Marvin Musquin, «million dollar frenchy»

El piloto francés se ha hecho el premio millonario en la Supercross Cup de Las Vegas. Tres victorias de manga, en treinta minutos de carrera y ¡un millón de dólares!

Marcos Abelenda

Marvin Musquin, «million dollar frenchy»
Marvin Musquin, «million dollar frenchy»

La Supercross Cup ha disputado este fin de semana su séptima edición en el Sam Boyd Stadium de Las Vegas. Una cita con nuevo formato que se estrenó en 2011, pero que en realidad recoge gran parte de la esencia del emblemático US Open Las Vegas que se celebró desde 1998 hasta 2009.

Se mantiene aquél espiritu de carrera al margen de la temporada regular, con grandes premios en metálico para atraer a pilotos de todo el mundo, casi al estilo de los supercross invernales que se disputan en Europa -de hecho, los creadores fueron los mismos que los del emblemático Supercross de Paris-Bercy, que se disputa desde mediados de los 80-.

Supercross Cup Las Vegas, pretemporada 2018

Por su fecha en el calendario, la Supercross Cup parece marcar el final de la campaña 2017, pero en realidad lo que ocurre en Las Vegas tiene mucha más relación con la próxima temporada 2018. Y es que, a efectos prácticos, se trata de una competición de pretemporada, en la que los equipos estrenan las monturas de 2018, aprovechando la carrera como un valioso test, e incluso presentan por primera vez a sus nuevos fichajes. En esta ocasión, se veía a Brock Tickle sobre su nueva KTM Factory, a Justin Bogle con la Suzuki JGR y a Justin Barcia con su nueva Honda privada.

Además, la Supercross Cup también plantea la proyección de un futuro más a medio plazo, por la participación de pilotos habituales de 250 a los mandos de las 450 -única cilindrada convocada en Las Vegas-, como Christian Craig y Jordon Smith, e incluso el estreno de pilotos europeos, habituales de MX2 o MXGP, con vistas a un futuro salto a los estadios norteamericanos. Esta vez, el mayor protagonismo lo acaparaba sin duda el dos veces Campeón del Mundo, Tim Gajser, quien por fin podía debutar en Las Vegas tras quedarse con las ganas en los últimos años. El esloveno ha expresado en numerosas ocasiones su deseo de correr en el Supercross de Estados Unidos en el futuro, por lo que esta vez no ha querido dejar escapar la ocasión de tener su primera toma de contacto.

Marvin Musquin, un as en las tres mangas

Cómo no, otro de los principales alicientes de la cita en el Sam Boyd Stadium lo encontramos en los valiosos premios que se otorgan a los pilotos. El ganador de la jornada, aquel que sume menos puntos tras la disputa de las tres mangas, se lleva 100.000 dólares, pero que pueden ascender hasta nada menos que ¡un millón de dólares! si consigue imponerse en las tres carreras. Algo, que hasta ahora solo había logrado un piloto, Ryan Villopoto, precisamente en la primera edición de la Supercross Cup en 2011 -Justin Barcia, James Stewart, Davi Millsaps, Ken Roczen y Eli Tomac se anotaron las ediciones posteriores, pero sin llevarse «el millón»-.

Marvin Musquin se ha convertido ahora en el segundo ganador «millonario», tras una actuación sencillamente impecable durante toda la velada, demostrando por ahora que el complicado papel de sustituir a Ryan Dungey como jefe de filas en KTM Factory no le viene demasiado grande. Musquin recurría a sus mejores bazas en la primera de las mangas, tras un intenso duelo con Eli Tomac, a quien el francés superaba en las primeras vueltas, buscando inmediatamente la escapada. El de Kawasaki trató de contestar al fuerte ritmo del de KTM, pero no pudo evitar sufrir una fuerte caída en la zona más rápida del trazado, sin graves consecuencias físicas, pero sí las suficientes como para no poder correr en el resto de la velada.

Con Tomac fuera de combate, Musquin (1º/1º/1º) se centró en salir siempre delante y mantener a raya a su compañero de entrenamientos, Jason Anderson, completando tres mangas impecables, sin apenas errores, que le valían para convertirse en el séptimo ganador de la SX Cup -nadie ha repetido- y dueño del cheque de un millón de dólares. No solo eso, sino que el francés se confirma como uno de los grandes favoritos de cara al Supercross USA 2018.

Jason Anderson (2º/2º/2º) se hacía finalmente con la segunda posición, después de tres mangas sólidas pero con un ritmo ligeramente inferior al de Musquin. Por la tercera posición, lucharon hasta la última vuelta Dean Wilson (3º/5º/3º) y Broc Tickle (4º/3º/4º), cuyo empate a puntos se saldó finalmente a favor del escocés. Jordon Smith (5º/4º/6º) ha sido sorpresa de la jornada al hacerse con la quinta plaza en su primera carrera con la 450. Mientras, Justin Barcia (10º/6º/5º) se hacía con la sexta posición, un resultado un tanto regular, teniendo en cuenta las importantes ausencias de pilotos que en Anaheim aspirarán al «top ten» -tales como Ken Roczen, Chad Reed, Cooper Webb, Davi Millsaps, Blake Bagget, Justin Brayton, Cole Seely…-.

El debut de Tim Gajser en los estadios norteamericanos se saldó de una forma bastante agridulce -más de lo primero que de lo segundo-. La participación del de Honda concluía en la sexta vuelta de la primera manga, con una fortísima caída en una complicada «rythm section», en la que ya se había caído Justin Bogle y en la que muchos otros pilotos tuvieron problemas para superar limpiamente durante las tres mangas. El accidente de Gajser se saldó sin aparentes lesiones -a falta de la confirmación de Honda-, pero le impidió tomar la salida en las siguientes mangas. El aspecto positivo es que, tanto en la primera manga como en las sesiones de entrenamiento, el esloveno mostró un ritmo sorprendente para un debutante en «supercross», con tiempos casi siempre entre los cinco primeros, y no muy lejos de Musquin, Tomac y compañía –a un segundo y medio-. Sin duda, una positiva demostración de Tim Gajser de cara a su futuro paso al supercross, con una actuación que en realidad tampoco difiere mucho de lo que hemos visto en MXGP: gran velocidad, mucho talento, poco miedo y fuertes caídas.