BMW F 850 GS: prueba, ficha técnica y primeras impresiones

Tras una década del estreno del modelo trail alemán, ahora se presenta con una profunda renovación técnica, lo que ha motivado hasta un cambio en su denominación.

Fotos: Daniel Kraus, Markus Jahn & Jörg Kunstle

BMW F 850 GS: prueba, ficha técnica y primeras impresiones
BMW F 850 GS: prueba, ficha técnica y primeras impresiones

Como se suele decir, la nueva BMW F 850 GS no comparte ni un tornillo con la generación anterior -BMW F 800 GS- y su renovación mecánica, además de la estética, ha sido absolutamente radical. Acudiendo a soluciones mecánicas más convencionales y comunes en el resto de su competencia.

La nueva F 850 GS estrena un inédito bastidor de doble viga –monocasco según la marca– de acero y en el que se han incrementado las geometrías de dirección para lograr una mayor estabilidad, fruto del aumento de la distancia entre ejes en 20 mm (ahora con 1.593 mm). El subchasis pasa a ser ahora una estructura tubular de sección redonda y que va atornillada al bastidor, así como los soportes de los estribos para el pasajero. Todo ello con el objetivo de resultar más sencilla su reparación en caso necesario. Algo nada descabellado dadas sus aptitudes off road, asumiendo el mayor riesgo que implica transitar por este medio.

la BMW F 850 GS estrena motor y bastidor, con soluciones técnicas más convencionales

El nuevo motor bicilíndrico de la BMW F 850 GS sólo coincide con el anterior de F 800 GS en la disposición de sus cilindros, en línea y transversal al sentido de la marcha. La cilindrada se ha incrementado en 55 cc para alcanzar una capacidad de 853 cc, así como el lógico aumento del diámetro de las válvulas. Pero, sobre todo, ha variado el tiempo de encendido entre cilindros al modificar la arquitectura del cigüeñal, ahora con sus muñequillas desplazadas a 90º y con un desfase del encendido de 270º; y que abandona el anterior sistema de equilibrado de biela ciega (muñequilla sin biela) por un par de ejes de balance. La intención ha sido la de imitar las sensaciones de los propulsores V2 a 90º. Además, la lubricación pasa a ser por cárter seco. Su rendimiento ha aumentado un 10% con respecto al anterior y existe la posibilidad de limitación a 35 kW (48 CV) para el carné A2, ya que su rendimiento máximo se sitúa en 95 CV a 8.250 rpm y con un par motor de 92 Nm (9,4 kgm) a 6.250 rpm

También, el depósito de combustible pasa ahora a ocupar una posición más convencional por delante del asiento. Justificado para reducir la diferencia entre el reparto de pesos al encontrarse lleno o vacío, así como contribuir a reducir la anchura de la BMW F 850 GS en su parte trasera a diferencia del modelo previo.

Además se beneficia, aunque de manera opcional, de la posibilidad de disponer de conectividad fruto de la nueva pantalla TFT de 6,5 pulgadas (ya disponible en la R 1200 GS), y con las funciones de gestión de archivos de música de nuestro smatrphone y sencillo navegador, que refuerzan la comodidad y eficacia en ruta gracias dicho infoentretenimiento, así como completar toda la información referida a la BMW F 850 GS, ahora de manera muy gráfica. 

BMW F 850 GS: MÁS ASFÁTICA…

Empezamos esta primera toma de contacto con un día poco apetecible para montar en moto por la presencia de lluvia. No te digo más que se había tirado toda la noche lloviendo en Mijas (Málaga) -prácticamente al igual que en el resto del país- y que obligaron a retrasar la salida de la prueba dinámica una hora y media, atendiendo a la previsión meteorológica. Una vez acomodados en la BMW F 850 GS parece que nos hubieran personalizado su ergonomía y nada desentona al contacto con nuestras extremidades. También el pasajero disfruta de una excelente posición, con las piernas formando un cómodo ángulo a 90º. 

Le damos vida al renovado bicilíndrico de la BMW F 850 GS, y en el que se aprecia el cambio de sonido, ahora más apagado y diferente al del anterior modelo.

Iniciamos la marcha todavía con la presencia del agua de manera tímida pero con el asfalto completamente empapado. Situación idónea para empezar a poner a prueba los sistemas de seguridad de la BMW F 850 GS. No dudamos ni un instante y vamos a por la primera tapa de alcantarilla que encontramos en la calzada que comunica la urbanización donde iniciamos la jornada. El modo Rain de conducción, en el que se encontraba la alemana, es el más sensible a las pérdidas de motricidad, y enseguida lo hacemos funcionar con el resultado de que el motor deja de empujar hasta que el sistema detecta que la tracción ya resulta eficaz. Prácticamente lo que hace es avisarnos de la falta de adherencia pero sin interrumpir de manera escandalosa nuestro avance como se aprecia en otros modelos.

