Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Si la acción de levantar las manos es señal de rendición, estas cuatro café racer te invitan a hacer todo lo contrario con sus bajos manillares, que te empujan a adoptar una posición deportiva y sacar todo el partido posible a unas motos que por otra parte son discretas y amigables.

Pepe Burgaleta. Fotos: Juan Sanz. Colaboran: Marcos Blanco, Óscar Pena y David Candeal.

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X
Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Las Café Racer nacieron en Inglaterra como motos modificadas para competir en medio de la carretera. Los jóvenes de los 50 no tenían dinero para comprarse grandes y potentes bicilíndricas, así que las ligeras monociIíndricas resultaron ideales para ver quien llegaba primero de bar a bar entre el tráfico y las curvas. Un poco más de velocidad, una posición más agresiva y, por supuesto, un aspecto más fiero eran complementos imprescindibles para una generación que encumbró a la BSA Gold Star, especialmente a su última versión la DBD34 como la reina entre todas ellas.

Luego llegaron motos mucho más potentes que aquella BSA de poco más de 40 CV, y en los 70 la invasión japonesa se adueñó del mundo, pero aquellas motos, conocidas como café racer, y algunos de los lugares de reunión más famosos de esos personajes como el Ace Cafe de las afueras de Londres, volvieron con el tiempo a la palestra, y hoy en día, en plena vorágine de la moda retro, una café racer inspirada en aquella época es tan actual como lo era hace más de medio siglo en la campiña inglesa.

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Adaptación al medio

Las motos que se han acercado a este estilo en la actualidad lo han hecho desde diversos puntos de origen, pero en todos los casos han evolucionado para adaptarse a las necesidades de los nuevos tiempos. Las motos ya no son las de antes, las carreteras tampoco, ni siquiera el público objetivo al que se dirigen. Los motores monocilíndricos han dejado paso a otros de dos pistones más potentes, pero sobre todo con menos vibraciones y mayores posibilidades de compatibilizar diversos tipos de uso. Si una moto de este tipo era un modelo empleado para hacer carreras, aunque fuesen ilegales y en medio del tráfico, a nadie hoy en día se le ocurriría hacerlo con sus descendientes. Lo que importa es el estilo y la individualidad.

De todos modos, no todo vale para crear hoy en día una café racer, porque una característica fundamental es que la moto tiene que tener un cierto pedigrí. No puedes convertir cualquier moto en una de ellas. Aun así, cada una de las cuatro motos que hemos reunido en esta ocasión, tiene orígenes diferentes. Es curioso que la que ha sido diseñada el último lugar, la más moderna de concepción, sea precisamente la que es más clásica conceptualmente. Hablamos de la Royal Enfield, por supuesto. La firma india ha creado esta bicilíndrica después de concentrar su producción en las Bullet monocilíndricas desde hace más de medio siglo, y cuando lo ha hecho, ha mantenido ese aire clásico que la distingue. La Continental GT podría pasar por una moto de los 60 sin problema, es un paso más allá de lo que Triumph hizo cuando resucitó las Bonneville. Algo parecido pasa con la Kawasaki W800, que nació como 650 imitando a la primera Kawasaki de cuatro tiempos, la W1, que a su vez estaba basada en la BSA A7. Lo curioso de la W650 es que su gran seña de distinción era el empleo de un eje rey con engranajes helicoidales en el sistema de distribución, cuando realmente sus antecesoras empleaban un sistema mucho menos elaborado de varillas y balancines. En cualquier caso, la W800 ahora puesta al día con un freno de disco trasero para poder incorporar ABS y pasar las homologaciones, se distingue por ese motor hoy en día único.

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Si seguimos avanzando en el tiempo, al menos en lo que se refiere a diseño, nos encontramos con la Scrambler, que también equipa un propulsor clásico donde los haya. El V2 italiano tiene su origen en el que el ingeniero Taglioni creo para sustituir precisamente sus primeros V2 de distribución accionada por ejes rey. En este caso se sustituyen por correas dentadas, un sistema que tampoco ha tenido mucho éxito, pero que los motores de Ducati todavía conservan. Con refrigeración por aire como los dos anteriores y en este caso dos válvulas por cilindro, puede considerarse también un clásico, aunque haya sido puesto al día de manera casi constante. El caso de la SV es diferente, porque, aunque la primera SV650 se lanzó al mercado hace dos décadas, su motor sigue teniendo una estructura general comparable a la de cualquiera diseñado en la actualidad. Su refrigeración líquida le separa del resto, pero también un rendimiento que con un 20% menos de cilindrada está igualado al de la Scrambler. En realidad, la versión X de la Suzuki SV650 no plantea prácticamente ninguna diferencia respecto a su hermana, que no deja de ser una naked de cilindrada media actual.

