En comparación con las otras dos sport-turismo, la Trimph Sprint ST y la Honda VFR 800, la moto alemana destaca por el enorme poderío de su propulsor, capaz de catapultarla hacia delante cual cohete a reacción. Y todo ello aderezado con un sonido cautivador que estimula al rutero más comedido. En su contra, es la más pesada con los números en la mano y sobre todo la que más pesada se percibe en marcha, básicamente debido al mayor efecto giroscópico de su motor de más cilindrada y por la transmisión por cárdan, que aunque es de comportamiento intachable, siempre es más pesada que un sistema de transmisión convencional por cadena.
Al tomar los mandos aprecias la calidad de sus componentes y agradeces una excelente posición de conducción en la que te encuentras realmente integrado en el conjunto, más que en ninguna de las tres, llegando perfectamente con los dos pies al suelo. Esto está muy bien para luego favorecer las maniobras en parado, más dificultosas sobre la BMW que sobre las demás.
El motor de cuatro cilindros en línea transversal es muy potente y destaca por su capacidad de respuesta, elevada potencia a cualquier régimen de giro, y respuesta instantánea a las exigencias con el acelerador. Y con el cambio automático opcional como el de la unidad que probamos es una delicia. Sólo hay que acostumbrarse a que retiene bastante al cortar gas, por ejemplo, a la entrada de un viraje, cuando ruedas a ritmo rápido revolucionando el motor. En estos momentos también aprecias algunas vibraciones que llegan hasta el conductor. Sin embargo, en conducción más "rutera" son apenas apreciables, como en el resto de contendientes.
Como el motor, a nivel de parte ciclo la BMW K 1300 S es una moto tecnológicamente muy evolucionada, más que el resto de sport-turismo presentes aquí. Las particulares suspensiones Duolever y Paralever le confieren gran estabilidad en cualquier circunstancia, y con el ESA II -opcional-, puedes regularlas simplemente presionando un botón. Eso sí, siendo siempre consciente del tamaño y peso del conjunto. La frenada y sus sistema ABS son sensacionales, y por mordiente y potencia las mejores de las tres.
Las rivales de esta moto en la comparativa son:
- Honda VFR 800
- Triumph Sprint ST
Comparativa Sport-Turismo
PRIMERA CLASE
Si te gusta viajar cómodo, rápido y seguro, nada mejor que optar por una de las tres protagonistas de esta prueba. BMW K 1300 S, Honda VFR 800 FI y Triumph Sprint ST son además tres excelentes sport-turismo para disfrutar de la carretera en todas sus facetas.
Sigue leyendo la comparativa de la BMW K 1300 S, la Honda VFR 800 FI y la Triumph Sprint ST
Alta tecnología
BMW siempre sigue su propio camino y la K 1300 S no es una excepción. El chasis es de doble viga de aluminio, y las suspensiones Duolever delante y Paralever detrás. La precarga de muelle en el tren trasero es regulable por mando remoto. Con el ESA II opcional puedes regular el tarado de la suspensión con un solo botón desde la piña de mandos. El ABS es desconectable y el control de tracción ASC es opcional.
Categoría | Sport-Turismo |
Tipo de Carnet | A |
Precio de lanzamiento* | 16.279 - 17.545 con ABS € |
Puntuación | 8,3 |
*El precio de lanzamiento suele variar con el paso del tiempo, por lo que este dato es sólo orientativo. |