Kawasaki ZX-6R

Presentación de la nueva supersport "verde" de Kawasaki. La nueva ZX-6R no sólo se ha presentado en el país del Sol Naciente, sino que ha supuesto el amanecer de un nuevo día en la categoría de las supersport. Su diseño, pero sobretodo su inédita horquilla, son los motivos de esta revelación.

Sergio Romero / Fotos: Kawasaki

Kawasaki ZX-6R
Kawasaki ZX-6R

Todos los otoños, cuando lo nuevos modelos están a punto de llegar, parece que vamos a ver más de lo mismo y que lo que conocíamos hasta ahora no va cambiar. Pero hay motos que traen pequeños avances que son los que le dan vida a las categorías y a la vez muestran la tremenda guerra tecnológica de la que nos beneficiamos.

Todo esto parece ajeno a lo que nos ocupa, pero la categoría de las supersport es competida como pocas y en Kawasaki ha hecho uno de esos modelos que dan un pequeño paso adelante en cuanto a dicha tecnología se refiere. La ZX-6R ya es una veterana en este mundo y ha sufrido una larga evolución, pasando momentos en los que ha cambiado el rumbo de su desarrollo, cuando se desdobló en dos modelos con motores de 636 y 600 cc. El modelo anterior volvió a ser de 600 y mostró algunos puntos débiles.

Básicamente el trabajo realizado para superar la Euro3 tuvo como consecuencia un peso superior al de sus rivales, algo que con las cosas tan apretadas podía ser una desventaja. Y desde ese momento el trabajo del equipo de desarrollo ha sido constante hasta ahora. El resultado ha sido una moto totalmente nueva, así que como puedes imaginar no nos ha quedado otra opción que ir a probarla...

Japón, Autopolis y la BPF

Después de unas cuantas horas de vuelo llegamos al otro extremo del mundo para poner a prueba la nueva supersport de Kawasaki, pero antes de que empezase la acción tuvimos la ocasión de ver por dentro una parte de KHI (Kawasaki Heavy Industries). Una empresa de ingeniería que además de motos fabrica barcos, trenes, helicópteros, submarinos y muchas más cosas.

Una vez vista la enormidad y el potencial de las fábricas de la marca de Akashi pusimos rumbo a la Isla de Kumamoto, donde se encuentra el circuito de pruebas de Kawasaki, Autopolis. Allí nos esperaba un trazado muy técnico, por su longitud, sus curvas enlazadas de mil trazadas posibles y el gran desnivel de la pista.

La nueva ZX-6R , que se ha vuelto muy parecida estéticamente en su última versión a la ZX-10R, también aguardaba nuestra llegada. El frontal, el basculante, el colín, el depósito y el escape son muy similares. En cualquier caso ahora es más agresiva en sus líneas, algo que no le viene mal a una moto de sus características. Lo cierto es que no sólo ha cambiado por fuera, sino que ha recibido una renovación total, que se puede apreciar ya en la posición de conducción. La nueva moto tiene los semimanillares más cerca del cuerpo y más cerrados, y el asiento un poco más bajo y estrecho. Es un poco menos espaciosa, pero está más adaptada al uso en pista.

Si desde fuera y en parado parece más deportiva, una vez tomas la primera curva con ella esa sensación se acrecienta de manera considerable. Nada más enfilar el viraje de final de recta la moto parece girar sola, sin duda el menor ángulo de dirección y el reposicionamiento del motor han surtido el efecto deseado. También ayudan los Bridgestone 003 que calzaba en la presentación. Ahora es más ágil y eso se agradece en las secuencias de curvas enlazadas de segunda-tercera.

Pero lo que realmente supone un paso adelante y que la convierte en pionera de su categoría es la nueva horquilla Showa BPF (Big Piston Fork). Ésta dispone una nueva estructuración interna que permite utilizar un pistón de mayor diámetro, menos cantidad de aceite y los muelles ubicados en la parte inferior. Gracias a este nuevo sistema, que bombea un mayor volumen con menor presión de aceite en cada movimiento, se producen unas reacciones mucho más suaves del circuito hidráulico. De tal modo que cuando frenas fuerte se empieza a comprimir más despacio que una horquilla con cartucho normal y eso aumenta bastante la estabilidad en frenada. Lo mismo sucede al soltar los frenos, cuando la horquilla debería extenderse con cierta velocidad y en lugar de eso se mantiene comprimida. Con esto se consigue una geometría que facilita la entrada en curva y además todas esas reacciones suaves aumentan la confianza del piloto.

Después de dos días rodando en Autopolis se puede decir que la BPF mejora claramente la entrada en curva y por lo tanto es un avance para la conducción deportiva y la seguridad. Los reglajes con los que salimos a pista eran los que trae la moto de serie y eso hizo que en las primeras mangas el amortiguador trasero se comprimiera demasiado en aceleración, dejando el tren delantero un poco suelto.

De todas maneras el amortiguador de dirección Öhlins con apenas 5 clicks suaviza las reacciones de la dirección. Pero ahí estaba Pere Riba, piloto rápido y polifacético, además de probador de la marca, para darnos unas perfectas directrices y mucha información. Con sus reglajes, que básicamente endurecían el amortiguador trasero en precarga y compresión, la moto se volvió excelente. La frenada no ha cambiado, así que sigue siendo excelente. Ya sólo queda enfrentarla a sus rivales para ver dónde se encuentra, pero promete mucho.

Lineal

El trabajo en el motor ha supuesto según la marca un incremento de prestaciones en la gama media y también en la alta. Ése era el punto mejorable de la versión anterior y por lo que hemos visto en la pista japonesa el resultado es bastante bueno. Ahora la moto sale más limpia desde 8.000 rpm y cuando el motor gira por encima de 10.000 es muy lineal hasta el corte de encendido, alrededor de las 16.000. Una luz del nuevo cuadro te avisa que estás llegando a este momento sin que te des cuenta.

También te avisa de la marcha engranada. El cambio tiene un tacto magnífico, un buen escalonamiento y lo que es mejor, se combina con un embrague antibloqueo que se lo traga todo. Puedes bajar marchas tan rápido como quieras que la moto no se descoloca. Otro punto destacable es la nobleza con la transmite los 134 CV declarados cuando vas muy inclinado, así aunque desliza lo hace siempre avisando de sus reacciones. El motor también parece un poco más refinado gracias a la sustitución de algunos elementos internos en la distribución.

El paso que han dado en este nivel también es importante y ahora la ZX-6R tiene todo lo necesario para batir a sus rivales, tanto en su versión de calle como en la que competirá el año que viene con Joan Lascorz en el Mundial de Supersport. Habrá que estar muy atento porque la moto llega a un precio interesante en cuanto empiece el año. Ha salido un nuevo sol que da luz verde a la categoría de las supersport...