El arte del diseño

De todas las motos de esta prueba, no hay duda que la Scrambler es la moto con un diseño más cuidado. Pocos pueden dudar que Ducati es la reina de este apartado. Año tras año gana los concursos de belleza, y es difícil encontrar una de sus motos que te deje indiferente. La Café Racer no es precisamente una excepción a la regla. Y la verdad es que no necesita casi nada para conseguirlo. El depósito es el mismo de toda la serie y la mayoría de sus detalles diferenciadores los comparte con la Full Throttle, pero con unas pocas pinceladas, la óptica delantera, las llantas de radios, la tapa del colín, y una nueva decoración, se obra el milagro. Las cifras de esta moto muestran por si mismas que estamos ante una de las motos con un carácter más deportivo, tan sólo la Suzuki está a su nivel, pero en este caso, la italiana presenta un carácter más marcado.

Ducati gana año tras año los concursos de belleza, y la Café Racer no es una excepción a la regla

Tampoco hay que sorprenderse, se trata de la misma base del resto de las Scrambler con el motor de 803 cc, con las que comparte toda su estructura de chasis también. La posición de conducción es su gran diferencia, con las manos bajas, pero con el resto del cuerpo sin cambios. En nuestra prueba probamos a colocar los espejos retrovisores hacia abajo, pero aunque estéticamente puedan marcar diferencias, lo cierto es que se mal por ellos y además chocan primero con las rodillas y luego con el depósito al girar a tope el manillar. Los acabamos cambiando a su posición natural. Esta posición más deportiva no cambia el comportamiento de la Scrambler, pero te ayuda cuando estás entre curvas a mover la posición del cuerpo. En realidad todo te resulta conocido a poco que hayas tenido relación con el mundo Ducati. El motor responde bien en medios y tiene empuje, de hecho ha sido el que ha desarrollado más potencia en nuestro banco, y lo hace con el tacto y sonido que la marca italiana lleva regalándonos décadas. El cambio tiene un accionamiento corto pero seguro y el embrague ya funciona bien después de múltiples variaciones a lo largo de los años.

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Es una moto que como el resto no tiene mucha capacidad de regulación en las suspensiones, pero tienen un tarado más duro que las de las motos más turísticas de esta prueba, lo que la beneficia en el momento que quieres ir deprisa con ella. Las llantas de 17" también ofrecen la adecuada agilidad y es una moto estable y deportiva. Cuenta con un solo disco, aunque es muy grande y está mordido por una pinza de cuatro pistones y una bomba radial, lo que asemeja su potencia a los dos de la Suzuki. Es la más cara de las cuatro, pero hay que reconocer que también es la más pintona, una moto quizás más para uno que para dos, pero que consigue aunar su sencillez mecánica con un aspecto realmente brillante. La más deportiva de todas, también la más bonita.

Estricta

Kawasaki diseñó su primera W650 como si fuese una moto de los 50, y en ciertos aspectos se podría decir que se ha ceñido a esa época de manera estricta. Por una parte el motor, que afortunadamente dispone de ejes de balance para amortiguar las vibraciones con que nos obsequiaban las twin británicas originales, tiene una arquitectura similar a la de ellas. El accionamiento de la distribución es su seña de identidad, pero hay que ser un especialista para apreciarlo en lo que vale. La primera versión tenía una rueda de 19" delante, que se sustituyó en la 800 cc por una de 18", igual que la trasera. Estas llantas de gran diámetro de radios, que pesan lo suyo, junto a los 27° de ángulo que tiene la pipa, la convierten en una moto muy estable, pero también relajada en sus reacciones. De las cuatro es a la que menos le gusta ir deprisa, es una moto para pasear, especialista en trazadas limpias y en ir a velocidad constante.

