Hace no mucho, Peugeot sólo tenía en su catálogo dos modelos: el Satelis y el Geopolis. En pleno 2011 la marca del león añade el nuevo Citystar a una nómina de 20 gamas con motores que van desde los 50 a los 500 cc.
En plena recesión y con un mercado de la moto en caída libre, lo cierto es que Peugeot ha mantenido el tipo cerrando el año 2010 con un crecimiento del 0,7% de cuota de mercado y mejorando su peso específi co en mercados europeos tan importantes como España, Italia, Alemania, Bélgica y Holanda.
Esto ha sido posible gracias a acertadas decisiones estratégicas, como el desembarco en China y su acuerdo con la marca taiwanesa SYM (lo que les ha permitido ampliar su oferta de scooter económicos) y a su trabajo de investigación para mejorar la fiabilidad y calidad de acabados de sus modelos «premium».
En el término medio...
...está la virtud, dice el refrán. Y lo cierto es que desde que en 2007 Peugeot decidiera poner fi n a la comercialización en España del Elystar, echábamos en falta un scooter que estuviera a medio camino entre sus modelos más económicos y los emblemáticos Satelis y Geopolis. El Citystar nace orgulloso de su herencia, pero con una vocación bien distinta.
Se han puesto de moda los scooter compactos cargados de tecnología (el Honda PCX y el Daelim S3 son claros ejemplos) y Peugeot no ha querido dejar pasar más tiempo para dar un golpe de efecto en este segmento, con un modelo que aunque se sitúa por debajo de sus primos Satelis y Geopolis, realmente supone una evolución en todos los sentidos.
El nuevo Citystar pertenece a la nueva categoría de los GT compactos, con buenas protección aerodinámica y capacidad de carga, pero con un peso y dimensiones más contenidas para hacerlo más agil en su uso urbano. Los diseñadores franceses han querido que su frontal nos recuerde al Elystar con esa rejilla central (son sus genes), pero marca la diferencia con una amplia pantalla oscura, una doble óptica halógena y los intermitentes situados en la parte inferior del escudo, algo que se ha puesto muy de moda.
La plataforma plana es realmente amplia y en ella hay espacio sufi cientepara las piernas, seas cuál sea tu talla, e incluso para llevar un par de bolsas de la compra (incluye gancho) entre las piernas. El asiento está a 795 mm, algo más bajo de lo que estaba en el Elystar, y su carrocería se estrecha a la altura de las piernas, por lo que no cuesta apoyar los dos pies en el suelo. Sobre él hay espacio de sobra para conductor y acompañante, que tiene una gran asa trasera donde agarrarse y reposapiés plegables independientes.
Menos decibelios
El trabajo que Peugeot ha hecho en su motor tiene su resultado más visible (o más bien deberíamos decir audible) en su rumorosidad, que ha bajado considerablemente (hasta un 50%, según la marca). Cuando más se nota es al arrancarlo, pues el motor del Satelis 125 4v es muy ruidoso al ponerse en marcha.
Esto ha sido gracias al tratamiento antifricción al que ha sido sometido el motor y a los cambios internos que te especificamos en el recuadro aparte, para sacarle un mayor rendimiento al propulsor minimizando las pérdidas por rozamiento y aumentando su fi abilidad. Así, el motor LFE no sólo es más silencioso, sino más progresivo y menos gastón que el 125 del Satelis (Peugeot lo llama M3A), que ya recibió mejoras en 2010.
En este contexto, aparece el debate sobre el precio, que en nuestra opinión será la clave de su éxito. Somos conscientes de que el esfuerzo de Peugeot tanto en calidad de acabados como en tecnología (se fabrica en Francia) tiene un precio. Pero, por un lado, la coyuntura económica manda y el mercado es muy sensible a los precios y, por otro, el Satelis está ahora en promoción por 2.999 euros y, en buena lógica, el Citystar debería situarse entre 200 y 300 euros por debajo de esta cifra.
