Álvaro Bautista ha finalizado séptimo en la clasificación combinada de los tres días de test en Sepang, a tan solo 260 milésimas del mejor tiempo global de Maverick Viñales y como mejor piloto independiente, superando a Cal Crutchlow por una décima exacta.
El talaverano ha sido una de las sensaciones de la primera toma de contacto de MotoGP 2017, siendo muy constante en las tres jornadas: tras ser cuarto el primer día, dominado por Casey Stoner, logró auparse a la tercera posición en la segunda jornada, comandada por Andrea Iannone.
ÁLVARO BAUTISTA, A POR TODAS
Por último, ha sido sexto en la tercera y definitiva sesión, unos resultados que refuerzan sus aspiraciones de meterse en el top 5, un objetivo ambicioso fruto de las buenas sensaciones que tuvo en los últimos test de Jerez en 2016, unas sensaciones que ha mantenido en Sepang:
"Es como si el invierno no hubiera existido para mí, parece que me acabara de bajar de la moto del último test", reconoce el piloto el Aspar Team, que confía en seguir en esta línea en Phillip Island: "Veremos si en Australia esta base que tenemos ahora nos vale para estar otra vez desde el primer momento casi en nuestro límite", explica.
Sin embargo, y pese a haber cumplido con creces el objetivo para Sepang, siente que todavía le queda trabajo por hacer con su nueva Ducati Desmosedici GP16: "No es fácil bajar de los dos minutos, sobre todo con una moto tan nueva para mí, con la que todavía tengo que mejorar bastante", confiesa el piloto manchego, que ha relatado el plan de trabajo de los tres días, de los que extrae conclusiones muy positivas:
"Estos días hemos estado trabajando en mi ritmo, en intentar ser constantes y entender la moto. Esta mañana, quería probar a apretar un poco más y he hecho varias vueltas por debajo de dos minutos, así que estoy muy contento. Desde la primera vuelta del primer día me he encontrado muy bien y muy competitivo. Aunque los tiempos son buenos, creo que todavía tengo que limar algunos detalles para el tipo de conducción que requiere esta moto”, concluye.
KAREL ABRAHAM, EXULTANTE
Por su parte, su compañero Karel Abraham también se marcha muy satisfecho de Malasia: "El balance de los tres días de test es muy positivo, cada vez he ido mejorando más y más mi tiempo. Hoy hemos llegado a 2:00.445, que creo que es una marca superior a nuestras expectativas antes de llegar a Malasia.
Los tres días han sido muy productivos. Hemos probado muchas cosas y parece que funcionan, es una sensación muy buena. Me voy de Malasia muy contento y con ganas de continuar mi preparación física para el siguiente test", explica el checo, que ha vuelto a MotoGP un año después de irse al mundial de Superbike.