La Kawasaki W800 en una moto muy estable incluso a alta velocidad, pero también relajada en sus reacciones

En la versión Cafe, con su manillar tipo murciélago, llevas las manos más bajas, y tienes algo de protección por el carenado de faro, pero no mucha. La W800 cumple estrictamente con la homologación A2, y sus 48 CV son más que suficientes para lanzarla a una buena velocidad, no se trata por tanto de una moto especialmente lenta, aunque en la carrera de la liebre y la tortuga aplicaría más bien la táctica de la segunda. El motor, a pesar de su apariencia externa es moderno por dentro, pero de carrera y piernas largas, con una respuesta muy buena a medio régimen, que se extiende hasta más allá de las 6.000 rpm, que es donde tiene la potencia máxima, el régimen más bajo de todas. Su caja de cambios de cinco relaciones realmente no necesita ninguna más. No vibra casi y tiene el sonido característico de las británicas de antaño, sordo, pero ya bastante contenido por las nuevas homologaciones. Esta temporada la W800 ha vuelto con un disco trasero que sustituye al tambor previo, cuestión de poder pasar la homologación que obliga a disponer de ABS. Es su principal cambio respecto a las anteriores. Con dos discos la frenada sigue más o menos igual, se agradecería un segundo disco para emergencias. Las suspensiones tienen un tarado bastante blandito, lo que te incita todavía menos a apurar la entrada en las curvas. La moto necesita esfuerzo para girar con rapidez y si la descompones en la entrada haciendo topes con la horquilla no la ayudas. Su posición de conducción, a pesar del manillar bajo es bastante turística, lo que redunda en el confort de marcha, que es su seña de identidad, una moto en la que el acero está presente en prácticamente todo el bastidor, lo que también la convierte en la más pesada del grupo. Sin duda la moto más tranquila, un modelo con imagen clásica y también con su funcionamiento.

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Detenida en el tiempo

Resulta curioso que la Royal Enfield Continental GT sea la moto más moderna del grupo, no sólo por el lanzamiento de este modelo concreto, sino también por su diseño. La firma india se ha caracterizado durante más de medio siglo por vivir de las Bullet, unas motos cuyo diseño se remonta a los años 30 del siglo pasado, hace casi una centuria. Sin embargo, hasta la India avanza y estas motos, que se vendían como churros en el pasado, han necesitado recambio. El músculo económico de la compañía la ha permitido reaccionar convenientemente, y unos de sus nuevos productos son estas primeras bicilíndricas, que siguen teniendo el aspecto clásico de la gama de Royal Enfield.

Aunque el aspecto de la Continental GT es tremendamente clásico, su motor es más moderno de lo que parece

Sin embargo, aunque su aspecto es tremendamente clásico, su motor es más moderno de lo que parece, eso sí, de carrera larga, refrigeración por aire y potencia A2. Se trata de una moto hecha para que sea fácil de mantener y en ocasiones con detalles de acabado que son un tanto toscos, no hay que mirar más allá de algunas soldaduras, pero en general es una moto que supera claramente a sus antecesoras. Hay detalles como de los codos de escape, que tienen una unión con las culatas que simulan las de antaño, que estaban roscadas. Lo que si hace la Continental es apurar al máximo la potencia de la categoría, de hecho en el banco la ha superado ligeramente, y además en un motor que tiene una respuesta constante desde abajo y que como el resto de sus compañeros no vibra casi. La Continental GT además corre bastante y aunque con unas suspensiones un tanto blandas y faltas de hidráulico, es posible ir deprisa con ella sin movimientos destacables en lugares despejados. Si nos metemos en camisas de once varas, protesta como le corresponde, pero hace el trabajo. Es junto con la Kawasaki la moto en la que te encuentras más bajo, lo que ayuda en cualquier tipo de maniobras y en ciudad va estupendamente. Además, a pesar del manillar, sigue siendo una moto para compartir, que tiene un buen espacio para el pasajero. También, como vuelve a ocurrir con la W800 su motor tiene un sonido sordo que rememora el pasado, aunque haya sido dotado de culatas de cuatro válvulas o un calado del cigüeñal de 270º.

