Sí, es solo el primer día. Pero es que vaya primer día. En su segunda toma de contacto con la KTM RC16 que llevará en la temporada 2022 del Campeonato del Mundo de MotoGP -tras el test de finales de 2021-, el español Raúl Fernández ha acabado en lo más alto de la tabla de tiempos de la primera jornada del Shakedown Test que se está celebrando en el Sepang International Circuit.
Por supuesto, ese primer puesto es anedcótico. Lo que no lo son tanto son las circunstancias que lo envuelven y las comparaciones que se pueden establecer. Eso es lo que ha hecho que el paddock de MotoGP se quede boquiabierto ante el crono de 2:00.898 que el joven madrileño ha conseguido en una sesión en la que apenas ha dado 46 giros.
Esa es la primera circunstancia: no ha dado un número excesivo de vueltas. La segunda es que lo ha hecho en el Tech3 KTM Factory Racing, el equipo que acabó en la última posición del Campeonato del Mundo de Equipos en MotoGP 2021.
Y la más importante es que lo ha hecho en un circuito en el que no es que nunca hubiese estado con la MotoGP (obviamente), es que solamente lo había pisado una vez en su vida: fue en 2019, acabando 14º con la KTM de Moto3. Por ponerlo en contexto con el resto de rookies: Remy Gardner ha corrido seis veces en Sepang, Darryn Binder cinco, Fabio Di Giannantonio cuatro y Marco Bezzecchi tres.
Aquí es donde la circunstancia hace la tangente a la primera comparación: con esa claramente inferior experiencia en el trazado malasio, ha dejado a Gardner a 0,954; a Bezzecchi a 1,114; a Binder a 1,248 y a 'Diggia' a 1,698. Ya de entrada asusta.
Además, también ha acabado por delante de todos los probadores, algo nada habitual en el primer día de Shakedown. El año pasado, cuando se celebró en Qatar, el más rápido de ese primer día fue el hoy ausente Stefan Bradl con la Honda... aventajando en casi dos segundos y medio al mejor rookie, que fue Enea Bastianini. Lorenzo Savadori se quedó a 2,6 segundos, Luca Marini a 2,7 y Jorge Martín a 3,2.
Por hacer la comparación más justa, se puede ir dos años atrás a ver el último Shakedown en Sepang. Entonces, el más rápido fue Dani Pedrosa con la KTM, seguido por los probadores Michele Pirro y Sylvain Guintoli, con Álex Márquez como mejor rookie firmando un tiempo de 2:01.317 en 59 vueltas con la Honda oficial que venía de ser campeona del mundo, más de cuatro décimas peor que el conseguido hoy por Fernández con la moto con la que, el pasado curso, Iker Lecuona y Danilo Petrucci terminaron 20º y 21º respectivamente en la general final.
Todavía más lejos se quedó Brad Binder, que dio 52 vueltas y detuvo el crono en 2:01.616 con la KTM oficial, un tiempo siete décimas y media peor que el de Fernández. Un Brad Binder que poco después conseguiría la primera victoria de KTM en MotoGP al imponerse en Brno, en la que era solo su tercera carrera en la categoría.
Con todas las circunstancias que rodean a Raúl Fernández y las comparaciones con los tiempos de los rookies más recientes a estas alturas de pretemporada, no es de extrañar que el paddock de MotoGP esté alucinando con la increíble adaptación del piloto español... y más tras lo que hizo el año pasado en Moto2, claro.