El sonido del renovado motor de la F 850 GS resulta más contenido

Nada más coger la primera vía rápida ponemos a prueba el renovado propulsor de la BMW F 850 GS. Hasta que no alcanzamos las 3.500 revoluciones no empieza a girar el bicilíndrico con alegría. Momento en el que el gráfico indicador de marchas en el panel TFT que disponía nuestra unidad de prueba invita a subir de marcha para optimizar el consumo de combustible. Como buen obstinado alemán, cumple y alcanza ese régimen con no pocas quejas en forma de traqueteos, para entrar en una zona media del régimen de manera muy vigorosa y con el estallido final con el mayor empuje apreciado, a modo de recompensa, en la zona más alta del tacómetro. Aportando una clara diferencia con respecto al anterior twin 800. Eso sí, el nivel de vibraciones en ese momento es notable aunque tampoco llega a ser nada grave. Lo que si resulta es muy adictivo buscar la zona roja y donde, además, nos obsequia con un llamativo juego luminoso de la pantalla.

Estrena un embrague antibloqueo en el que se declara haber prestado una especial atención en lograr una mayor suavidad en el recorrido de la maneta con unos muelles más blandos. Lo cierto es que ésta ofrece un tacto correcto, un tanto duro en el inicio pero sin llegar a destacar por blanda especialmente su funcionamiento. En las inserciones del cambio también apreciamos un punto de dureza, y que nos obliga a prestar algo más de atención en este aspecto al ir entregados al disfrutar de su mayor deportividad, sobre todo al no emplear el embrague. La unidad montaba el asistente al cambio Pro y que, como sabes, permite engranar marchas sin necesidad de emplear el embrague ni cortar con el gas, también al reducir. Su funcionamiento resulta más placentero y eficaz en la zona alta del régimen, por debajo se muestra brusco con unos saltos de marcha que empañan el buen hacer del resto del conjunto. El escalonado de las relaciones resulta acertado, y poniendo a prueba el conjunto de cambio y motor, sorprende lo voluntarioso que se muestra en los repechos al afrontarlos en la última relación desde el mínimo régimen con la reacción del propulsor anteriormente descrita.

Todo esto con un asfalto que iba empeorando sus condiciones según íbamos ganando altura, y donde los Bridgestone Battlax Adventure 41 que montaba la BMW F 850 GS han sido el aliado perfecto atendiendo a la seguridad.

La suspensiones de la BMW F 850 GS trasmiten firmeza pero sin renunciar a la necesaria comodidad, como buen modelo de viaje que también se le supone. Entre las opciones, se sigue encontrando la de equiparla con el sistema Dynamic ESA que posibilita la regulación del tren trasero, y que permite elegir su funcionamiento entre los modos Road, Dynamic y Enduro. El modo Road resulta el más cómodo pero la dejan un tanto suelta de atrás cuando avivamos el ritmo de marcha. El tren delantero cede en las frenadas más potentes pero sin que suponga un especial incordio como ocurría antes. Su horquilla invertida no dispone de regulación alguna; y el tren trasero de la versión estándar permite modificar la precarga del muelle y el hidráulico en extensión.

El sistema de frenado de la BMW F 850 GS aúna potencia con la necesaria modulación tanto en la maneta como en la palanca. Nuestra unidad montaba el extra ABS Pro, y el sistema no entraba en funcionamiento salvo al provocarlo intencionadamente.

En su vertiente más turística, la pantalla frontal que monta la BMW F 850 GS no es muy amplia pero cumple bien su cometido, por lo menos a las velocidades legales a las que invitaban a ir dado el día húmedo que hacía, y eso que usamos un casco de trail, provisto de visera, siempre más crítico con el influjo del viento. El mullido del asiento cede bajo nuestro peso y con el paso de los kilómetros no permite que transpire debidamente esa zona en contacto de nuestro cuerpo. Aunque no impide realizar movimientos sobre él al afrontar los diferentes virajes. 

BMW F 850 GS…Y MÁS CAMPERA!

A mitad de la jornada de pruebas estaba previsto el cambio de las BMW F 850 GS por unidades equipadas con los neumáticos Metzeler Karoo 3 para afrontar la segunda parte de la prueba ya fuera del asfalto. Salvo por encontrarnos con un terreno totalmente embarrado y muy delicado para los éstos neumáticos trail debido a que no disponen del necesario agarre lateral en tales circunstancias, la BMW F 850 GS se adapta y confirma sus excelentes aptitudes también en este ambiente alejado del asfalto. Sin que su peso suponga un especial inconveniente y con las suspensiones ofreciendo un tarado firme pero filtrando todas las imperfecciones que íbamos encontrando en el terreno.

En el modo Enduro Pro la rueda trasera se libera de la acción del ABS

Aquí, las BMW F 850 GS estaban equipadas con el modo Enduro Pro opcional, y que elimina la acción del ABS en la rueda trasera. En la delantera hay que proponérselo para hacerlo funcionar y salvo en las frenadas de emergencia no apreciaras su existencia. Además, el control de tracción es más permisivo y facilita poder cruzar el tren trasero a golpe de gas de la manera más controlada y placentera. Aunque se puede desconectar por completo. 

Al retornar al asfalto, los Metezeler Karoo 3 volvieron a demostrar su polivalencia y en este medio incluso permiten poder aplicar una conducción deportiva con la BMW F 850 GS. Que nos deja claro que ha ganado en eficacia y polivalencia de uso a costa de comulgar con soluciones tecnológicas más convencionales.

De momento BMW Motorrad no ha comunicado su precio para España. Comparando con los anunciados para Alemania, suponemos que tendrá un ligero aumento y que se podrá incrementar con el amplio catálogo de opciones disponibles, y con el que la F 850 GS se puede completar para disponer de novedades tan actuales como el estreno de la conectividad.