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

En lo que la Royal Enfield bate a su competencia es el precio. La Suzuki SV650X, una moto que la marca japonesa tiene más que amortizada está su nivel, sólo un poco por encima, pero los 6.600 € de la Continental GT son toda una invitación, al menos a probarla. Lo bueno es que no se trata de nada que tenga contraprestaciones, porque el equipamiento, las prestaciones y la dinámica de la moto son perfectamente comparables a las de sus rivales. No es una moto con la que puedas ir tan deprisa como con la Scrambler o la Suzuki, pero vale para todo, tiene estilo y, desde luego, nadie la podrá decir que es imitadora de nadie.

¿Qué hace una chica como tú?

En un sitio como éste. Es lo que decía la canción de Burning, y es una frase que se puede aplicar a la perfección con la SV650X. Conceptualmente es una moto más moderna que el resto, incluso que la Scrambler. Tiene un motor V2 refrigerado por agua, con carrera corta que alcanza más régimen que cualquier otro de este conjunto. En realidad se trata de una SV650 que ha sido tratada con unos manillares más bajos y una pequeña cúpula, el mismo trabajo que se ha hecho con las demás respecto a otras versiones, pero partiendo de motos con un estilo más clásico. En este sentido la Suzuki puede sacar partido de su mecánica, que cuenta además de con este motor con un chasis multitubular como el de la Scrambler, y no como los de doble cuna de la Kawasaki y la Royal Enfield, directamente derivados de los que Norton estrenó con su Manx a finales de los 40, también con dos discos delanteros, aunque mordidos con pinzas flotantes de dos pistones, y también con un sistema de suspensión que cuenta con bieletas traseras. Es la única que no equipa llantas de radios, lo que la resta imagen clásica, pero la permite estar equipada con neumáticos sin cámara, además es junto a la Ducati la que utiliza llantas de 17" con medida ancha, lo que la sitúa a un nivel superior en lo que respecta a comportamiento deportivo. Es en este sentido en el que destaca, con cifras muy parejas a la Scrambler, aunque con un motor que tiene una mayor estirada. La respuesta es buena, no tiene tantos bajos como la Kawasaki o la Royal Enfield, pero si mucho mayor empuje desde medio régimen. Tampoco es un propulsor que vibre mucho por su V abierta, en realidad s define por hacerlo bien todo sin destacar en un punto concreto.

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Si la miras ves que frente a las formas redondeadas del resto, es una moto con una estética mucho menos personal, líneas más angulosas y habituales, en las que el pequeño carenado destaca precisamente por salirse de la línea general. El chasis multitubular es bastante rígido y también ágil y estable, en este sentido la Suzuki es con la que más fácil es ir deprisa entre curvas, pese a que no tenga una dirección tan cerrada como la de la Cafe Racer. Su posición es bastante natural, las manos más bajas no afectan mucho respecto a la SV650 normal, pero proporcionan una mayor libertad de movimientos en las curvas. En ciudad funciona muy bien por la suavidad de su conducción en general y por lo estrecha que es, que facilita llegar bien al suelo y las maniobras. No tiene el carisma de alguna de sus compañeras, pero es el precio que hay que pagar por una moto que podríamos considerar convencional que se mete en su terreno.

La Suzuki SV650X conceptualmente es una moto más moderna que el resto, incluso que la Scrambler Café Racer

En un momento en el que una moto ya no tiene que ser ni la más rápida ni la más efectiva, en el que el gusto y el carácter marcan más, cada uno de estos cuatro modelos tiene su propia idea de lo que es una café racer, desde la más radical de la Scrambler a las más tranquilas de la W800 o la Royal Enfield, la Suzuki es quizás un punto medio entre ambos conceptos, salpicado por un diseño que no se deja llevar por sus ancestros.

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Scrambler Café Racer

  • El motor V2 clásico de Ducati se distingue por su distribución desmodrómica, en este caso con dos válvulas en cada culata y refrigeración por aire, que ha sido actualizado en numerosas ocasiones.
  • Hay algunos detalles que distinguen este modelo respecto a otras Scrambler, y uno de ellos es el sistema de escape con dos salidas que recorre el lateral derecho de la moto.
  • Como es habitual en la marca, el chasis multitubular de acero encierra al motor y se une a un basculante de aluminio con forma de banana para anclar directamente en uno de sus lados el amortiguador trasero.
  • Aunque la carrocería es similar a la de otros modelos, las diferencias planteadas por la óptica delantera o las tapas laterales, además de la decoración, hacen perfectamente identificable a la Café Racer.

