BMW K 1600 B, prueba, ficha técnica y primeras impresiones

La nueva BMW K 1600 B llega aprovechado la excelente base de las K 1600 para entrar en el segmento bagger y dar un soplo de aire fresco a la parte más exclusiva de la gama.

Sergio Romero.

BMW K 1600 B, prueba, ficha técnica y primeras impresiones
BMW K 1600 B, prueba, ficha técnica y primeras impresiones

BMW ha aprovechado sus Motorrad Days para presentar la primera moto de la próxima temporada, que no es otra que la K 1600 B. Los alemanes nos tienen acostumbrados a sorprendernos con alguna novedad durante el verano y esta vez lo ha hecho con una moto muy impactante. El crecimiento del segmento “cruiser” y dentro de éste el de las bagger en nuestro país, y especialmente en USA, ha hecho que BMW decida entrar en él. Antes de nada hay que puntualizar que las bagger, un estilo aparecido en los años 60,  son las cruiser o custom como se les ha llamado históricamente, que tienen las maletas integradas en su diseño, escapes paralelos al suelo y la parte trasera muy baja, dando como resultado una silueta con una forma de lágrima. Es Aprovechando el encuentro que BMW hace todos los años en Formigal la marca invitó a Edgar Heinrich, el Director de Diseño de BMW Motorrad a nivel internacional, y fue el encargado de contarnos cómo había nacido este nuevo modelo. Edgar explicaba que están en busca de motos que rompan de alguna manera con la línea tradicional y esta Bagger es una de ellas. Según él si llegabas a una concentración en Estados Unidos la K 1600 GT sobresalía en la fila de motos aparcadas y se podía ver a millas de distancia. Ahora la silueta de la nueva “K” la hará encajar en las carreteras Europa o aparcada en Daytona Bike Week. La llegada de la K 1600 B completa la gama por la parte de arriba de la misma, ya que con la G 310 en sus diferentes versiones se ha ampliado por abajo.

La K 1600 B en directo


Vista en vivo y en directo es más impactante que hacerlo en foto, primero por su decoración en negro, parece la moto de un superhéroe. Si el último Batman de DC cómics la viese le pediría una a BMW, aunque con algunos accesorios más de los muchos que ya tiene… Bromas aparte, la inspiración en el protipo Concept 101 que vio la luz en 2015 de la mano de Roland Sands ha sido todo un acierto. Toma la base de las demás K 1600 pero con los cambios en la parte trasera y en el frontal toma un carácter único. La postura es bastante natural y el nuevo manillar está en una posición cómoda y en cuanto a los pies hay dos opciones, lo estribos ubicados en la mismo posición que en la GT y la plataformas adelantadas para tener una posición más custom. En cualquiera de los dos casos vas cómodo y tienes debajo de ti un asiento muy agradable al tacto. Mientras que la protección es un poco menor, por la pantalla más corta, pero sigue siendo buena y se regula eléctricamente.  El cuadro y las piñas son iguales a los que ya conocíamos en la saga K 1600, y se pueden ajustar el Dynamic ESA, las múltiples opciones de sonido, radio y teléfono, las temperaturas de puños y asiento, la configuración básica y la información que aparece en el display. Esto último es lo menos práctico, ya que hay navegar con el mando multifunción de la piña izquierda (eso sí que es cómodo) para moverte entre los consumos, la temperatura, la autonomía y las medias. En la “Bagger” hay un nuevo botón, el de la marcha atrás, que se encuentra en la piña izquierda y que utiliza la fuerza del motor de arranque para mover la moto hacia atrás. Otra de las novedades que BMW ha desvelado aprovechando esta presentación es el BMW Connected Ride, que llegará a finales de año. Mediante el nuevo sistema, se estrenará en la GS, se conecta el móvil a la moto y se controla en una nueva pantalla TFT que sustituye a la instrumentación y a través del mando multi-controller. Permite acceder a más información y nuevas funcionalidades multimedia, como el navegador, la música y el teléfono. Para sacarle el máximo partido hay que conectarlo con el casco System 7.

 

BMW consigue el reto con la K 1600 B


Visualmente parece más ligera que las demás K 1600 y lo es, pero sigue siendo una moto voluminosa. Por lo que también sorprende cuando alcanzas un mínimo de velocidad y descubres el excelente comportamiento de su chasis, de cotas acertadas y correcto reparto de pesos. Una ligera presión al manillar y la moto se mueve con una rapidez inesperada. En tramos de montaña te deja perplejo y sólo tienes que tener cuidado para no llegar demasiado rápido a una curva, porque es muy ágil. El roce te limita antes que en la GT pero te puedes divertir mucho en un tramo de curvas. En esta versión el ajuste electrónico de las suspensiones, Dynamic ESA, es de serie y su efecto te ayuda a cambiar en gran medida el comportamiento de la moto. Cuando cambias de modo entre Rain, Cruise y Road, además de la acción del ABS, DTC y la potencia del motor se modifica el ajuste de las suspensiones. De modo que si pasas a utilizarla en Road te encuentras con unos tarados muy firmes que te permiten aplicarte en conducción alegre y sacarle el máximo partido al potente equipo de frenos. Este año el sistema, con pinzas de cuatro pistones y anclaje convencional, puede mejorarse con el ABS Pro que dispone de función de inclinación. Las suspensiones tienen un Duolever delante como protagonista, que te permite ejercer mucha presión sobre los frenos sin sufrir el más mínimo estrés, dando una gran sensación de seguridad. Detrás está el conocido Paralever, que cumple con su cometido sin que sepas que hay un sistema diferente al convencional.

Seis cilindros en línea


El motor de seis cilindros en línea y 1.649 cc es ya un viejo conocido pero no por eso te deja de impresionar cada vez que lo pruebas. Tiene un sonido profundo y sube muy rápido de vueltas, como si estuviese muy cabreado. Gracias a su gran par puedes cambiar por debajo de 2.000 rpm y funciona a la perfección. La conexión entre el acelerador y la rueda es muy buena, debido al buen trabajo que BMW hizo en su día con este acelerador electrónico. En medio régimen es explosivo y subir hasta 5.000 vueltas ya te hace sentir que "estás corriendo" mucho. El último tramo, hasta el corte a 8.500 rpm es todavía más contundente, con 160 CV empujándote como en un deportivo de cuatro ruedas. Los mencionados modos Rain, Cruise y Road ofrecen menos potencia en el primero y más control de tracción, mientras que entre los otros dos sólo cambia la respuesta más directa y el menor DTC del modo Road. El control de tracción, por cierto, es una maravilla y te permite abrir gas con mucha confianza a pesar de ser una moto grande. Hay una completa de accesorios, con 20 opciones diferentes, y también se pueden adquirir en tres paquetes: seguridad, confort y touring. Por si esto fuera poco también se ha estrenado la gama de accesorios Spezial, para los segmentos tourer y heritage de BMW, que consta de piezas de gran calidad personalizadas directamente en fábrica para conseguir una moto única.

Lo mejor:
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    Componentes y diseño

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    Motor potente y único

Mejorable:
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    Precio

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    Peso