Una de las prendas fundamentales para la protección sobre la moto son los guantes, puesto que la mano es una de las partes que más suelen dañarse cuando se produce una caída o cualquier otro accidente.
Por esta razón conviene llevarlos puestos tanto en invierno como en verano, a pesar de que la temperatura en esta época del año ascienda de tal manera que invita a evitar cualquier elemento que dé calor. No solo "conviene" llevarlos por nuestra propia seguridad, sino también por la de nuestra propia cartera, ya el uso de guantes al conducir una moto es obligatorio desde 2020, y de no usarlos puede ser motivo de sanción.
Cómo deben ser los guantes en verano
Lo primero que debemos tener en cuenta es que han de responder al principal objetivo para el que han sido fabricados: mantener protegidas las manos del motorista. Por ello, no servirá cualquier tipo por muy “fresquito” que sea.
- Tipología. Una de las decisiones que hay que tomar es para qué se van a utilizar los guantes, o lo que es lo mismo, qué tipo de moto se va a conducir. No son lo mismo unos guantes para pilotar una moto de velocidad que unos para llevar en un scooter en la ciudad.
- Comodidad. Sea el modelo que sea, el conductor debe estar cómodo cuando lleva el manillar. Por eso hay que elegir bien la talla y que sea la que corresponde, puesto que de lo contrario no se estará a gusto cuando se pilota y eso se puede traducir en un percance. Además, en verano las manos tienden a sudar, con lo que el peligro de que los guantes no ajusten bien se multiplica.
- Ligereza. Aunque los guantes ligeros son adecuados para cualquier momento del año -abriguen lo que abriguen- en el verano es aún más importante. La ligereza vendrá dada por que sean modelos con ventilación y lo suficientemente finos como para que no provoquen demasiado agobio. Hay que tener presente que las manos deben tener un buen tacto ya que son elementos esenciales para una correcta conducción. Cabe señalar al respecto que generalmente los materiales serán algo menos resistentes que los empleados en los guantes de invierno, lo que no implica que no protejan lo suficiente.
Como son los guantes para el verano
En cuanto a las características más habituales de este tipo de prendas (para distinguirlas de las que se utilizan en los meses fríos), se podría decir que son las siguientes:
- Llevan ventilaciones para no pasar calor en las manos, aunque hay que comentar que están formadas por microperforaciones que hacen posible que el aire se cuele y las refresque.
- Suelen ser de caña corta, ya que la larga está diseñada para que sean más cálidos. Por ello lo habitual es que no pasen mucho más allá de la muñeca.
- Protecciones en los nudillos y en las palmas. A pesar de que los guantes de moto diseñados para el verano están fabricados con un material mucho más ligero, han de llevar elementos más rígidos y resistentes tanto en las palmas de la mano como en los nudillos, dado que son las zonas que más tienden a sufrir. Eso sí, los nuevos materiales también permiten pequeñas perforaciones por las que se filtre el aire y se consiga aún más frescura en el momento de la conducción.
