Aprobar el examen teórico es el primer paso para conseguir cualquiera de los carnets de conducir de motos que se pueden sacar sin tener experiencia anterior. Es decir, para el carnet A no es necesario hacer ningún examen teórico, ya que se debió superar cuando se aprobó el A2 con el que se debe circular al menos dos años para conseguir el que permite manejar cualquier tipo de motocicleta.
Pues bien, en el camino para conseguir aprobar estas pruebas hay varios pasos que dar. El primero de ellos debería ser estudiar el código de circulación, aunque la mayoría de los aspirantes a conductores optan por realizar tests como los que la Dirección General de Tráfico utiliza para sus exámenes.
Un método válido
A pesar de que conocer el código de circulación (señales, reglas de tráfico, etc.) aseguraría probablemente el aprobado, es complicado memorizar todas y cada una de las normas. Es más, en un test puede haber un par de respuestas muy similares, lo que despierta numerosas dudas que pueden solventarse si con anterioridad ya se ha contestado algo similar en otro test.
Por lo tanto, el entrenamiento a base de resolver un cuestionario tras otro no solo es el más empleado, sino que la propia DGT lo ve como válido puesto que en su propia página web propone tests para que los aspirantes a conseguir el permiso de conducir los hagan y, de ese modo, se preparen para alguno de los exámenes a los que se tendrán que enfrentar.

¿Qué tests hacer?
En la página web de la DGT es posible descargarse tests con los que prepararse. Ni que decir tiene que son los más adecuados para ello, ya que es la propia Dirección General de Tráfico la que los realiza, con lo que están más actualizados que cualquier otro.
No obstante, los futuros conductores tienen varias opciones cuando se presentan al examen teórico. Por un lado están los que se apuntan a una autoescuela para realizar todo el proceso. En ella hay profesores que explican las diferentes situaciones de tráfico a las que deben enfrentarse los motoristas, a la vez que dan consejos sobre las respuestas que han de darse en los tests. Las autoescuelas también suelen proporcionar todo tipo de “posibles” exámenes, tanto de la DGT como de otras fuentes… y claro está, en las correcciones es posible preguntar las dudas que surjan.
Por otro lado, hay quienes prefieren presentarse por cuenta propia y no pagar una autoescuela. En la actualidad hay suficientes sitios web como para hacer tests sin temor a que se acaben, siendo los más adecuados -como hemos repetido- los que propone la propia DGT.
Ventajas de hacer tests
A pesar de que la principal desventaja de hacer este tipo de pruebas y no centrarse completamente n el reglamento es que terminan por desconocerse algunas normas, las ventajas son las siguientes:
- Ayudan a comprender mejor lo que se ha estudiado, ya que se exponen situaciones posibles y hay que decantarse por la correcta.
- Preparan para un examen que tendrá el mismo formato, de manera que no supondrá una sorpresa para nadie.
- Es posible que se haya estudiado bien y se tengan demasiados fallos, de manera que un test sirve como termómetro de los conocimientos del alumno.
- Se pueden hacer tantos como se quieran. De hecho, cuantos más, mejor, pues la preparación será más completa.