Yamaha Nehmesis

El octavo pasajero. Por su aspecto alienígena, bien podría haber formado parte del rodaje de «Alien», sin embargo, una vez más, la realidad supera a la ficción. Bautizada como Yamaha Nehmesis (su creador se llama Sam Nehme´s de BMS Chopper), esta obra de artesanía es un alarde de «customización» desarrollada por encargo de Yamaha Motor Corporation USA.

Yamaha Nehmesis
Yamaha Nehmesis

Jorge Torrecillas
El motor procede de una Yamaha Road Star de 1.670 cc refrigerado por aire. Si te fijas, el piñón de ataque de la Yamaha Nehmesis va cubierto con un embellecedor que a duras penas oculta… ¡el freno de disco trasero! Que se sitúa en el eje de salida del cambio. La suspensión delantera se vale de dos amortiguadores situados arriba, en lo que sería la tija de una moto convencional. La trasera parece que será más convencional, con un sistema cantilever oculto y un amortiguador neumático –que se encarga de elevar la moto al arrancar ya que no dispone de pata de cabra–. Además, el basculante y la horquilla son monobrazo.

El manillar va limpio de cables, con los del acelerador metidos por dentro del propio tubo y las manetas de embrague y freno delantero se ha sustituidas por pedales que, como es lógico, se accionan con los pies. El bastidor es de tipo espina central hecho a mano, partiendo de un tubo vertical situado tras el motor, que luego se curva en forma de media luna y al que se ancla el propulsor por detrás y en la zona en que se ubica la admisión.

Por último, hay que mencionar su monstruosa rueda trasera de 360 mm, que unido a sus excelentes acabados, termina de dar vida a esta obra de arte. Si te ha cautivado la Yamaha Nehmesis prepara de 250.000 dólares, porque se compra por encargo en www.bmschoppers.com.