De forma paralela a la preparación de su primer desembarco oficial en MotoGP –donde caminan a buen ritmo y dando pasos seguros-, la marca austriaca KTM preparaba un proyecto paralelo: más modesto pero, a la vez, más ambicioso en el cortoplacismo. La conquista de Moto2.
Conscientes de la dificultad de medir su prototipo con las mejores máquinas del mundo en MotoGP, el proyecto de KTM aspira a ser global. Dominado con mano de hierro el Mundial de Moto3 en 2016 de la mano del sudafricano Brad Binder, era el momento idóneo para pensar en establecerse en las tres categorías, creando un puente inédito para las marcas desde que desaparecieron por completo las dos tiempos.
KTM es la primera estructura oficial en crear un ascensor entre Moto3 y MotoGP
Sí hay un par de equipos privados con ese sendero trazado: el Estrella Galicia –cuyas raíces se hunden todavía más abajo- o el Team Gresini. Pero hasta ahora no había ninguna estructura oficial de una marca en establecer un ascensor de Moto3 a MotoGP sin tener que cambiar de rellano durante la elevación.
Ganadores en Moto3 y aprendices en MotoGP, la duda residía en saber cuánto tardarían en hacer una moto ganadora en Moto2. Una misión a priori más asequible, pero en la que se han embarcado múltiples marcas desde 2010 para acabar sucumbiendo ante la tiranía de Kalex, que lleva cuatro años seguidos ganando los títulos de pilotos y constructores para desesperación de Speed Up, Tech o Suter, que vuelve tras un año de parón.
Tres marcas a las que KTM ha tardado apenas unos meses en superar, postulándose como la principal alternativa a Kalex con una dupla de auténtico lujo formada por el portugués Miguel Oliveira y el sudafricano Brad Binder, que ya formaron pareja en Moto3 en 2015.
MIGUEL OLIVEIRA, EL CANDIDATO
Ya durante los test privados se han ido moviendo por debajo del radar, sin hacer demasiado ruido, mientras el japonés Takaaki Nakagami seguía demostrando su poderío a una vuelta y su intención de aprovechar el vacío de poder surgido del éxodo masivo de pilotos a MotoGP.
Pero nada más llegar los primeros test oficiales en Jerez, Nakagami se tenía que conformar con la segunda posición en el primer día… porque la primera fue para la KTM de Oliveira con un tiempo de 1:42.316, dejando a Nakagami a casi dos décimas.
Es cierto que estamos en pretemporada y que de momento los equipos no tienen los motores con los que empezarán el año en Qatar, pero es significativo que en apenas unos meses la KTM, en manos del talentoso luso, ya haya sido capaz de rodar 81 milésimas por debajo del tiempo con el que el británico Sam Lowes se hizo con la pole en el último Gran Premio de España.
Es cierto que durante los test privados de pretemporada hasta tres pilotos han rodado por debajo del tiempo de Oliveira en el trazado andaluz, pero el tiempo del luso apenas es décima y media peor que el mejor tiempo de pretemporada en Jerez, a cargo del propio Nakagami.
Kalex es el rival a batir, pero quizás haya que incluir a KTM y Miguel Oliveira en las quinielas al título
Estos son los seis tiempos registrados en pretemporada que rebajan el 1:42.408 de la pole de Sam Lowes –los tres mejores obra del nipón-, que de momento permanece como vuelta más rápida oficial de una Moto2 en Jerez:
Tiempo | Piloto | Moto | Fecha |
---|---|---|---|
1:42.181 | Takaaki NAKAGAMI | Kalex | 16 noviembre 2016 |
1:42.210 | Takaaki NAKAGAMI | Kalex | 22 febrero 2016 |
1:42.280 | Takaaki NAKAGAMI | Kalex | 17 noviembre 2016 |
1:42.292 | Lorenzo BALDASSARRI | Kalex | 22 febrero 2016 |
1:42.303 | Álex MÁRQUEZ | Kalex | 17 noviembre 2016 |
1:42.316 | Miguel OLIVEIRA | KTM | 8 marzo 2017 |
Unos datos que, unidos a la aparente continuidad de la hegemonía de Kalex, que volvió a colar ocho motos en el top 10 –todas salvo Oliviera y la Suter de Dominique Aegerter, séptimo- invitan a pensar que, si bien la marca alemana será un año más el rival a batir, sus vecinos de Austria ya parecen estar preparados para acometer dicha empresa.
Por eso, a las quinielas de favoritos en las que aparecen nombres como Takaaki Nakagami, Franco Morbidelli, Lorenzo Baldassarri, Thomas Luthi o incluso Álex Márquez, quizá sería buena idea ir añadiendo ya el nombre de Miguel Oliveira.