La sierra madrileña se convirtió en el epicentro del Yamaha Y-AMT Experience 2025, un evento en el que la marca japonesa —con la colaboración de Motociclismo— puso a prueba su nueva transmisión automatizada en condiciones reales de conducción. Las carreteras de Robledo ofrecieron el terreno perfecto: tramos de curvas enlazadas, desniveles exigentes y paisajes que invitaban a rodar sin mirar el reloj.
El formato fue tan claro como eficaz. Cada jornada se dividió en grupos de diez motoristas, con salidas escalonadas desde las nueve de la mañana hasta bien entrada la tarde. Antes de cada ruta, los participantes asistían a un briefing técnico impartido por Pepe Burgaleta, director de Motociclismo, donde se explicaban las particularidades del sistema Y-AMT, los modos de funcionamiento y cómo exprimir al máximo el potencial de cada moto.
Dos días, dos públicos, una misma sorpresa
La primera jornada estuvo reservada a influencers y creadores de contenido especializados, que convivieron con el equipo de Yamaha, grabaron contenido y rodaron con los nuevos modelos. El segundo día fue el turno del público general, motoristas con experiencia y curiosidad por conocer cómo se siente un cambio automático sin perder el control ni la conexión con el motor.
La reacción fue unánime: el Y-AMT sorprende. La suavidad del sistema, su rapidez al engranar y la posibilidad de elegir entre modo totalmente automático o manejo manual mediante levas transformaron la percepción de muchos sobre lo que significa “cambiar de marcha”.
Cuatro motos, un mismo ADN
Los asistentes pudieron probar cuatro modelos emblemáticos de la gama Yamaha: MT-07, MT-09, Tracer 9 y Tracer 9+, todas equipadas con la nueva transmisión Y-AMT. Cuatro personalidades distintas, una misma filosofía: mantener la esencia del pilotaje, pero con una asistencia inteligente que elimina distracciones.
El comentario más repetido al final de cada tanda era el mismo: “es más divertido de lo que imaginaba”. La fluidez en curva, la precisión en los apoyos y la capacidad del sistema para adaptarse al ritmo del piloto fueron protagonistas de una jornada que se vivió con la intensidad de una concentración entre amigos.
Tecnología con alma
Más allá de la novedad técnica, el Y-AMT Experience 2025 fue una demostración de cómo Yamaha entiende la evolución del motociclismo: tecnología al servicio del disfrute, sin restar sensaciones. Los grupos reducidos, el trato cercano y las rutas cuidadosamente trazadas por la sierra crearon un ambiente de auténtica conexión entre motoristas, técnicos y la propia marca.
Motociclismo y Yamaha: rigor y pasión
La participación de Motociclismo añadió el contexto técnico y la credibilidad que la ocasión merecía. Con Burgaleta como maestro de ceremonias, los asistentes no solo comprendieron el funcionamiento del nuevo sistema, sino el porqué de su desarrollo: reducir la fatiga, optimizar la respuesta del motor y mantener intacto el espíritu del cambio manual.
Dos días de auténtica moto
El evento concluyó con la satisfacción generalizada de los participantes, que se marchaban con la sonrisa de quien ha descubierto una nueva forma de disfrutar de la moto. Yamaha consiguió acercar su tecnología más avanzada al motorista real, y Motociclismo estuvo allí para contarlo.
Dos días de convivencia, rutas y aprendizaje, donde la tecnología y la pasión se fundieron en un mismo sonido: el del motor subiendo de vueltas, sin interrupciones, sin límites.








