La eléctrica Sarolea Manx7 correrá las 24 horas de Le Mans

Después de varios años disputando el TT de la Isla de Man, es el turno de la resistencia.

Nacho González

La eléctrica Saroléa Manx7 correrá las 24 horas de Le Mans
La eléctrica Saroléa Manx7 correrá las 24 horas de Le Mans

La marca belga Sarolea disputará la edición 2019 de las 24 horas de Le Mans, en lo que será un nuevo paso en su escalada dentro del motociclismo de competición. La firma belga, que fue fundada en 1850 como fábrica de armas, empezó a fabricar bicis y componentes en 1892 hasta su desaparición en 1963, teniendo como gran éxito la consecución del primer Campeonato de Europa de Motocross en 1952 con el belga Victor Leloup.

Tras medio siglo de ausencia, la compañía volvió en 2014 apostando por las motos eléctricas, y desde entonces no ha dejado de crecer. Desde ese mismo año, su nombre va ligado al TT Zero, la prueba eléctrica del Tourist Trophy de la Isla De Man; y hace unos meses se postularon para ser elegida como la moto de la categoría eléctrica de MotoGP: la FIM Moto-e World Cup. Loris Capirossi probó el prototipo belga, pero finalmente la elegida sería la Energica italiana.

Lejos de venirse abajo al no resultar seleccionada, rápidamente han puesto el foco en otra apasionante especialidad: la resistencia. Una especialidad que supone una excelente piedra de toque para medir la fiabilidad de la prometedora eléctrica; que ya ha estado en Le Mans en manos del experimentado Troy Corser.

Y van con todo, hasta el punto de que prescindirán de acudir al TT Zero 2018 –después de la cuarta posición de Dean Harrison en el TT Zero de 2017- para centrarse en este nuevo e ilusionante proyecto: compartir pista con las motos de gasolina en una prueba de un día de duración.

Para ello cuentan con su joya: la Sarolea Manx7. Hace unas semanas se supo que ya se puede reservar, por un precio entre 43.000 y 49.000 euros -según la opción de batería seleccionada- una primera tanda de 250 unidades; con más de 200 CV, un par de 450 Nm y, sobre todo, una autonomía de 330 kilómetros con una carga gracias a una batería de 22 kWh.

Precisamente, y siendo conscientes de que hay apartados en los que sufrirán –como su velocidad punta inferior a los 250 km/h-; la firma belga confía en jugar la baza de la autonomía y tener que entrar a boxes muchas menos veces que sus rivales tradicionales, cuyas paradas se realizan cada 50-55 minutos, aproximadamente.

Tampoco han escatimado en componentes: Öhlins FGRT-200 delante, TTX36 detrás, pinzas Beringer radiales de cuatro pistones, chasis monocasco y basculante en fibra de carbono, llantas OZ en aluminio forjado (con opciones en carbono o magnesio) y sistema de carga rápida.

Evidentemente, todos estos datos son los que ofrece la Sarolea Manx7 de serie, por lo que es de esperar y suponer que dichas prestaciones mejoren en su versión de competición. Desde que la marca entró al mercado de las eléctricas, ha querido distinguirse tanto por su elegancia en el diseño como por su ADN racing, y en Le Mans no quieren ser una excepción.

Es más, todavía tienen unos 15 meses para preparar la emblemática prueba de las 24 heures motos, que se disputará en abril de 2019