Kram It MKS 250 1983

La historia de la marca alemana Kramer es tan fugaz como convulsa, pasando de ser fabricadas sus motos en Alemania a Italia bajo el nombre de Kram It, tras una serie de desastres económicos que limitaron su vida a unos escasos cinco años.

Texto y fotos: J.C. Orengo. Motocicleta propiedad de Quim Figueras.

Kram It MKS 250 1983
Kram It MKS 250 1983

Para indagar en los orígenes de Kramer -más adelante hablaremos de Kram It- tenemos que situarnos en la primera mitad de los años setenta, cuando Fritz Kramer, dueño de un importante concesionario oficial Maico, empezó a preparar con cierto éxito motos de esta marca, desarrollando primero una curiosa suspensión trasera tipo Cantilever pero con doble amortiguador, para pasar finalmente a fabricar una motocicleta con chasis propio, que completaba con piezas de Maico y de la que llegó a fabricar una serie de entre 50 y 80 unidades durante los años 1975/76, con el nombre de Kramer-Maico.

El lógico paso siguiente fue crear una marca propia, cosa que sucedió a finales del mismo 1976, cerrando el primer año con más de un centenar de unidades fabricadas, ya con motor Rotax y la mayoría de ellas, vendidas en Francia, donde el importador desempeñó un papel muy importante, colaborando de forma estrecha con la marca. La producción -cross y enduro- fue paulatinamente en aumento, con modelos que iban desde los 80 hasta los 500 c.c., llegándose a construir unas 1000 unidades hasta que en 1980 la compañía entró en quiebra, supuestamente por la deuda acumulada a causa de los impagos del citado importador francés.

Nueva etapa

La producción de las Kramer pasa entonces a Italia, denominándose primero Kramer Italiana (proyecto alemán, fabricación italiana) y posteriormente, a partir de 1982, Kram It. En aquellos momentos podemos empezar a hablar ya de una moto totalmente italiana, que nada tenía que ver con el modelo original, exceptuando la utilización del motor Rotax. La suspensión trasera tipo Cantilever, que había sido el embrión de la casa madre, fue sustituida por un sistema monoamortiguador con bieletas que se mantuvo hasta el final de la producción, a finales de los ochenta, aunque algunas versiones de pequeña cilindrada iban equipadas con doble amortiguador convencional.

Para acabar de complicar aún más la historia de esta/s marca/s, de forma paralela al paso de la producción a Italia, los restos de la Kramer alemana fueron adquiridos en subasta por Peter Heuser, importador y distribuidor de diversas marcas de motos, quien intentó resucitar la marca original manteniéndola hasta 1984, aunque con modelos tan desfasados que provocaron tal ruina económica en el empresario que éste acabaría suicidándose.

Al final de su existencia, la Kram It pasó por las manos de diferentes propietarios que intentaron en vano mantener viva la marca, apareciendo y desapareciendo del mercado de forma muy esporádica durante los 90.