Yamaha culpa a la electrónica de sus motores rotos

Yamaha ha hecho pública la causa de la rotura de sus dos motores en el GP de Italia, el sobrerrégimen en la larga recta de Mugello que la electrónica Magneti Marelli fue incapaz de parar.

Pepe Burgaleta

Yamaha culpa a la electrónica de sus motores rotos
Yamaha culpa a la electrónica de sus motores rotos

No es nada habitual que se rompa un motor Yamaha y en Mugello sucedió dos veces. El primero fue el de Jorge Lorenzo en el warm up, y en la carrera fue el de Valentino Rossi el que sucumbió. Tsuya Kouji, el Project Leader de la Yamaha YZR-M1, ha dado explicaciones, declarando que en ambos casos se trató del mismo problema, procedente de la electrónica.

Esta temporada todos los equipos trabajan tanto con la centralita AGO de Magneti Marelli como su software, y en el caso de los equipos oficiales este segundo apartado es una novedad. Por lo que ha quedado claro todavía no lo tienen tan por la mano como los programas que cada firma empleada hasta el año pasado.

En concreto, la rotura de los dos motores fue causada por el mismo problema, el motor subió de régimen más allá de lo permitido y una válvula chocó con un pistón rompiéndolo. La causa de este sobrerrégimen fue muy concreta, en Mugello la recta tiene una cresta en la que las motos saltan ligeramente. Los pilotos de Yamaha pasan por ella a tope de régimen y con el acelerador totalmente abierto, y en este momento, con la rueda trasera en el aire y sin freno, el motor sufrió una repentina aceleración que a la electrónica no le dio tiempo a parar.

Yamaha se declara responsable del error por su falta de práctica con el sistema. En este tipo de ocasiones, por muy rápido que sea un sistema, es muy complicado que no deje subir de vueltas el motor, a no ser que ya se haya tenido presente lo que puede ocurrir y se actúe en consecuencia previamente, pero el equipo Yamaha no había tenido este problema anteriormente.

Además, parece que Mugello es el único lugar en que todas las variables se unen para que tenga lugar, alta velocidad, máximo régimen, y un salto inesperado con el acelerador abierto al máximo.

El equipo oficial Yamaha además ha investigado a fondo los dos motores rotos de sus Yamaha YZR-M1 para comprobar que las piezas rotas no lo habían hecho porque hubiesen tenido algún tipo de defecto. Ahora, con la lección aprendida, se ha reprogramado la ECU para que no pueda volver a suceder. Más allá de los puntos perdidos por Valentino Rossi, la rotura de los motores no plantea especiales problemas a Yamaha de cara a lo que resta de temporada, porque tiene suficientes motores para acabarla si todo sigue su curso normal.