La actividad de los responsables de la marca de Noale es patente y es que los modelos de gran cilindrada han ido apareciendo en los últimos años con altas dosis de diseño y de tecnología. La Shiver se puso en escena en 2007 y desde el principio destacó por sus personales líneas. Tiene como argumentos que, además de ser una moto diferente, es válida para casi todo, y, por otro lado, utiliza ciertas soluciones, como el acelerador electrónico, que le dan su punto de exclusividad.
Ha sido a partir de la naked de donde ha nacido la GT, lo cierto es que no hay grandes diferencias entre ambas, tan sólo el semicarenado que flanquea el frontal y la quilla de esta nueva versión. Aunque esta técnica no sea creativa en exceso es muy utilizada por todo tipo de fabricantes y en especial en este segmento, como sucede con las Honda CBF, Kawasaki ER-6 y Yamaha FZ-6.
Chasis italiano
Uno de los puntos en los que esta Shiver marca la diferencia con su competencia es en el comportamiento de la parte ciclo. La mayoría de sus rivales se basan en conjuntos poco rígidos, en los que prima la comodidad sobre la eficacia, y aquí eso no es así. La Shiver GT, a pesar de ser una moto destinada a un posible uso turístico, tiene un chasis que aporta rigidez al conjunto y que transmite ese toque deportivo al que nos tienen acostumbrados las motos transalpinas. La horquilla invertida de 43 mm, aunque no ofrece posibilidad de regulación, es firme sin ser seca y aguanta bien el trabajo que le mandan los potentes frenos. Éstos están firmados por Brembo y se componen de pinzas radiales de cuatro pistones con discos de 320 mm en el tren delantero, así que no hace falta decir lo grande que es su potencial. Pero lo que llama la atención es el ABS de dos canales y última generación. Gracias a este sistema puedes apurar al máximo y obtener una frenada segura y contundente, algo que no ocurre en todos los casos. Además, cuando entra en acción no es nada intrusivo, de tal modo que su utilización sólo aporta ventajas.
La posición de conducción es muy natural, no ha cambiado con respecto a la Shiver a secas, pero la distancia entre manillar, estribos y asiento es acertada. Puedes recorrer largos trayectos sin que ninguna parte de tu cuerpo se resienta y ahora con el nuevo carenado la protección aerodinámica es muy buena, sobre todo en la zona del pecho. Las piernas quedan bastante bien acopladas en el depósito y aunque el carenado ahí no hace efecto tampoco se echa mucho de menos. Dispone de dos guanteras en los laterales del semicarenado, que permiten transportar pequeños objetos con comodidad. El cuadro de mandos ofrece toda la información a la que nos tiene acostumbrados Aprilia en sus últimos modelos y la lectura es muy buena.
En «V»
La elección para conseguir un buen compromiso fue un bicilíndrico en V a 90º de 750 cc, con el que se aseguran prestaciones (95 CV declarados) y un buen compromiso entre comportamiento y consumo. En nuestro banco, teniendo en cuenta que no ha cambiado, el propulsor debe rendir alrededor de 80 CV, una cifra interesante. Su acelerador electrónico da una respuesta un poco peculiar, que además depende del modo de gestión elegido del motor, pero lo cierto es que funciona. En esta moto encontramos tres posibles curvas, Sport (S), Touring (T) y Rain (R), que se cambian con el botón de arranque. En la posición más deportiva la respuesta es más directa y un poco más abrupta, mientras que en el modo T la valores máximos son casi iguales, pero el motor entrega su potencia con más suavidad. Finalmente se puede utilizar el modo de lluvia que reduce la potencia en un 25 por ciento y que te asegura que no vas a perder agarre repentinamente.
El tacto general es bueno y las vibraciones que emite son bajas, así que el bicilíndrico es un buen aliado para el día a día. Sus dosis de par a bajo régimen permiten circular por ciudad con total soltura y la potencia máxima hace que supere con facilidad los 200 km/h en autopista.
El toque que le ha dado el semicarenado es, sin duda, acertado y ahora su rango de acción y sus posibilidades aumentan claramente. Además, si inviertes en la versión con ABS, serás recompensado con un plus de seguridad.
TÉCNICA
La Shiver GT emplea en el mismo bicilíndrico en V a 90º de 749,9 cc que utiliza la versión naked. Cuenta con el ya conocido sistema de acelerador electrónico de la marca (ride by wire) en el que la centralita decide la apertura de las mariposas y ésta se realiza mediante un motor eléctrico. La distribución tiene un sistema mixto de cadena y engranajes, y el embargue mando hidráulico. El chasis combina una estructura multitubular con placas de aluminio, y a él se ancla un basculante del mismo material. La horquilla es invertida de 43 mm y el monoamortiguador lateral no tiene bieletas. En los frenos se utilizan pinzas radiales de cuatro pistones y discos de 320 mm delante, y uno de 240 detrás. El cuadro de mandos mezcla un panel digital, donde aparece la velocidad y mucha información adicional, con un reloj analógico para las revoluciones.