-XTRA
- Viejos rockeros
Niki Tuuli, Héctor Garzó o Eric Granado, todos ellos actuales pilotos de Moto2, brillaron en pretemporada en MotoE. Pero cuando las condiciones se complicaron en Austria, aparecieron veteranos pilotos que, aunque ya no son pilotos titulares del Campeonato del Mundo, cuentan con experiencia en categoría reina: Mike Di Meglio ya ha ganado en velocidad, resistencia y eléctricas; y Xavier Simeon y Bradley Smith corrieron en MotoGP 2018. Algo más atrás, Sete Gibernau dio una lección de pundonor y, con 46 años, se quedó a dos segundos y medio del podio. Los viejos rockeros se crecen cuando suben al escenario.
