El Mundial de Superbike 2019 terminó en Qatar, donde Jonathan Rea coronó su quinto título con un fin de semana perfecto con pole y tres victorias; Randy Krummenacher se proclamó campeón de Supersport y Scott Deroue venció para hacerse con el subcampeonato detrás de Manu González.
2019 ha tenido dos protagonistas fundamentales: Jonathan Rea y Álvaro Bautista, cuya rivalidad aprenas se ha llegado a trasladar a la pista en forma de grandes duelos directos pero ha duopolizado la categoría reina del WorldSBK, repartiéndose 33 de las 37 victorias de la temporada.
REA, EL ORDEN Y LA LEY
17-16. Con las tres de Qatar, Jonathan Rea no solamente enlazó cinco seguidas, sino que dio la vuelta al apartado de victorias, logrando una más que su máximo rival para rubricar una temporada donde la palabra ha sido remontada, después del varapalo anímico que supuso el fulgurante inicio de su máximo rival.
Impotente ante el súper motor de la Panigale V4R y la infalibilidad del talaverano a los mandos, Rea tuvo que hacer un ejercicio de supervivencia para sumar todos los puntos posibles: en perspectiva, el gran mérito de su quinto título mundial estriba en el coleccionismo de segundos puestos al inicio de curso; en no haber sucumbido a la tentación de dar más de lo que podía y no haber transformado la frustración de no poder ganar en una alocado viaje más allá de los límites que hubiese derivado en caídas y ceros.
En Imola volvió a ganar y renovó su confianza en sí mismo, en su equipo y en su moto. Sabedor de que vendrían escenarios más propicios, se ciñó al plan de salir a ganar pero sabiendo cuándo, dónde y cómo perder.
Con ese mantra y los fallos de su rival, fue equilibrando la balanza de los puntos para luego decantarla drásticamente su favor hasta sentenciar el título con una anticipación que nadie hubiera creído allá por abril y lograr el más importante de sus cinco títulos, restableciendo el orden de Superbike e imponiendo un año más la ley número 1, otrora ley 65: ‘Por muchos candidatos que haya, el título es de Rea’.
BAUTISTA, LA REVOLUCIÓN
La medida del valor del título de Rea la da, quién si no, Álvaro Bautista. Víctima de un mercado cruel y poco meritócrata en MotoGP, el español no llegó a Superbike: irrumpió. Ganando las once primeras carreras, generando una revolución total y elevando el listón de un campeonato que ya gozaba de un altísimo nivel, como se iría demostrando durante el curso.
Si en las once primeras carreras mostró, a la vez, su increíble talento y el descomunal potencial de la Ducati Panigale V4R; a partir de ahí fue víctima de, también a la par, su inexperiencia en el campeonato y la bisoñez de su montura.
Llegaron los errores y Rea se los hacía pagar, con cruentos intereses, cobrándose la deuda moral del inicio de curso. Pasó de sentirse favorito al título a ver cómo se le escapaba entre los dedos cuando entró en un bucle negativo del que ha ido saliendo poco a poco para conseguir arañar un par de victorias más y un puñado de podios, haciendo una temporada más que notable pero dejando la sensación que el espíritu revolucionario que pretendía cambiar el orden del mundial quedó en un reformismo del segundo escalón de mando.
MUCHO PRESENTE, MÁS FUTURO
A la sombra del duopolio se han ido buscando el brillo tres pilotos de futuro y mucho presente, peleando una tercera posición que al final se quedó Alex Lowes. A sus 29 años es el mayor de los tres y el único de ellos sin victoria en 2019, pero alcanzando lo que le había faltado en las temporadas anteriores: una enorme consistencia, basada en la minimización de errores y que el año que viene le llevará al desafío de ser compañero de Rea en Kawasaki.
Sobre todo, ha batido a su compañero Michael van der Mark, que a sus 27 años sigue dando muestras de gran potencial pero no termina de consolidarse en lo alto, desdibujándose en algunas carreras, aunque tampoco le ayudó lesionarse en el que parecía ser su mejor momento tras su único triunfo del año en Jerez.
Quinto al final pero tercero en sensaciones ha sido Toprak Razgatlioglu, que acaba de cumplir 23 años y en Qatar vio truncada su racha de rondas seguidas en el podio que se extendía desde Imola. Ha subido al cajón en ocho circuitos de los trece del calendario, solo superado por Rea (13) y Bautista (11). Sus dos victorias en Magny-Cours fueron su consolidación como estrella del futuro, que será azul Yamaha.
