Suzuki no estará en el Mundial de Superbike 2018 por culpa de la mafia

Finalmente no habrá ninguna GSX-R1000R en la parrilla de la clase reina del WorldSBK.

Nacho González

Suzuki no estará en el Mundial de Superbike 2018 por culpa de la mafia
Suzuki no estará en el Mundial de Superbike 2018 por culpa de la mafia

Suzuki no estará presente en la parrilla de la temporada 2018 del Campeonato del Mundo de Superbike. Este tenía que haber sido el año de su retorno -y así estaba consignado en la parrilla provisional-, pero finalmente será el tercer año seguido sin la presencia de la GSX-R1000R en la categoría reina del certamen de las motos de serie por excelencia.

El motivo es realmente de película: el italiano Andrea Grillini, propietario del Grillini Racing Team, fue puesto en arresto domiciliario hace varias semanas tras ser acusado de emplear su equipo de motociclismo para el blanqueo de capitales. Todo llegó a través de una investigación sobre el clan mafioso de Farao-Marincola llevada a cabo por la Dirección Antimafia del Distrito de Catanzaro; en la que se habla de que Andrea Grillini podría haber estado blanqueando una cifra de dinero que podría rondar los 50.000 euros semanales.

Desde que se conoció la noticia, la continuidad de la estructura en el WorldSBK quedaba en entredicho, y la falta de novedades al respecto hacía pensar que finalmente no estarán en parrilla; algo que ha quedado confirmado con las declaraciones del que iba a ser uno de sus pilotos, el italiano Christian Gamarino.

Gamarino ha reconocido que está buscando equipo, y que es tarde para encontrar un hueco en el Mundial; valorando el competir en la categoría de Superbike del Campeonato Italiano de Velocidad, el Campeonato del Mundo de Resistencia o el Campeonato de Europa de Superstock 1000. “Me gustaría mucho poder hacer el CIV y resistencia”, ha admitido en Corsedimoto el joven italiano.

Gamarino iba a debutar de la mano de Grillini en el Mundial de Superbike, aunque de forma provisional. La estructura italiana anunció a finales de 2017 su intención de dejar de llevar motos Kawasaki ZX-10R para pasar a poner en pista dos Suzuki GSX-R1000R. Aunque sin apoyo directo de fábrica, confiaban en poder aprovechar el hecho distintivo de ser las únicas Suzuki en pista en vez de ser dos de tantas Kawasaki.

El primer piloto en unirse al proyecto fue el veterano italiano  Roberto Rolfo, del que querían hacer valer su vasta experiencia en el mundo del motociclismo para evolucionar la nueva versión de la GSX-R1000R; que ya ha demostrado su potencial en campeonatos como el MotoAmerica –conquistado por Toni Elías-, el All Japan Road Race Championship –con Takuya Tsuda- y el British Superbike –llegando a ganar con Sylvain Guintoli-, entre otros.

El segundo piloto del equipo iba a ser el jovencísimo italiano  Gabriele Ruiu, en lo que claramente suponía una enorme apuesta de futuro por parte de Grillini. Sin embargo, la edad de Ruiu (17 años) no le iba a permitir estar en las cinco primeras rondas de la temporada, al ser los 18 la edad mínima exigida por el campeonato.

Fue eso lo que permitió la incorporación de Christian Gamarino al equipo. El piloto, en el Mundial de Supersport hasta el pasado 2017, iba a hacer su debut entre las Superbike en las cinco primeras rondas; pero finalmente ha sido el encargado de reconocer abiertamente que el equipo Grillini no estará en pista.

Y, por lo tanto, Suzuki tampoco; lo que deja un Mundial con siete marcas: Kawasaki, Ducati, Yamaha, Aprilia, BMW, MV Agusta y Honda.