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Ficha ténica Scrambler Café Racer

Kawasaki W800 Cafe

  • El motor de dos cilindros paralelos verticales está calado a 360° como era tradicional en los clásicos británicos, y en esta ocasión cuenta con un accionamiento de la distribución por eje rey.
  • Con un cambio de cinco relaciones y unos pistones de carrera larga, la W800 tiene el propulsor más tradicional de todos, aunque no le faltan las cuatro válvulas en cada culata.
  • El chasis de doble cuna cerrada es desmontable para extraer el motor. El acero es la base del chasis, ya que el basculante también lo es. La suspensión trasera está confiada a un par de amortiguadores paralelos.
  • Las diferencias de la versión Cafe respecto a la Street son el manillar bajo y la cúpula del faro. Todos los modelos de esta temporada cuentan con un disco de freno trasero que sustituye al anterior tambor.

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Ficha técnica Kawasaki W800 Cafe

Suzuki SV650X

  • El V2 a 90° es todo un clásico en el mercado, ya que ha equipado decenas de motos de tres modelos diferentes. Con cuatro válvulas en cabeza, es el único que emplea un sistema de distribución DOHC.
  • El chasis multitubular de acero es similar al que montaban las Gladius en su momento, que permite una moto bastante baja con el motor colgado.
  • La suspensión trasera cuenta con un amortiguador que actúa por medio de bieletas progresivas, y también es el único que cuenta con regulación de hidráulico de extensión.
  • Las llantas de aleación muestran a las claras que la SV650X es la moto en la que menos trabajo se ha realizado para adaptarla a su nuevo enfoque.

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Ficha técnica Suzuki SV650X

Royal Enfield Continental GT

  • El motor de dos cilindros tiene un aspecto exterior más convencional de lo que realmente es, porque su cigüeñal está calado a 270°, como ya empieza a ser habitual en los twin modernos. La distribución cuenta con cuatro válvulas en cada cilindro y el cárter incluye ejes de equilibrado.
  • El bastidor tubular de acero tiene una doble cuna cerrada totalmente tradicional en la que los escapes salen por su exterior, con un basculante también de acero.
  • Aunque las suspensiones no tienen mucha regulación, sólo precarga en los amortiguadores traseros, éstos disponen de botella de gas separada, lo que les da un aspecto más deportivo.
  • La instrumentación es totalmente clásica, con relojes analógicos convencionales y con la información justa en el pequeño panel digital que incluyen.

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Ficha técnica Royal Enfield Continental GT

Conclusión

Las Café Racer han resucitado después de sucumbir frente a la presión de las motos japonesas, y en parte lo han hecho de su mano. Vivimos en un tiempo en que la diferenciación es fundamental, y en el que muchos usuarios que peinan canas no tienen ningún interés por motos que corran mucho ni que sean las más rápidas entre curvas, simplemente quieren disfrutar de su conducción con estilo propio. Qué mejor que una de estas motos para lucir una buena cazadora y darse un paseo por la sierra. Cada una de las cuatro está en sintonía, pero plantea diferencias. La Scrambler es una moto deportiva, no por concepto, sino por posición y equipamiento, el chasis y el motor de Ducati no necesitan más para reciclarse desde otros planteamientos. La Kawasaki y la Royal Enfield forman un grupo más compacto, cada una con una cierta tendencia, ya que mientras las W800 que te ofrece una conducción tranquila y sosegada, la Continental GT te puede dar alguna alegría más si te apetece de vez en cuando 'darle al puño'. La Suzuki es una invitada a este grupo, una moto mucho menos tradicional, lo que no quiere decir que no sea convencional, pero no tiene el estilo de las otras tres, pese a que el resultado al final pueda ser el mismo. También hay dos grupos claramente diferenciados en cuanto al precio, la Ducati y la Kawasaki superan los 10.000 €, mientras que la Royal Enfield y la Suzuki están por debajo y por encima respetivamente de los 7.000 €. Quien busque rentabilidad lo puede tener claro. La estética también cuenta, pero aquí los gustos mandan, nuestra conclusión es que todas tienen sus bondades, pero si nos ceñimos a lo que se espera de una moto basada en las de los años 50, las dos bicilíndricas en paralelo son las que más se acercan.

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X

Comparativa Café Racer: Ducati Scrambler Café Racer, Kawasaki W800 Cafe, Royal Enfield Continental GT, Suzuki SV650X