Merece mención Loris Baz, que llegó con el año empezado al nuevo proyecto Ten Kate Yamaha y ha flirteado con el podio en muchas ocasiones. Con 26 años, el larguirucho francés tiene cuerda para rato, y Superbike es su casa.
DESAFIANDO EL PASO DEL TIEMPO
La cruz de la moneda son tres protagonistas de los últimos años, que en 2019 han pasado a un segundo plano. Empezando por Chaz Davies, que a sus 32 años ha tenido una temporada dificilísima, con un comienzo para olvidar en el que no se hacía con la V4R. Poco a poco, a la sombra de Bauti, comenzó a mejorar y salvó el año con una victoria y una decena de podios.
El año de Tom Sykes (34 años) viene marcado por su cambio a BMW, a la que ha conseguido llevar al podio cuatro veces, siendo la punta de lanza de un proyecto interesante pero que aún está lejos de Kawasaki, Ducati y Yamaha. Le sustituyó en Kawasaki Leon Haslam, que a sus 36 años y tras un buen inicio de curso solo pudo mantener una regularidad que, sin brillantez, se torna en discreción. Otros clásicos británicos como Eugene Laverty o Leon Camier han pasado el año entre lesiones y problemas técnicos.
En clave española, Jordi Torres ha tenido un año difícil donde ha luchado hasta el final por el top ten de la general, terminando undécimo y cuarto independiente. También estuvo Héctor Barberá, logrando tres puntos en cuatro carreras.
MELANDRI, ADIÓS POCO A POCO
Tras quedarse sin sitio en Ducati oficial, Marco Melandri aceptó la oferta del GRT Yamaha con apoyo total de fábrica, en una última oportunidad de asaltar el título de Superbike. La temporada comenzó con un podio en Phillip Island y sin bajarse del top 6 en de Australia y Tailandia. Sin embargo, a partir de ahí llegó, y aunque se desquitó con dos podios en Jerez, tras la cita de Donington Park anunció que colgaría el casco a final de temporada.
Desde entonces no ha vuelto a acabar entre los cinco primeros y daba la sensación de estar mentalmente retirado, en lo que casi se puede decir que ha sido un adiós poco a poco de uno de los pilotos más emblemáticos del siglo XXI: llegó a Superbike como campeón del mundo de 250cc y subcampeón de MotoGP; y también fue subcampeón, disputando 189 carreras con 22 victorias y 75 podios.
WSSP: KRUMMENACHER CAMPEÓN
Líder desde la primera carrera del año, Randy Krummenacher certificó el título de Supersport en Qatar ante su compañero Federico Caricasulo, con el que ha mantenido un duelo todo el curso con permiso de Jules Cluzel y la irrupción final de Lucas Mahias, que con su Kawasaki ha cortado el monopolio de Yamaha.
En una temporada de más a menos, Krummenacher supo gestionar el final de curso lo suficientemente bien como para cerrar un campeonato que había apuntalado en una primera mitad de temporada intachable para ser el primer campeón suizo de Supersport, y el primero en velocidad desde Thomas Luthi en 125cc en 2005.
En clave española, Isaac Viñales ha terminado el año encadenando tres podios, demostrando que tras un periodo de adaptación está preparado para pelear en 2020 por el único mundial que España no tiene.
María Herrera hizo historia al ser la mujer con más puntos de la historia de la categoría antes de ser sustituida por Dani Valle; Héctor Barberá tuvo un inicio prometedor pero se fue tras dos carreras; Nacho Calero se despide como profesional e hicieron apariciones Miquel Pons, Borja Quero y Álex Toledo.
SSP300: EL AÑO DE MANUGASSS
En el Mundial de Supersport 300 2019 ha sido la confirmación de Manu González, conocido como ‘Manugasss’. El campeón más joven de la historia de la velocidad se ha convertido en el mejor ejemplo del funcionamiento de la escalera WorldSBK, ya que saltará a Supersport con su equipo y apoyo de Kawasaki.
El madrileño ha dado una lección de velocidad y regularidad inusitada para alguien tan joven, superando a los dos pilotos más laureados de la breve historia de la categoría: Scott Deroue y Ana Carrasco, segundo y tercera de la general final. Destaca también Marc García, que retornó a la categoría que conquistó en 2017 logrando volver a la victoria.
Han puntuado Beatriz Neila, Unai Orradre, Mika Pérez, Ferrán Hernández, José Luis Pérez, Borja Sánchez y Francisco Gómez; mientras que no lo lograron Marc Luna, Guillem Erill ni Alejandro Carrión.